¿Qué tan raro es pasar los 100 años de edad? Actualmente, el récord de la persona más longeva del mundo es de la japonesa Tomiko Itooka, con 116 años y tres meses, tras el fallecimiento de la española María Branyas Morera, con 117 años.
De igual manera, llegar la centena de años es motivo de festejo, por eso es que en Sylvania, Ohio, un emotivo evento reunió a la familia de dos hermanas gemelas que alcanzaron un hito verdaderamente excepcional: Marilyn Wright y Madelyn Casper celebraron juntas su cumpleaños número 102.
Acompañadas de sus seres queridos, incluidas varias generaciones de hijos y nietos, las hermanas disfrutaron de una celebración en la que la longevidad fue motivo de asombro y alegría. Conocidas como las “gemelas Johnson” en su juventud, estas mujeres nacidas en 1922 en Toledo, siguen demostrando que el tiempo no ha erosionado ni su vínculo ni su vitalidad.
Lo que hizo que este evento del 15 de septiembre pasado fuera aún más especial fue el hecho de que, a pesar de su avanzada edad, Marilyn y Madelyn siguen gozando de una envidiable salud tanto mental como física, lo que su familia describe como una verdadera bendición. “Nos sentimos muy afortunados de tenerlas con nosotros”, afirmó Julie Fox, hija de Marilyn. Este nivel de bienestar en una etapa tan avanzada de la vida es algo que, según sus hijos y nietos, enriquece cada momento que pasan juntas.
Cuando se les preguntó sobre el secreto para llegar a los 102 años con tan buen estado, Marilyn no dudó en bromear diciendo que una de las claves es disfrutar de “un cóctel antes de la cena”. No obstante, más allá del humor, las hermanas compartieron un mensaje que consideran central en sus largas vidas: la amabilidad hacia los demás. Marilyn enfatizó la importancia de ser “amable con el prójimo” y de dejar atrás el odio, un mensaje que ambas comparten con orgullo, tanto en su familia como en su comunidad.
A lo largo de los años, Marilyn Wright y Madelyn Casper han mantenido una conexión única que parece ir más allá de la distancia física o el paso del tiempo. Desde su infancia, las gemelas siempre han estado en sintonía, tanto en los momentos cotidianos como en las decisiones importantes de la vida. A pesar de vivir en ciudades distintas, esta conexión se refleja en pequeños detalles que continúan sorprendiendo a su familia. “Pensamos igual y hacemos cosas similares, incluso cuando no estamos en la misma ciudad”, explicó Marilyn al canal de televisión estadounidense, WTVG, durante la celebración de su cumpleaños.
Un ejemplo de este “poder” casi telepático es que en más de una ocasión, ambas han preparado la misma comida el mismo día sin haberse comunicado previamente. Marilyn recuerda una llamada en la que le dijo a su hermana: “Madelyn, acabo de hacer un pastel de carne. Ojalá pudieras estar aquí”, a lo que Madelyn respondió, sorprendida: “Yo también hice uno”. Estos momentos, que podrían parecer simples coincidencias, son una prueba del profundo vínculo que han mantenido a lo largo de sus más de cien años de vida.
Thomas Casper, hijo de Madelyn, compartió la emoción de la familia por este notable aniversario: “Pensamos que teníamos que celebrar esto a lo grande”.
El principio de ser amable ha guiado sus vidas y es lo que inculcan a sus 13 hijos. Marilyn, en tono reflexivo durante su cumpleaños, compartió una de sus convicciones más profundas: “La palabra odio debería desaparecer del diccionario”. Para ellas, la clave de una vida plena y satisfactoria radica en la bondad y el respeto hacia los demás, un mensaje que ha resonado no solo en su círculo familiar, sino también en su comunidad.