Estos son los puertos que controla el CJNG y podrían ser alcanzados por el huracán Beryl

Durante la mañana del 2 de julio, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) alertaron que el huracán Beryl mantenía su desplazamiento sobre el Mar Caribe como un ciclón tropical de categoría 5.

Las previsiones disponibles señalan que Beryl podría tocar suelo mexicano en al menos dos ocasiones entre el viernes 5 y el domingo 7 de julio. Durante su paso por territorio nacional, las autoridades anticipan que podría impactar en varios puertos marítimos, incluidos algunos que el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) mantiene bajo su control.

Alejandra Méndez Girón, coordinadora general del SMN, advirtió que la Península de Yucatán podría ser la primera región afectada, pues Beryl provocaría lluvias torrenciales e intensas en Quintana Roo, Campeche, Yucatán y Tabasco. Se prevé un segundo impacto en los límites de Veracruz y Tamaulipas, aunque en este punto Beryl podría haberse degradado a tormenta tropical.

Por tal motivo, Méndez hizo un llamado a las embarcaciones marítimas y a los puertos que se encuentran en Campeche, Oaxaca, Chiapas, Tabasco y sur de Veracruz para darle seguimiento a los avisos meteorológicos oficiales, con el objetivo de prevenir sus operaciones y evitar daños a la población.

Es precisamente en los estados de Veracruz y Tamaulipas que el CJNG tiene libre acceso a los puertos marítimos para recibir precursores químicos y exportar drogas hacia Estados Unidos, de acuerdo con información de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés).

Como parte de la Evaluación Nacional de Amenazas de Drogas de 2024, la agencia estadounidense reveló que como parte de sus actividades vinculadas al narcotráfico, el cártel liderado por Nemesio Oseguera Cervantes, ‘El Mencho’, “hace uso de los sobornos, intimidaciones y extorsiones a gobiernos y oficiales portuarios privados para garantizar el resguardo de sus cargamentos de precursores químicos de metanfetamina provenientes de China, así como de sus cargamentos de cocaína que vienen de Colombia, Perú y Bolivia”.

En este sentido, la DEA especifica que el CJNG “tiene acceso casi exclusivo a los puertos de Manzanillo y Lázaro Cárdenas, en la Costa del Pacífico, y también puede entrar al Puerto de Veracruz y al de Matamoros en el Golfo de México”.

La instalación marítima tamaulipeca tiene un particular atractivo para la organización criminal, ya que “es una ubicación estratégica cerca de la frontera entre México y Estados Unidos que puede permitirle al Cártel de Jalisco traficar drogas hacia Estados Unidos más fácil y rápido utilizando los puntos de entrada cercanos de la frontera suroeste”.

El control de puertos marítimos no sólo representa una oportunidad para que el cártel reciba y exporte sustancias ilícitas, sino que también se ha convertido en un prolífico negocio, pues la investigación de la DEA señala que esta agrupación cobra un derecho de piso a otras células criminales en caso de que quieran utilizar estos puntos de entrada y salida marítima.