¿Cuáles son las verduras de temporada? Estas son las que recomienda consumir la Profeco

Consumir las hortalizas que se cosechan en el mes de febrero pueden tener amplios beneficios para la salud, al mismo tiempo que ayuda al medio ambiente y a los productores locales.

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Una góndola de supermercado repleta de verduras frescas y coloridas. Los precios y la inflación no deben ser obstáculos para elegir una alimentación saludable. Prioriza tu salud y tu canasta básica. (Imagen ilustrativa Infobae)
Una góndola de supermercado repleta de verduras frescas y coloridas. Los precios y la inflación no deben ser obstáculos para elegir una alimentación saludable. Prioriza tu salud y tu canasta básica. (Imagen ilustrativa Infobae)

Comer verduras de temporada otorga múltiples beneficios a las personas, no solo en cuestión de salud, sino también para la economía del hogar. Por ello, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) reveló cuáles son las verduras que se cosechan en este mes de febrero y que, por ende, tendrán precios más accesibles en la mayoría de los puntos de venta.

Si bien estas verduras suelen conseguirse a lo largo del año debido a la importación de alimentos, así como el uso de productos congelados, consumirlos dentro de su temporalidad permite un mayor aporte de nutrientes, así como conseguir una frescura inigualable.

¿Qué beneficios tiene comer alimentos de temporada?

Si hablamos de los alimentos de temporada nos referimos a todos aquellos que son cultivados al aire libre, siguiendo y respetando su ciclo natural, sin necesidad de forzar su crecimiento y/o maduración de acuerdo a las características del país o región donde se producen. Debido al ciclo de la temporalidad, estos alimentos son de producción local.

Una góndola de supermercado repleta de verduras frescas y coloridas. Los precios y la inflación no deben ser obstáculos para elegir una alimentación saludable. Prioriza tu salud y tu canasta básica. (Imagen ilustrativa Infobae)
Una góndola de supermercado repleta de verduras frescas y coloridas. Los precios y la inflación no deben ser obstáculos para elegir una alimentación saludable. Prioriza tu salud y tu canasta básica. (Imagen ilustrativa Infobae)

Varios estudios han demostrado que los productos de temporada contienen una mayor cantidad de vitaminas, minerales y nutrientes generales que no solo favorecen a nuestro estómago, pues si se consumen de manera regular también puede mejorar el estado de la piel o el cabello.

En un artículo de la revista Academia de Nutrición y Dieta, la catedrática de la Universidad Politécnica de Valencia e ingeniera agrónoma con Maestría en Nutrición, Dolores Raigón, aseguró que la mayor concentración de nutrientes en los alimentos de temporada se debe a que se encuentran en el punto exacto de maduración, lo que permite que se produzca una mayor absorción mineral y porque “bioquímicamente se han sintetizado en las plantas mayores concentraciones de compuestos bioactivos (vitaminas y compuestos antioxidantes)”.

A pesar de ello, resaltó que no es una regla imprescindible a ocurrir, pues los alimentos están sujetos al tipo de suelo o las prácticas de agronomía que pueden condicionar el estado de la hortaliza. Sin embargo, invita a consumirlos pues sí son más frescos que los productos de importación, además de que tienen un impacto positivo en el medio ambiente.

Fotografía de archivo en la que se registraron las manos de una vendedora y un comprador de alimentos, en el mercado Central de Frutas y Verduras, en la localidad de Tápiales, en Buenos Aires (Argentina). EFE/Juan Ignacio Roncoroni
Fotografía de archivo en la que se registraron las manos de una vendedora y un comprador de alimentos, en el mercado Central de Frutas y Verduras, en la localidad de Tápiales, en Buenos Aires (Argentina). EFE/Juan Ignacio Roncoroni

Cuáles son las verduras de temporada

Por medio de una publicación en la red social X (antes Twitter), la Profeco dio a conocer cuáles son las verduras de temporada del mes de febrero, que son las siguientes:

  • Acelga

La acelga es un super alimento que contiene vitamina A, C y E, por lo que es altamente antioxidante. Estas hortalizas son muy ricas en fibra, además de también contener vitaminas así como altas aportaciones de minerales como el calcio, sodio, potasio. Su consumo aporta al cuerpo humano algunos ácidos grasos como el Omega-3, luteína flavonoides, betacaroteno, y zeaxantina.

De acuerdo con el Poder del Consumidor, el consumo habitual de acelgas puede beneficiar a los huesos por su riqueza en minerales. También son útiles para combatir la anemia y la anemia ferropénica, debido a su alto contenido en hierro y cobre.

  • Ajo

El ajo es uno de los productos más comunes en las cocinas de todo el mundo, pues tiene una amplia variedad de usos culinarios. Una investigación del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo reveló que el ajo no solo tiene propiedades antioxidantes, sino que también cuenta con cualidades cardioprotectoras, anticancerígenas, antiinflamatorias, inmunomoduladoras, antidiabéticas y propiedades antibacteriales.

(Especial)
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  • Berenjena

Este alimento poseen ácido clorogénico, que es un compuesto fenólico antioxidante que evita la degeneración celular, favorece la función del hígado y es muy recomendado para el hígado graso, pues facilita la eliminación de grasas.

Su alto contenido en potasio ayuda a eliminar toxinas gracias al efecto diurético que ejerce sobre el organismo. También cuenta con una acción laxante, por lo que mejora la regularidad y evita el estreñimiento.

 Shutterstock 162
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  • Betabel

El betabel es buena fuente de betacarotenos, antioxidantes y fibra, por lo que fortalece el sistema inmune, previene problemas de la vista y mejora la digestión. Su consumo frecuente previene la aparición de enfermedades cardiovasculares debido a sus propiedades antioxidantes.

  • Calabacita

La calabacita (también llamada calabacín o calabacita tierna) es rica en vitaminas del complejo B (B6, B1, B2y B3), folato, colina y minerales como hierro, manganeso y fósforo; también es rica en vitaminas C y A, especialmente carotenos que funcionan como antioxidantes, es recomendable comerla con cáscara ya que ahí alberga la mayoría de sus nutrientes.

Las propiedades nutricionales del calabacín (Pixabay)
Las propiedades nutricionales del calabacín (Pixabay)
  • Cebolla

La cebolla, cuenta con variedades de color blanco, amarillo, rojo, morado y marrón. En su estado crudo, contribuye a mejorar la digestión, disminuir la presión arterial, inflamación y colesterol; así como prevenir el asma e infartos. Al cocerse, contribuye al combate del estreñimiento y dolores de estómago por gases.

  • Col

La col blanca es rica en vitaminas A, C, E, B y minerales con los que ayuda a mantener una piel sana, fortalece el sistema inmune y te brinda antioxidantes. También puede reducir los niveles de colesterol malo en el cuerpo.

  • Coliflor

De la misma familia de hortalizas, la coliflor se recomienda por su alto contenido de fibra, antioxidantes, vitamina C y ácido fólico. Es también una fuente importante de vitamina B6 y vitamina K. Entre los minerales destacan el azufre, potasio, calcio y magnesio.

  • Chayote

Una verdura Latina por excelencia. Aporta vitamina C, folato, tiamina, riboflamina y piridoxina. Los minerales que aporta son sodio, y potasio que ayuda a mantener los niveles de presión sanguínea.

  • Chícharo

El chícharo cuenta con un alto nivel de nutrientes, en especial proteínas que benefician el crecimiento de los niños y jóvenes. Consumirlo de forma habitual favorece el control de los niveles de azúcar en la sangre, ayuda a prevenir la anemia, a fortalecer el sistema inmunológico y a promueve la salud cardiovascular.

Las verduras de temporada ofrecen mayor frescura y contribución de nutrientes. Además, consumirlas también tiene un beneficio económico. .
Crédito: Profeco/ Twitter
Las verduras de temporada ofrecen mayor frescura y contribución de nutrientes. Además, consumirlas también tiene un beneficio económico. . Crédito: Profeco/ Twitter
  • Chile verde

Una de las verduras por excelencia en México es el chile verde. No solo cntiene vitaminas B y E, también es una buena fuente de hierro y potasio. El chile verde o chile serrano acelera el metabolismo hasta en un 25%, por lo que reduce el apetito y limpia el estómago.

  • Ejote

El ejote, que forma parte de la familia de los frijoles, aporta importantes cantidades de vitaminas como A y C, que ayudan a mantener sano el sistema inmunológico, pero también minerales como sodio, potasio, calcio, yodo, fósforo, magnesio y hierro.

  • Espinaca

La espinaca es una de las verduras que más beneficios tiene para el cuerpo humano. Puede comerse cruda o después de guisarse; en ambos casos, es una excelente aliada del cerebro y los nervios. Los antioxidantes en la espinaca no solo combaten el deterioro celular. Su consumo es bueno para prevenir enfermedades degenerativas como el Alzheimer.

  • Lechuga

Además de que tiene un muy bajo aporte calórico debido a su composición, comer lechuga con regularidad favorece la digestión, es rica en antioxidantes, vitaminas y minerales. También tiene propiedades diuréticas, por lo que es útil en el tratamiento de enfermedades como la cistitis e infecciones urinarias.

  • Papa

La papa es considerada como un alimento básico y económico, que aporta micronutrimentos como: hierro, calcio, fósforo y vitamina C; cubre el 2% de hierro de la IDR (Ingesta Diaria Recomendada) para la población mexicana, el 8% de fósforo y el 15% de vitamina C.

  • Pepino

En su piel se encuentran pequeñas cantidades de beta-caroteno. La vitamina A es esencial para la visión, el buen estado de la piel, el cabello, las mucosas, los huesos y para el buen funcionamiento del sistema inmunológico.

  • Tomate

Los tomates verdes (también conocidos como tomatillos) contienen todos los ingredientes correctos para una óptima nutrición: fibra dietética, niacina, potasio y manganeso, fósforo, cobre y hierro Además, contienen 20% del valor diario recomendado de vitamina C y 1% de vitamina K. También alivia molestias en el estómago, es efectiva para problemas respiratorios y baja los niveles de presión en la sangre.

  • Zanahoria

La zanahoria destaca por su alto contenido de vitamina A, que ayuda a mejorar la vista. También es rica en fósforo, el cual vigoriza las mentes y cuerpos cansados.

Cómo elegir frutas y verduras

La selección adecuada de frutas y verduras es fundamental para garantizar su frescura y calidad nutricional al momento del consumo. Saber elegir productos en su punto justo de madurez evita el desperdicio y asegura una experiencia culinaria óptima. Los consumidores suelen enfrentarse al dilema de cómo escoger estos alimentos para maximizar su vida útil y disfrute.

Para llevar a cabo una elección informada, es esencial prestar atención a ciertos indicativos de frescura y madurez. Frutas con un aroma agradable indican frescura, mientras que el color puede ser un indicativo de su estado. Por ejemplo, en el caso de los plátanos, un color marrón sugiere una madurez avanzada. Otros signos a considerar son la ausencia de magulladuras, golpes o manchas.

En cuanto a las verduras, la firmeza y un color vivo son señales de que están en buen estado. Las verduras verdes, en particular, deben mostrar una textura crujiente. Para alimentos como los jitomates y frutos rojos, se recomienda seleccionar aquellos en su punto exacto de madurez si se van a consumir pronto, y otros menos maduros para un uso posterior.

Elegir bien las verduras ayuda a reducir el desperdicio de alimentos, al mismo tiempo que hace que el uso del dinero sea óptimo. REUTERS/Luis Cortés
Elegir bien las verduras ayuda a reducir el desperdicio de alimentos, al mismo tiempo que hace que el uso del dinero sea óptimo. REUTERS/Luis Cortés

Otro consejo valioso es optar por una amplia variedad de colores en el carrito de compras, lo que ayuda a cubrir un espectro más amplio de necesidades nutricionales.

Estas recomendaciones no solo son útiles para el consumidor promedio, sino que también contribuyen a la reducción del desperdicio de alimentos, un problema significativo a nivel global.

Seleccionar productos en su estado óptimo de madurez alarga su vida útil y disminuye las probabilidades de que terminen en la basura sin ser consumidos. Así mismo, al elegir sabiamente, los consumidores pueden disfrutar de un mejor sabor, textura y valor nutricional de sus alimentos, contribuyendo a una dieta más saludable y sostenible.

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