Una pareja es aquella persona con la que podremos ser nosotras mismas, sin miedo a que nos juzguen, donde podremos expresarnos sin temor a represalias y con quien, básicamente, disfrutaremos de la vida. Una relación sana se basa en el respeto, la confianza y el apoyo mutuo y si alguna de estas partes no está presente, tendremos que activar la señal de alarma. A pesar de que, una relación sea sana, eso no implica la ausencia de dificultades, ya que, ninguna es perfecta. Pero, sí significa que ambas partes trabajan en la adversidad y tienen el mismo objetivo: solucionar los problemas y llegar a un acuerdo.
Aunque, hoy en día, estemos más concienciadas de los peligros del amor tóxico e intentemos huir de él, esto no ha sido siempre así. En cierta manera, podríamos llegar a decir, que la sociedad e incluso la cultura nos han dirigido a este punto. Basta con escuchar algunas canciones populares como Blanco y negro de Malú, donde se menciona: “Tú eres quien me hace llorar, pero solo tú me puedes consolar”. O con hacer un repaso al refranero: “Quien bien te quiere, te hará llorar”.
Es cierto que cuando alguien se encuentra inmerso en un lazo tóxico no es consciente de las actitudes o señales que indican que hay algo que no funciona bien. Por ello, su entorno debe actuar con sensibilidad y ofrecer apoyo sin juzgar ni presionar, validando en todo momento sus emociones, ayudándole a identificar la toxicidad, ofreciendo apoyo y teniendo paciencia.
Qué es una relación tóxica
El primer paso para saber si está o no en una relación tóxica es saber lo que es. Es una conexión en la que no hay ni respeto, ni confianza, ni apoyo, tal y como detalla el portal Psico Global. Además, algo muy común es que uno de los integrantes sienta miedo a posibles reacciones por parte de su pareja. En este caso, el temor podría condicionar su actitud. En este vínculo se volverá usual: la falta de libertad, los celos, la luz de gas, el miedo, la dependencia/obsesión, las manipulaciones, el poco apoyo emocional, los sentimientos de culpa, la falta de confianza o las inseguridades.
20 señales o conductas para identificar relaciones tóxicas
Estos son algunos indicadores que podrían hacernos pensar si la relación en la que estamos es sana o no:
- Existe miedo: se actúa de determinada manera para evitar las represalias de la otra parte.
- No hay apoyo: no hay ningún soporte, ni siquiera en el emocional.
- No hay confianza: tienes miedo a que tu pareja te engañe o haga cosa a escondidas.
- No acepta un “no” por repuesta
- Sientes que te quiere por interés
- Se mete con tu físico y te hace sentir mal
- Existe control: una de las partes intenta controlar todo lo que hace la otra parte y hace preguntas constantes: con quién has estado, dónde has ido, con quién hablas.
- Te deja en ridículo en público.
- Tienes que ceder en todo.
- Evita hablar de ciertos temas.
- No acepta nunca su parte de culpa.
- No te sientes libre.
- Te aleja de tu círculo social.
- Piensa que vale más que tú.
- Te compara con otras personas.
- Te insulta.
- Te amenaza.
- Sientes que estás solo.
- No presta atención a tu entorno.
- Sientes que no tienes futuro: no te imaginas la vida más allá de tu pareja.