Cuál es la semilla poco conocida que es una alternativa a la leche de origen animal

Su perfil nutricional la resalta como fuente alimenticia innovadora gracias a que responde a necesidades dietéticas diversas sustituyendo el consumo de otros alimentos

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Gracias a sus propiedades en la actualidad es un sustituto alimenticio muy buscado. (Martin Schutt/dpa)
Gracias a sus propiedades en la actualidad es un sustituto alimenticio muy buscado. (Martin Schutt/dpa)

Las semillas se han convertido en una alternativa popular en la actualidad especialmente entre las personas que llevan dietas veganas o tienen intolerancias alimentarias.

Para aquellos con alergias a productos derivados de la soya o que son intolerantes a la lactosa, la semilla de cáñamo es una solución viable e incluso es adecuada para quienes evitan alimentos de origen animal o que siguen una dieta libre de gluten.

Su popularidad en el mercado alimenticio aumentó debido a que tiene una gran cantidad de propiedades nutricionales. Estas semillas con sabor a nuez, “son ricas en ácidos grasos, vitaminas, proteínas y minerales”, señala la Fundación Canna, organismo que analiza e investiga todo lo relacionado con las plantas de cannabis.

Propiedades y usos de las semillas de cáñamo

Tanto su sabor como su alto grado de nutrientes la posiciona como una de las alternativas más elegidas para sustituir los lácteos. (Amazon)
Tanto su sabor como su alto grado de nutrientes la posiciona como una de las alternativas más elegidas para sustituir los lácteos. (Amazon)

De acuerdo con la Fundación Canna, estas semillas contienen una mezcla equilibrada de ácidos grasos esenciales como el omega-3 y omega-6 que son beneficiosos para la salud cardiovascular. Además, son una fuente completa de proteínas, lo que significa que proporcionan todos los aminoácidos esenciales que el cuerpo humano necesita.

El mismo organismo señala que las semillas de cáñamo también son recomendadas para tener una dieta equilibrada, pues su consumo es clave en la ingesta de nutrientes esenciales.

A pesar de su potencial, el cultivo de cáñamo ha enfrentado restricciones debido a su relación con el Cannabis regulado internacionalmente desde la Convención Única de Naciones Unidas de 1961.

Históricamente, se ha utilizado como fuente de alimentos, fibras y medicamentos. Los registros más antiguos de su uso provienen de China, y hay evidencia de su empleo en la Cuenca del Mediterráneo desde varios siglos antes de Cristo.

Sin embargo, en el siglo XX, las regulaciones internacionales limitaron su cultivo y sólo era posible utilizarla con fines científicos o industriales pues algunas variedades contienen altos niveles de THC, el componente psicoactivo del Cannabis, según información de la Fundación Canna.

A pesar de las restricciones que ha sufrido esta semilla, el interés por el cáñamo ha resurgido gracias a su elevado perfil nutricional y su potencial como cultivo sostenible.

Al existir diferentes especies de cáñamo, en Europa se utiliza una de tipo industrial para producir fibras y textiles y el mismo organismo destaca que sus semillas “no sólo son nutritivas, sino que también son versátiles pues existe la posibilidad de transformarlas en aceite, harina y otros derivados”.

Las semillas de cáñamo en la cocina

Además de utilizarse como alimento es posible hacer leche de cáñamo, lo que aumenta su versatilidad. (Imagen Ilustrativa Infobae)
Además de utilizarse como alimento es posible hacer leche de cáñamo, lo que aumenta su versatilidad. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Las semillas de cáñamo, conocidas por su versatilidad culinaria, se han convertido en un alimento popular entre los deportistas debido a sus propiedades nutritivas.

A pesar de su relación con la planta de cannabis, los niveles del compuesto psicoactivo THC son insignificantes, lo que las hace seguras para el consumo sin efectos psicotrópicos.

Según Directo al Paladar, estas semillas se pueden consumir crudas o ligeramente tostadas, lo que intensifica su sabor a nuez y las hace aún más atractivas para su uso en recetas tanto dulces como saladas.

Su textura crujiente también las hace ideales para una amplia variedad de platos e incluso pueden transformarse en leche vegetal, lo que amplía aún más su uso en la cocina.

Gracias a su bajo contenido en grasas saturadas y su riqueza en nutrientes, al ser remojadas y molidas en agua, producen una bebida cremosa con un sabor ligeramente parecido al de la nuez, lo que la hace atractiva para quienes buscan una alternativa a los productos lácteos tradicionales.

La textura de la leche de cáñamo es generalmente más espesa que la de otras leches alternativas, lo que la hace ideal para consumir sola o como complemento en diversas recetas. Su sabor suave y dulce permite que se disfrute tanto fría como caliente adaptándose a diferentes preferencias y usos culinarios.

Esta bebida elaborada a partir de las semillas de cáñamo, es conocida por su perfil nutricional y su capacidad para integrarse en una dieta equilibrada, según un artículo publicado por HempMeds México, una empresa especializada en la elaboración de estos productos.

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