Tres niños murieron envenenados por ingerir líquidos de botellas en la calle, detienen a una de las madres

La comunidad de Tepeticpan, ubicada en el municipio de Eloxochitlan, Puebla, se encuentra sumida en el dolor y la consternación tras la trágica muerte de dos pequeños niños, Alejandro, de 5 años, y Kevin, de 4 años, que ingirieron veneno sin saberlo.

Este triste suceso ha dejado una profunda huella en el corazón de los habitantes, quienes aún no pueden creer lo ocurrido.

Mientras regresaban a casa después de sus clases, Alejandro y Kevin encontraron una botella con líquido tóxico en su camino. Sin conocer el peligro que representaba, ambos niños ingirieron la sustancia venenosa. Las consecuencias fueron devastadoras e inmediatas. Alejandro falleció en el lugar, mientras que Kevin fue trasladado de urgencia al Hospital Integral de Zoquitlán.

Pese a los esfuerzos médicos, la condición de Kevin empeoró y fue necesario trasladarlo al Hospital General de Tehuacán para recibir atención especializada. Lamentablemente, Kevin no pudo recuperarse y murió el pasado jueves 20 de junio, dos días después del incidente.

El fallecimiento de estos dos niños ha conmocionado a Tepeticpan, una comunidad que ahora se enfrenta a una dolorosa realidad. Las familias de Alejandro y Kevin están devastadas, y los vecinos se han unido en su dolor, buscando consuelo y respuestas ante esta tragedia.

Las autoridades locales han iniciado una investigación exhaustiva para determinar cómo una botella con veneno para roedores pudo quedar al alcance de los niños. La prioridad es encontrar respuestas y tomar medidas preventivas para evitar que algo similar vuelva a suceder.

Las investigaciones iniciales sugieren una posible negligencia en la gestión y eliminación de sustancias tóxicas, aunque aún se esperan resultados definitivos. Los familiares de los niños admitieron que los menores ingirieron veneno para roedores que alguien había dejado en el campo. Debido a su corta edad, los primos no eran conscientes de que dicha sustancia era letal.

Las autoridades han hecho un llamado a todos los residentes para que estén atentos y reporten cualquier situación de riesgo, con el fin de proteger a los niños y evitar futuras tragedias.

En uno de los estacionamientos de la Central de Abastos de la alcadía Iztapalapa, una menor murió después de ingerir una bebida que estaba en un envase de suero.

La madre de la menor señaló que su hija había ingerido un algún líquido desconocido que se encontraba dentro de una botella de suero, y luego de esto, la menor se desvaneció.

Ante estos hechos, la madre fue detenida como posible sospechosa y llevada ante la agencia especializada en feminicidios de la Fiscalía capitalina.