Consejos para mantener tus frutas y verduras libres de contaminación y pesticidas

Los alimentos de origen vegetal necesitan una limpieza cuidadosa para evitar enfermedades

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En la cocina, la armonía se encuentra en la organización de frutas y verduras, un acto que abraza la nutrición, la comida saludable y la búsqueda constante de una vida sana, resaltando la importancia de las vitaminas en cada elección. (Imagen Ilustrativa Infobae)
En la cocina, la armonía se encuentra en la organización de frutas y verduras, un acto que abraza la nutrición, la comida saludable y la búsqueda constante de una vida sana, resaltando la importancia de las vitaminas en cada elección. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Uno de los factores importantes para mantener un cuerpo saludable es la constante alimentación con frutas y vegetales, sin embargo, en el medio ambiente puede haber microorganismos patógenos y elementos químicos que en ocasiones pueden contaminar la comida y poner en riesgo nuestra salud.

En muchas ocasiones los productos al llegar al supermercado, tiendas o tianguis están contaminados por el polvo o el agua de riego, por lo que es necesario seguir procesos para desinfectarlos.

Aquí te decimos algunos tips de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) que te ayudarán a mejorar tu consumo de alimentos saludables.

Cuatro pasos a seguir para un buen consumo de alimentos de origen vegetal

Escoger los productos en la compra

Siempre será mejor escoger tu mismo la fruta que te llevarás a casa.


(REUTERS/Annegret Hilse)
Siempre será mejor escoger tu mismo la fruta que te llevarás a casa. (REUTERS/Annegret Hilse)

Es común que al comprar fruta tomemos las primeras que veamos, sin embargo esto no quiere decir que sean las mejores opciones. Es necesario confirmar que su superficie esté limpia, con el color propio del tipo de fruta del que se trate y su interior se sienta intacto sin abolladuras .

Para su transporte a casa, es importante poner las frutas y verduras separadas de carnes, pescados, mariscos y especialmente de productos de limpieza.

Conservar adecuadamente los alimentos

Los alimentos, especialmente frutas, verduras, carnes y lácteos, pueden comenzar a descomponerse si se dejan guardados por más tiempo del recomendado. 

(Elika)
Los alimentos, especialmente frutas, verduras, carnes y lácteos, pueden comenzar a descomponerse si se dejan guardados por más tiempo del recomendado. (Elika)

En general conserva las frutas y verduras en el refrigerador. Dentro de ella, deben separarse del resto de los alimentos cocinados y crudos y almacenarse en la zona menos fría (cajones).

Hay frutas y verduras que, por su naturaleza y maduración se pueden conservar a temperatura ambiente, pero siempre por periodos cortos (como cebollas y cítricos en general).

Cuando compres frutas y verduras cortadas y/o peladas, o las prepares en casa, conservarlas en el refrigerador, ya que son mucho más propensas a pudrirse pronto.

En frutas y verduras preparadas y envasadas (bolsas de ensaladas lavadas y listas para su consumo, productos congelados,…) sigue siempre las instrucciones de conservación y preparación antes de su consumo.

Al momento de su uso

Mantén siempre las frutas y verduras separadas de otros alimentos, con especial cuidado cuando se consumen crudas.

Lávate las manos antes y después de la preparación, es necesario ya que tú mismo puedes contaminar la fruta antes de comerla.

Todos los cubiertos y superficies de cocina que vayas a utilizar deben estar limpios y secos.

Corta las partes dañadas (si hay presencia de hongos descarta la pieza entera).

Es importante recortar las hierbas aromáticas frescas (perejil, cilantro, hierbabuena) y los brotes de semillas frescos, como por ejemplo la soja, también deben lavarse y guardarse en frascos preferentemente.

Consejos para lavarlas

Lava tus productos al llegar a casa y antes de consumirlos.

(Imagen ilustrativa INFOBAE)
Lava tus productos al llegar a casa y antes de consumirlos. (Imagen ilustrativa INFOBAE)

Antes de consumir o preparar las verduras, asegúrate de lavarlas, y mantener la piel intacta. Este paso es crucial incluso si vas a pelarlas después, ya que así evitarás que cualquier contaminación superficial se transfiera al interior del alimento durante el corte o pelado.

Usa un cepillo específico para limpiar las superficies de cáscara dura de las frutas (melón, sandía…) y de algunas verduras (pepino, calabaza…).

Sécalas con papel de cocina o con un trapo de cocina limpio y seco.

Si decides emplear productos químicos (desinfectante, cloro, etc…), consulta la etiqueta para saber aquellos que se pueden utilizar y ten en cuenta las indicaciones para su uso correcto.

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