La repostería francesa es una de las más completas, variadas y complejas de todo el mundo. Los macarons, los éclairs, la tarta Tatin, el croissant, la crème brûlée... Son solo algunas de las opciones dulces que podemos encontrar al poner un pie en las famosas pâtisseries françaises, auténticos museos en los que tradición, belleza y cultura se unen a sabor y técnica. Más allá de los clásicos, el mundo dulce en Francia es mucho más amplio de lo que podríamos pensar, lo que muestran postres como el París-Brest.
El París-Brest es un postre francés clásico, creado por el pastelero Louis Durand, de la Maison Laffitte, en honor a la carrera ciclista celebrada desde 1891 entre las ciudades de París y Brest. Esta carrera de resistencia, un éxito entre el público francés de la época, contaba con una longitud de nada menos que 1200 kilómetros de recorrido, siendo entonces una de las carreras más largas y exigentes de la época. La París-Brest-París no se organizó de nuevo hasta 1901, y su celebración continuó posteriormente cada diez años, hasta su última edición en 1951, organizada por L’Équipe.
El pastelero francés creó este postre con forma de rueda de bicicleta, en honor al gran evento, ideando así un dulce que ha trascendido la fama de la carrera hasta convertirse en todo un clásico de la repostería francesa. El París-Brest es un aro de masa choux, similar a la de los profiteroles, relleno de crema mousseline praliné o crema de mantequilla de almendras y avellanas. Su textura crujiente por fuera y cremosa por dentro lo ha convertido en una delicia irresistible en la repostería francesa y mundial.
Originalmente ideada como estrategia de marketing vinculada a la famosa carrera, hoy en día el París-Brest se disfruta en todo tipo de ocasiones festivas o como un postre espectacular para cerrar una cena elegante. En muchas panaderías y pastelerías, ha mantenido su popularidad, no solo por su sabor exquisito sino también por la posibilidad de personalizar su relleno con diferentes cremas o frutas.
Aunque podamos encontrar parecidos entre este postre francés y el Roscón de Reyes español, en realidad este postre se puede disfrutar durante todo el año. Además, su elaboración es más sencilla de lo que parece, por lo que se trata de una receta apta para amateurs de la repostería que quieran probarse con una nueva receta.
Receta de París-Brest
Tiempo de elaboración: 2 horas y 30 minutos
Ingredientes:
Para la masa choux:
- 125 ml de agua
- 125 ml de leche
- 100 g de mantequilla
- 1 cucharada de azúcar
- 1 pizca de sal
- 150 g de harina
- 4 huevos
- Almendras laminadas para decorar
Para la crema praliné:
- 250 ml de leche
- 3 yemas de huevo
- 80 g de azúcar
- 25 g de maicena
- 100 g de mantequilla (a temperatura ambiente)
- 150 g de praliné de avellanas (puedes comprarlo hecho o prepararlo en casa)
Para decorar:
- Azúcar glas
Elaboración:
Masa choux:
- En una cacerola, mezcla el agua, la leche, la mantequilla, el azúcar y la sal. Lleva a ebullición.
- Retira del fuego y añade la harina de golpe. Remueve vigorosamente hasta que se forme una masa homogénea que se despegue de los bordes de la cacerola.
- Deja enfriar ligeramente la masa. Añade los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición, hasta obtener una masa suave y brillante.
- Coloca la masa en una manga pastelera con boquilla ancha y forma un aro grande sobre una bandeja forrada con papel de horno.
- Espolvorea con almendras laminadas y hornea a 180 °C durante 30-40 minutos o hasta que esté dorada y crujiente. Deja enfriar sobre una rejilla.
Crema praliné:
- Calienta la leche en una cacerola. Mientras tanto, bate las yemas de huevo con el azúcar hasta que blanqueen. Añade la maicena y mezcla bien.
- Vierte un poco de la leche caliente sobre las yemas batidas para temperarlas, luego añade esta mezcla al resto de la leche caliente en la cacerola.
- Cocina a fuego medio, removiendo constantemente, hasta que espese.
- Retira del fuego y deja enfriar ligeramente antes de agregar la mantequilla y el praliné. Mezcla bien hasta obtener una crema suave y homogénea.
- Deja enfriar completamente antes de colocar la crema en una manga pastelera.
Montaje:
- Corta el aro de masa choux por la mitad de manera horizontal, formando dos partes.
- Rellena generosamente la base del aro con la crema praliné utilizando la manga pastelera.
- Coloca la parte superior del aro sobre la crema y espolvorea con azúcar glas.
- Refrigera durante unos 30 minutos antes de servir para que la crema se asiente.
¿Cuántas raciones se obtienen de esta receta?
Un París-Brest tradicional de tamaño grande puede rendir entre 8 y 10 porciones, dependiendo de cómo lo cortes.
¿Cuál es el valor nutricional de cada porción de esta receta?
Cada porción de París-Brest contiene aproximadamente:
- Calorías: 450
- Grasas: 35 g
- Grasas saturadas: 15 g
- Carbohidratos: 35 g
- Azúcares: 20 g
- Proteínas: 6 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
¿Cuánto tiempo se puede conservar esta preparación?
El París-Brest se puede conservar en la nevera por hasta 2 días, aunque lo ideal es consumirlo el mismo día para disfrutar del contraste entre la masa crujiente y la crema fresca. Si lo guardas, asegúrate de que esté en un recipiente hermético para que la masa no se humedezca demasiado.