¿Es recomendable lavar el pollo antes de cocinarlo? Esto dice la UNAM

El lavado del pollo es una práctica común, pero ¿qué tan recomendable es hacerlo?

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En el pollo pueden encontrarse bacterias como Campylobacter sp., Salmonella sp. y Staphylococcus aureus. (Imagen ilustrativa Infobae)
En el pollo pueden encontrarse bacterias como Campylobacter sp., Salmonella sp. y Staphylococcus aureus. (Imagen ilustrativa Infobae)

El lavado del pollo crudo es una práctica que se ha vuelto común debido a que muchas personas la asocian con la limpieza, pero ¿es realmente seguro hacerlo o solo una mala costumbre?

Fue la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), a través de Divulgación de la Ciencia, quien reveló que al lavar el pollo antes de cocerlo se esparcen gérmenes e incrementa el riesgo de intoxicación.

Lo anterior, debido a que en su carne pueden encontrarse bacterias como Campylobacter sp., Salmonella sp. y Staphylococcus aureus, causantes de infecciones estomacales.

“Estas bacterias están en el intestino y es a través del manejo que se le da al pollo para comercializarlo que éste se contamina”, dijo.

Las bacterias pueden salpicar y llegar a los utensilios o a los alimentos cercanos, proceso conocido como contaminación cruzada.

Cuando esto ocurre las bacterias pasan al organismo a través de esas superficies; por lo que la UNAM recomendó cocinar directamente el pollo y dejar que el calor haga lo suyo.

La UNAM recomendó no lavar el pollo previo a su cocción debido a la propagación de bacterias. Foto: X: @DGDCUNAM
La UNAM recomendó no lavar el pollo previo a su cocción debido a la propagación de bacterias. Foto: X: @DGDCUNAM

¿Cómo preparar el pollo?

Para garantizar la seguridad además se deben lavar las manos antes y después de la manipulación del pollo, así como asegurarse de la limpieza de tablas y cualquier utensilio empleado para su preparación.

Durante su cocción se debe procurar que el pollo se cocine por completo, ya que las bacterias presentes en la carne cruda solo se eliminan a una temperatura mínima de 74 °C, según información del Consejo Mexicano de la Carne.

En México, el pollo es la carne más consumida debido a su costo, fácil acceso y sus bondades nutricionales. Según información publicada por la Gaceta UNAM, al año una persona consume alrededor de 30 a 32 kilogramos de este alimento.

Al lavar el pollo pueden esparcirse gérmenes y causar enfermedades.  (Imagen ilustrativa Infobae)
Al lavar el pollo pueden esparcirse gérmenes y causar enfermedades. (Imagen ilustrativa Infobae)

Beneficios de comer carne de pollo

El consumo de pollo ofrece múltiples beneficios nutricionales que lo convierten en una opción popular en la dieta de muchas personas en todo el mundo.

Entre las ventajas más destacadas se encuentra su contenido de proteínas de alta calidad, esenciales para el crecimiento y la reparación de tejidos en el cuerpo humano.

Además, el pollo es una fuente de aminoácidos esenciales que el cuerpo no puede sintetizar por sí mismo y debe obtener a través de la alimentación.

Es bajo en grasas, especialmente si se consume sin la piel. Las partes más magras, como la pechuga, proporcionan una opción saludable para aquellos que buscan reducir la ingesta de grasas saturadas, asociadas con enfermedades cardíacas.

El consumo de pollo también aporta vitaminas y minerales esenciales. Entre las vitaminas, destacan la niacina (B3), la piridoxina (B6) y la riboflavina (B2), fundamentales para el metabolismo energético.

La vitamina B3 ayuda a convertir los alimentos en energía y también actúa como antioxidante. La B6 es crucial para la función cerebral y la formación de neurotransmisores, mientras que la B2 es necesaria para la producción de glóbulos rojos.

En cuanto a los minerales, el pollo es una fuente importante de fósforo, que juega un papel crucial en la formación de huesos y dientes, y en la función renal.

También contiene selenio, un antioxidante que protege las células del daño por radicales libres y es vital para el funcionamiento del sistema inmune y la glándula tiroidea. El zinc presente en el pollo contribuye a la síntesis de proteínas, el sistema inmunológico y la cicatrización de heridas.

El consumo regular de pollo, dentro de una dieta equilibrada y combinado con una variedad de otros alimentos nutritivos, puede contribuir significativamente a una salud óptima. Además, su perfil nutricional lo convierte en un alimento adecuado para todas las edades, brindando los nutrientes necesarios para el crecimiento, la reparación celular y la energía diaria.

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