Cómo preparar el licuado de plátano y arándano que ayuda a combatir la inflamación y previene enfermedades oculares

Como ya hemos mencionado los licuados son una excelente manera de mezclar diferentes alimentos y obtener diversos nutrientes en un mismo momento. Es por eso que es bueno siempre tener diferentes opciones para incluir en los desayunos.

Y hoy traemos para ti la receta de un licuado que no solo tiene muchos y diversos beneficios para la salud sino que su sabor es realmente delicioso y querrás tomarlo todos los días.

Nos referimos a un licuado de plátano con arándanos, el cual será una excelente fuente de importantes minerales como el potasio y una verdadera bomba de antioxidantes gracias a los arándanos, los cuales, recordemos, también son excelentes para que el cuerpo produzca colágeno de manera natural.

Además de los beneficios que ya mencionamos, incluir este licuado en tus desayunos, de manera regular, pude brindarte un gran número de propiedades, entre las que se encuentran las siguientes:

• Alto contenido de antioxidantes: Los arándanos son ricos en antioxidantes, como las antocianinas, que ayudan a combatir el daño oxidativo y reducir la inflamación en el cuerpo.
• Energía sostenida: El plátano proporciona carbohidratos naturales, principalmente en forma de azúcares y fibra, que ofrecen una fuente rápida y sostenida de energía, ideal para comenzar el día o como un refuerzo energético.
• Mejora de la salud digestiva: El plátano contiene fibra y prebióticos que favorecen una buena digestión y promueven la salud intestinal. Los arándanos también aportan fibra, ayudando a mantener un sistema digestivo saludable.
• Soporte cardiovascular: Ambos frutas contienen nutrientes beneficiosos para el corazón. Los arándanos están asociados con la reducción del colesterol “malo” (LDL) y la presión arterial, mientras que el potasio del plátano ayuda a regular la presión arterial.
• Refuerzo del sistema inmunológico: Los arándanos son una excelente fuente de vitamina C y antioxidantes, que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico. El plátano también proporciona una cantidad moderada de vitamina C.
• Mejora de la salud cerebral: Los antioxidantes presentes en los arándanos han sido asociados con mejoras en la función cognitiva y la protección contra enfermedades neurodegenerativas. El plátano, por su parte, contiene vitamina B6, importante para la producción de neurotransmisores.
• Control del peso: La fibra presente en el plátano y los arándanos ayuda a promover una sensación de saciedad, lo que puede contribuir al control del apetito y, por ende, al mantenimiento o pérdida de peso.
• Mejora del estado de ánimo: Los plátanos son una buena fuente de triptófano, un aminoácido que el cuerpo convierte en serotonina, un neurotransmisor que ayuda a regular el estado de ánimo y puede reducir la depresión y la ansiedad.
• Salud ocular: Los antioxidantes y vitamina C presentes en los arándanos pueden contribuir a la salud ocular, reduciendo el riesgo de desarrollar cataratas y degeneración macular relacionada con la edad.

Incluir un licuado de plátano con arándano en tu dieta puede ser una manera deliciosa y nutritiva de aprovechar todos estos beneficios para tu salud general.

Aquí tienes una receta sencilla para preparar este delicioso licuado y disfrutas de su sabor y beneficios

• 1 plátano maduro
• 1 taza de arándanos frescos o congelados
• 1 taza de leche (puede ser leche de vaca o una opción vegetal como leche de almendra, coco, o avena)
• 1/2 taza de yogur natural o griego (opcional para mayor cremosidad)
• 1 cucharada de miel o sirope de arce (opcional para endulzar aunque el dulzor de un plátano, si está maduro, es más que suficiente)
• 1/2 taza de hielo (opcional para un licuado más fresco)

Preparar los ingredientes:

• Lava los arándanos si son frescos.
• Pela el plátano y córtalo en trozos.

Añadir los ingredientes al vaso de la licuadora:

• Agrega el plátano troceado.
• Añade los arándanos.
• Vierte la leche.
• Agrega el yogur si decides usarlo.
• Añade la miel o el sirope de arce si prefieres un licuado más dulce.
• Añade el hielo si lo deseas bien frío.

Licuar: Mezcla todos los ingredientes en la licuadora a alta velocidad hasta obtener una textura suave y homogénea. Esto suele demorar entre 30 segundos y un minuto, dependiendo de la potencia de tu licuadora.

Servir: Vierte el licuado en un vaso y disfrútalo de inmediato.

Consejo adicional:

• Si lo prefieres más espeso, puedes añadir una cucharada de semillas de chía o avena antes de licuar.
• Para un toque extra de sabor y nutrición, puedes agregar un puñado de espinacas frescas o una cucharadita de polvo de proteína.

Este licuado es una opción nutritiva y deliciosa para el desayuno o como merienda saludable, proporcionando una buena dosis de vitaminas, antioxidantes y energía.