Actualmente existen varios tipos de anticonceptivos, cada uno con distintas formas de uso, eficacia y efectos secundarios. Los principales se dividen en:
- Barrera: Impiden que los espermatozoides alcancen el óvulo. Ejemplos incluyen el preservativo masculino y femenino, y el diafragma.
- Hormonales: Alteran el funcionamiento del sistema reproductivo femenino mediante hormonas. Incluyen la píldora anticonceptiva, los parches, inyecciones, el anillo vaginal y los implantes subdérmicos.
- Intrauterinos (DIU): Dispositivos que se insertan en el útero para prevenir el embarazo, pueden ser de cobre o liberar hormonas.
- Naturales: Se basan en el seguimiento del ciclo menstrual y la abstinencia o métodos de barrera durante los periodos fértiles. Incluyen el método de calendario, la temperatura basal y el método de moco cervical.
- Emergencia: Pastillas que se toman después de una relación sexual sin protección para prevenir un embarazo. No deben usarse como método anticonceptivo regular.
- Esterilización: Procedimientos quirúrgicos, como la vasectomía en hombres y la ligadura de trompas en mujeres, que son permanentes.
La elección del método anticonceptivo más adecuado debe basarse en la salud, la frecuencia de la actividad sexual, el número de parejas sexuales y el deseo de tener hijos en el futuro. Es vital consultar a un profesional de la salud para una elección informada y segura.
Métodos anticonceptivos más efectivos
Los métodos anticonceptivos más efectivos se clasifican según su tasa de fallo con un uso típico. Aquí se presentan aquellos con las tasas de eficacia más altas:
- Implante subdérmico: Un pequeño dispositivo que se coloca bajo la piel y libera hormonas para prevenir el embarazo. Su tasa de fallo es del 0.05%.
- Dispositivo intrauterino (DIU): Tanto el DIU de cobre como los hormonales ofrecen una protección superior. El DIU de cobre tiene una tasa de fallo del 0.8%, mientras que los DIU hormonales tienen una tasa de 0.2%.
- Esterilización quirúrgica: La ligadura de trompas en mujeres y la vasectomía en hombres son procedimientos de efectividad alta, con tasas de fallo cercanas al 0.5% y 0.15% respectivamente.
- Inyecciones anticonceptivas: Consisten en la administración de hormonas a través de inyecciones a intervalos regulares (generalmente cada tres meses), con una tasa de fallo del 4%.
- Píldoras anticonceptivas: Incluyen las combinadas (estrógeno y progestina) y las de solo progestina, con una tasa de fallo aproximada del 7% con uso típico.
- Anillo vaginal y parche anticonceptivo: Estos métodos liberan hormonas de manera similar a las píldoras anticonceptivas y tienen una tasa de fallo similar del 7%.
- Método de emergencia: La píldora del día después puede ser utilizada hasta 72 horas tras una relación sexual sin protección, aunque su efectividad disminuye con el tiempo desde la relación sexual.
Es vital destacar que la efectividad de cada método depende del uso correcto y constante del mismo. También, factores individuales pueden influir en la elección y efectividad del método anticonceptivo, por lo que es recomendable consultar a un profesional de la salud para determinar el más adecuado para cada persona.