Casi todas las personas toman café. Ya sea por la mañana o por la noche, el café es una bebida que está presente en las cocinas de todo el mundo. Se toma antes de desayuno para despertar bien, o durante una tarde lluviosa para incentivar la plática. Aunque se consume por su sabor, la realidad es que tiene bastantes bondades para la salud.
Tomar café puede tener algunos beneficios indirectos para la piel, aunque los efectos principales provienen generalmente del uso tópico de productos a base de este grano. Sin embargo, la ingesta moderada de café puede contribuir al bienestar general de la piel de varias maneras. Recuerda que la mejor forma de tomar esta bebida es sin azúcar, pues así evitas el impacto negativo del endulzante. Estos son los beneficios:
- Propiedades Antioxidantes: El café es rico en antioxidantes, como el ácido clorogénico y los polifenoles, que ayudan a combatir los radicales libres en el cuerpo. Los radicales libres pueden dañar las células de la piel y acelerar el proceso de envejecimiento. Al consumir café, estos antioxidantes pueden contribuir a una piel más saludable desde adentro.
- Mejora del Flujo Sanguíneo: La cafeína en el café puede mejorar la circulación sanguínea, asegurando un mejor suministro de oxígeno y nutrientes a las células de la piel. Esto puede resultar en una piel más brillante y de aspecto más saludable.
- Propiedades Anti-Inflamatorias: La cafeína tiene propiedades anti-inflamatorias que pueden reducir la inflamación y el enrojecimiento de la piel. Aunque este beneficio se observa principalmente cuando la cafeína se aplica tópicamente, la ingesta de café también puede contribuir a una menor inflamación general.
- Hidratación: El café contribuye a la ingesta total de líquidos del cuerpo, lo que es crucial para mantener la piel hidratada. Una piel bien hidratada tiende a ser más flexible y menos propensa a la sequedad y las arrugas.
- Reducción del Estrés: Beber café puede tener un efecto relajante para algunas personas, lo que puede ayudar a reducir los niveles de estrés. Dado que el estrés es un factor que puede exacerbar problemas de la piel como el acné y la rosácea, disminuirlo puede tener un efecto positivo indirecto sobre la piel.
¿Por qué no es recomendable ponerle azúcar al café?
No añadir azúcar al café tiene varias ventajas que pueden beneficiar tanto la salud general como la experiencia de consumo de café. En primer lugar, el azúcar es una fuente de calorías vacías, es decir, añade calorías sin aportar nutrientes esenciales. Consumir café con azúcar de manera regular puede contribuir al aumento de peso y a la acumulación de grasa no deseada.
El consumo excesivo de azúcar está asociado con un mayor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer. Reducir el consumo de azúcar en el café puede ayudar a mitigar estos riesgos. Además, el azúcar puede causar picos rápidos en los niveles de glucosa en sangre, seguido de caídas bruscas que pueden provocar cansancio y hambre. Evitar el azúcar en el café puede contribuir a mantener los niveles de glucosa más estables.
En términos de la experiencia de consumo, el azúcar puede enmascarar los sabores naturales y complejos del café, impidiendo que se disfruten plenamente sus matices. Al beber café sin azúcar, se puede desarrollar una mayor apreciación por el sabor auténtico del café, incluyendo sus notas aromáticas y perfil de sabor.
Además, el azúcar puede proporcionar un impulso inmediato de energía, pero esto suele ir seguido de una caída abrupta, lo que puede afectar negativamente al estado de ánimo y la concentración. Evitar el azúcar en el café puede ayudar a mantener niveles de energía más constantes a lo largo del día.