En las últimas semanas, los datos epidemiológicos muestran un aumento significativo de enfermedades virales respiratorias como la influenza y el virus sincicial respiratorio (VSR). Además, se detectó la circulación de otros patógenos como el SARS-CoV-2, adenovirus, parainfluenza y metapneumovirus.
Para prevenir y combatir estas patologías estacionales, resulta fundamental mantener un sistema inmune fuerte. Para lograrlo, es preciso tener niveles adecuados de micronutrientes esenciales como lo son el zinc y las vitaminas C y D.
Qué estresa al sistema inmune
Múltiples factores pueden debilitar el sistema inmunitario. Una mala alimentación está directamente asociada a la absorción de nutrientes, ya sea por consumir mayormente alimentos poco nutritivos o dietas restrictivas.
Los reportes epidemiológicos mencionados muestran que los cambios estacionales y de temperatura también afectan la salud inmunitaria. Tal es el caso de la mala ventilación de los ambientes debido al frío o los espacios muy concurridos, los que favorecen el contagio de virus y gérmenes.
Otros factores que estresan al sistema inmune menos conocidos, pero importantes son las actividades físicas extenuantes, ya que incrementan el metabolismo y la pérdida de líquidos. Por ejemplo, la sudoración implica la pérdida de micronutrientes
En tanto, el mal descanso, el estrés y las enfermedades crónicas también debilitan el sistema inmunitario. En esa línea, el uso prolongado de medicamentos como antibióticos, diuréticos y laxantes puede conducir a la pérdida de micronutrientes.
Además, la poca exposición al sol no permite producir suficiente vitamina D, crucial para el sistema inmunitario.
Más allá de los factores que pueden debilitar las defensas del organismo, es relevante tener en cuenta qué ocurre durante un proceso infeccioso una vez que la persona se enfermó.
El organismo aumenta su metabolismo para combatir el patógeno que lo causa, por lo que requiere más micronutrientes. Pero los síntomas de la enfermedad (falta de apetito, vómitos, diarrea, fiebre, entre otros) conllevan una pérdida de los mismos. Entonces, se genera un círculo de oferta reducida y demanda aumentada de micronutrientes. Es allí donde cobra especial relevancia la posibilidad de agregar suplementos.
“Los micronutrientes aportados a partir de la dieta o de la suplementación son sustratos esenciales y necesarios para las múltiples funciones del sistema inmune, entre ellas la intensidad y durabilidad de los síntomas de afecciones virales. Adoptar medidas de inmunocuidado que contribuyan a fortalecer nuestras defensas, no solo potencia nuestra capacidad de respuesta ante agentes patógenos, sino que también promueven un estado de bienestar que beneficia a nuestra salud de forma integral”, explicó la Dra. Luciana Armengol (MN 112756), especialista en Medicina Farmacéutica y Sr. Medical Manager Bayer CH Cono Sur.
Vitaminas C, D y zinc: pilares del sistema inmunitario
Numerosos estudios han demostrado que la vitamina C es muy importante para el sistema inmunitario.
Más allá de ayudar a mantener la piel y las mucosas sanas, y de actuar como un potente antioxidante, también mejora la actividad de ciertos glóbulos blancos que combaten las infecciones. Además, regula la respuesta del sistema inmunitario y puede acortar y aliviar los síntomas del resfriado común.
En tanto, la vitamina D no solo es buena para los huesos, sino que también actúa como inmunomodulador, fortaleciendo el sistema inmune ante la amenaza de infecciones. Por otra parte, mejora las defensas del cuerpo, ayuda a producir sustancias antimicrobianas que combaten microorganismos y reduce la inflamación en los pulmones, en caso de infecciones virales.
Por su parte, el zinc es crucial para muchas funciones del sistema inmunitario, como la producción de células y anticuerpos que combaten infecciones. Además, tiene un efecto antiviral que impide que los virus se reproduzcan.
Redoxon Triple Acción: un producto clave para esta época
“Adoptar hábitos que tiendan a fortalecer nuestra inmunidad es una acción de autocuidado clave para la salud y bienestar. De esta forma se contribuye a prevenir de manera segura distintas afecciones, reforzando nuestras defensas. Por ejemplo, consumir alimentos ricos en nutrientes, incorporar vitaminas y/o suplementos nutricionales, descansar bien, realizar actividad física y reducir niveles de estrés, son acciones de autocuidado. En Bayer creemos que tenemos la responsabilidad de brindar productos confiables para las necesidades del consumidor, por eso promovemos el autocuidado basado en ciencia”, concluyó la Dra. Armengol.
En temporadas de aumento de enfermedades virales, los suplementos dietarios son especialmente útiles. Este tipo de productos ayudan a las personas a reponer o mantener los micronutrientes que participan de una función inmunitaria normal. En esa línea, Bayer cuenta dentro de su porfolio de productos para la categoría de nutricionales con Redoxon Triple Acción, una fórmula que combina vitamina C, vitamina D y zinc, tres micronutrientes esenciales para el sistema inmune.
Disponible en formato efervescente con sabor a naranja y en comprimidos recubiertos, este suplemento puede tomarse diariamente según las indicaciones del envase. Para más información, se puede ingresar aquí.