La ingesta de pan blanco, de cualquier marca, es de lo más popular en todo el mundo, sin embargo, no quiere decir que sea lo más saludable.
Su consumo en exceso puede llegar a ser dañino por su falta de nutrientes, no se trata de NO comer pan, sino de tener opciones más saludables.
Propiedades
La industria del pan asegura que su producto contiene importantes nutrientes, pero también contiene aditivos y conservantes, componentes que mucha gente prefiere evitar. Un pan promedio industrial contiene:
- Harina de trigo
- Agua
- Levadura
- Sal
- Aceite
- Vinagre
- Emulsionante -para estabilizar la masa-.
- Conservadores y agentes para tratar la harina.
Pese a estar elaborado con harina de trigo, durante su proceso de refinamiento pierde todas las vitaminas y nutrientes que posee, le quitan el germen y el salvado del trigo y es allí donde se concentran todos los elementos que son benéficos para la salud. También tiene una alta cantidad de gluten y un alto contenido de sodio lo cual promueve la retención de líquidos.
Consumirlo en altas cantidades e incluirlo en la dieta diaria puede contribuir en el desarrollo de varias enfermedades que afectan al corazón, puede provocar diabetes y obesidad.
Efectos negativos
Estos son algunos efectos negativos asociados con un consumo excesivo:
Aumento de peso. Tiene un alto índice glucémico, puede elevar rápidamente los niveles de azúcar en la sangre y provocar picos de energía seguidos de caídas bruscas; aumenta el apetito y puede contribuir al consumo excesivo de calorías y al aumento de peso.
Riesgo de enfermedades crónicas. Está asociado con un mayor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas, como la diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares, por su alto contenido en carbohidratos refinados.
Falta de nutrientes. Durante su proceso de refinamiento, se eliminan muchas vitaminas, minerales y fibra presentes en el grano entero.
Problemas digestivos. Carece de fibra dietética, lo que puede afectar la salud digestiva, la fibra ayuda a mantener un sistema digestivo saludable.
Saciedad reducida. Debido a su bajo contenido de fibra y su alto índice glucémico, tiende a ser menos saciante, esto puede llevar a un mayor consumo de calorías y contribuir al aumento de peso.
Su reemplazo
Una de las mayores ventajas de consumir pan integral, es que aporta casi las mismas calorías que el pan blanco, pero con un contenido que multiplica por tres la cantidad de fibra, que tiene un efecto saciante, por lo que nos ayudará a comer menos cantidad.
- Pan integral.
- Pan de centeno.
- Pan de avena.
- Tortillas integrales.
- Galletas integrales.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere que “las personas deben consumir 250 gramos de pan por día en el marco de una alimentación saludable, lo equivalente a un pan baguette en peso”. El pan integral es más sano, y brinda más ácidos grasos esenciales, minerales, vitaminas y especialmente fibra, equilibrando el apetito y regulando el tránsito intestinal.