Esta es la mejor hora del día para comer gelatina y aprovechar su colágeno

El delicioso postre es un aliado en contra del envejecimiento

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Gelatinas ricas en colágeno, un postre saludable lleno de beneficios para la piel y las articulaciones. - (Imagen Ilustrativa Infobae)
Gelatinas ricas en colágeno, un postre saludable lleno de beneficios para la piel y las articulaciones. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

La gelatina es un delicioso postre que se consume no sólo por su sabor, sino también por sus propiedades, sobre todo por el colágeno que tiene, que es la proteína más abundante en el cuerpo humano, encontrándose principalmente en la piel, los huesos, los tendones, los ligamentos y otros tejidos conectivos. Su función es proporcionar estructura, resistencia y elasticidad a estos tejidos.

El postre es, entonces, un aliado para quienes se preocupan por la salud de la piel, por lo que no es raro que las personas incluyan a la gelatina en su dieta de todos los días. Se recomienda que se coma durante las mañanas y en ayunas, pues así se absorbe mucho mejor su contenido nutrimental.

Otros alimentos que te ayudan a producir colágeno de manera natural

La producción de colágeno en el cuerpo puede ser fomentada a través de la dieta, consumiendo alimentos ricos en ciertos nutrientes clave. Estos son algunos de los alimentos y nutrientes más relevantes para estimular la producción de colágeno:

El postre es, entonces, un aliado para quienes se preocupan por la salud de la piel (Imagen ilustrativa Infobae)
El postre es, entonces, un aliado para quienes se preocupan por la salud de la piel (Imagen ilustrativa Infobae)
  • Vitamina C: Esencial para la síntesis de colágeno. Se encuentra en frutas cítricas como naranjas, limones y pomelos, además de frutas rojas, kiwis, pimientos y vegetales de hojas verdes oscuras.
  • Proteínas: Proporcionan los aminoácidos necesarios para la producción de colágeno. Fuentes de proteína como el pollo, el pescado, los huevos, los lácteos, las legumbres y las nueces son importantes en la dieta.
  • Zinc: Mineral que juega un rol fundamental en la producción de colágeno. Se encuentra en alimentos como las ostras, carnes rojas, pollo, legumbres, frutos secos y semillas.
  • Cobre: Involucrado en la síntesis de colágeno. Buenos fuentes de cobre incluyen hígado, semillas de girasol, lentejas y almendras.
  • Azufre: Es necesario para la síntesis de colágeno. Alimentos ricos en azufre incluyen ajo, cebolla, puerros y otros vegetales de la familia Allium, así como coles, coliflor y brócoli.
  • Silicio: Contribuye a la formación de colágeno. Se encuentra en alimentos como el plátano, la cebada, las nueces y algunos vegetales de hoja verde.
  • Antioxidantes: Ayudan a proteger el colágeno existente de daños. Blueberries, té verde, chocolate oscuro, y vegetales de hojas verdes oscuras son ricos en antioxidantes.
El colágeno es una proteína esencial en el cuerpo humano y constituye entre el 25% y el 35% del contenido proteico total  - (Imagen Ilustrativa Infobae)
El colágeno es una proteína esencial en el cuerpo humano y constituye entre el 25% y el 35% del contenido proteico total - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Incorporando una variedad de estos alimentos en la dieta, se puede favorecer la producción de colágeno en el cuerpo. Es importante mantener un enfoque balanceado en la alimentación y considerar que los efectos sobre la producción de colágeno también dependen de la genética y el estilo de vida general del individuo.

También, mantenerse hidratado es esencial, ya que el agua contribuye a preservar la elasticidad de la piel. Adoptar estas prácticas dietéticas, junto con una vida activa y protección contra el daño solar, puede ayudar a mantener los niveles de colágeno y promover la salud general de la piel y los tejidos.

Todo sobre el colágeno

El colágeno es una proteína esencial en el cuerpo humano y constituye entre el 25% y el 35% del contenido proteico total, siendo así la proteína más abundante. Se encuentra principalmente en la piel, los huesos, los tendones, los cartílagos y el tejido conectivo, donde desempeña un papel crucial brindando estructura, fortaleza y elasticidad.

Existen al menos 16 tipos de colágeno, pero los tipos I, II, III y IV son los más comunes y tienen diversas funciones:

  • El tipo I está presente en la piel, huesos, tendones y tejidos fibrosos.
  • El tipo II se encuentra principalmente en los cartílagos.
  • El tipo III apoya la estructura de músculos, órganos y arterias.
  • El tipo IV se encuentra en las capas de la piel.

Con la edad, la producción natural de colágeno en el cuerpo disminuye, lo que contribuye a signos de envejecimiento, como arrugas, disminución de la elasticidad de la piel y problemas articulares. Esta disminución ha motivado el interés en suplementos de colágeno que prometen desde mejorar el aspecto de la piel hasta proporcionar soporte a las articulaciones y huesos.

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