Cuando se habla de prevenir o tratar la osteoporosis sin duda el nutriente vital es el calcio pero también se suele mencionar una vitamina esencial que ayuda a fijar este mineral la cual es la vitamina D.
En este sentido, la vitamina D es la que siempre es asociada con la salud ósea dejando de lado a otra importante vitamina que también juega un papel vital en la salud y fortaleza de los huesos aunque muchas personas lo desconocen.
Se trata de la vitamina C la cual cobra relevancia no solo en la prevención de resfriados comunes, sino también en la salud ósea, especialmente en la reducción del riesgo de fracturas de cadera, tal como ha dado a conocer investigaciones recientes publicadas en el portal especializado Mayo Clinic.
Los estudios mencionados revelan que una ingesta adecuada de esta vitamina puede disminuir el riesgo de una fractura de cadera hasta en un 34%, lo cual amplía el panorama sobre los nutrientes esenciales para el fortalecimiento de los huesos, más allá del conocido rol de la vitamina D en la absorción de calcio.
Y es que la osteoporosis es una condición que afecta a una gran parte de la población y que incrementa el riesgo de fracturas por lo que mantener huesos fuertes es crucial a medida que envejecemos.
Tradicionalmente, la atención se ha centrado en la vitamina D y el calcio como pilares para la salud ósea; sin embargo, estos nuevos estudios destacan la importancia de la vitamina C no solo por su papel en el sistema inmunológico, sino también en la síntesis de colágeno, una proteína fundamental para la estructura ósea.
El colágeno actúa como una matriz donde se deposita el calcio, contribuyendo significativamente a la densidad y resistencia de los huesos. Además, la vitamina C posee propiedades antioxidantes que protegen las células óseas del daño causado por los radicales libres.
Este doble mecanismo no solo fortalece los huesos, sino que también disminuye la probabilidad de fracturas, ofreciendo una protección añadida para la población mayor, más susceptible a caídas y lesiones óseas.
Para disfrutar de los beneficios de la vitamina C en la salud ósea, es vital incluir en la dieta diaria alimentos ricos en este nutriente. Cítricos como las naranjas, limones y pomelos son bien conocidos por su alto contenido de vitamina C. No obstante, otros alimentos como las fresas, los pimientos, el kiwi y el brócoli también son excelentes fuentes que pueden incorporarse fácilmente en las comidas diarias.
Cuáles son los beneficios de la vitamina C para la salud
La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, ofrece una variedad de beneficios para el organismo:
- Función inmune: Fortalece el sistema inmunitario al estimular la producción y función de glóbulos blancos, defensas del cuerpo contra infecciones.
- Antioxidante: Protege las células contra el daño causado por los radicales libres, moléculas inestables que contribuyen al envejecimiento y enfermedades crónicas.
- Producción de colágeno: Esencial para la formación de colágeno, proteína que proporciona estructura a la piel, tendones, ligamentos y vasos sanguíneos.
- Absorción de hierro: Mejora la absorción de hierro no hemo, presente en alimentos vegetales, crucial para prevenir la anemia ferropénica.
- Cicatrización: Contribuye a la cicatrización de heridas al ayudar en la formación de tejido conectivo.
Así que ya lo sabes, además de los muchos beneficios conocidos de esta vitamina, su consumo también ayudará a mantener tus huesos fuertes y a prevenir posibles fracturas en el futuro.