Desintoxicación digital: liberarse de la dependencia tecnológica para mejorar el bienestar

En una época en la que la tecnología nos rodea constantemente, la dependencia de los dispositivos electrónicos se ha convertido en un problema creciente que afecta a personas de todas las edades. La desintoxicación digital emerge como una solución para contrarrestar esta tendencia y recuperar un equilibrio en nuestra vida cotidiana.

La ubicuidad -presencia constante y generalizada en la vida cotidiana- de los dispositivos electrónicos, como teléfonos móviles y tablets, ha llevado a muchas personas a deslizarse inadvertidamente hacia la dependencia tecnológica. La nomofobia, un término acuñado en Gran Bretaña en 2019, describe el miedo irracional a estar sin el teléfono celular.

Esta adicción a la tecnología se manifiesta en comportamientos como revisar constantemente el teléfono en busca de notificaciones, perderse en el scrolling infinito de las redes sociales y preferir las interacciones virtuales sobre las conversaciones cara a cara.

Los adolescentes, en particular, son propensos a pasar largas horas frente a las pantallas de sus dispositivos, lo que puede afectar negativamente su rendimiento escolar y sus relaciones sociales. Sin embargo, este problema no se limita a los jóvenes, ya que los adultos también pueden experimentar consecuencias emocionales perjudiciales, como desgano, depresión e irritabilidad.

Para evaluar su propia dependencia tecnológica, se sugiere apagar el smartphone durante un día y observar cómo se desenvuelve en ese tiempo. La detectar que se puede ser adicto tecnología, se puede realizar varias acciones para mitigarla. También existen lugares que ofrecen programas de desconexión digital, que incluyen actividades como senderismo, clases de fitness, yoga, cocina, cerámica, conferencias y terapias.

Estos destinos proporcionan un respiro de las notificaciones y alertas automáticas, permitiendo a las personas recuperar el control sobre su relación con la tecnología.

La desintoxicación digital ofrece una serie de beneficios significativos, como la reducción del estrés, una mejora en la calidad del sueño y un aumento en la productividad. Su objetivo principal es mejorar el bienestar mental y emocional al reducir la dependencia de las tecnologías digitales que pueden agotarnos.

De acuerdo al psicólogo y coach de vida César Sánchez Santiago, aseguró que la desintoxicación ayuda a fortalecer la concentración y la toma de decisiones, “al eliminar las distracciones digitales que a menudo nos impiden ser productivos y disfrutar de nuestro entorno”.

Para aquellos que deseen embarcarse en un détox digital sin la necesidad de asistir a un costoso retiro, existen consejos prácticos. “Se recomienda desinstalar aplicaciones que puedan distraer, especialmente juegos. Además, es útil establecer momentos ‘phone off’, como apagar el teléfono durante las comidas o mantenerlo en silencio durante conversaciones y reuniones importantes. Establecer un horario para revisar el móvil también puede ayudar a controlar su uso de manera efectiva”, abundó el experto.

El psicólogo sugiere que es evitar el uso del teléfono como despertador y optar por un reloj tradicional. “Mantener el teléfono lejos del dormitorio durante la noche reduce la tentación de revisarlo antes de acostarse, lo que puede afectar negativamente la calidad del sueño debido a la exposición a la luz azul de las pantallas”.

Aseguró que la desintoxicación digital no es simplemente una moda pasajera, “es una respuesta necesaria para abordar problemas de salud mental y emocional relacionados con la dependencia tecnológica”. Recomienda que las personas deben reconocer y tomar medidas para reducir esta adicción.

“Lo cual puede tener un impacto positivo en la calidad de vida y en nuestra capacidad para conectarnos genuinamente con el mundo que nos rodea. La desintoxicación digital ofrece una solución efectiva para combatir esta adicción y mejorar la calidad de vida. Al tomar medidas pequeñas pero significativas”, enfatizó.