Las largas jornadas de trabajo, las dificultades para conciliar la vida personal y profesional, tener una vida social demasiado activa… Son muchas las razones que llevan a tener un ritmo abocado en el día a día. En lo que a gastronomía respecta, esto implica congelar los alimentos con frecuencia, para evitar tirar la comida. Son muchas las personas que se organizan de esta forma, pero conviene tener en cuenta una cuestión fundamental: hay que ser cuidadoso en el momento de descongelar, sobre todo, la carne, antes de cocinarla.
Aunque no todo el mundo lo hace, una de las maneras más efectivas de sobrellevar la rutina es definir un menú para toda la semana, para lo que es clave congelar y descongelar a tiempo los alimentos necesarios para elaborar los platos. Por lo general, lo ideal para descongelar los productos como la carne es hacerlo lentamente y de la forma más natural posible. Así, el método perfecto es que pase al frigorífico, después de estar en el congelador, para subir su temperatura paulatinamente.
Una cuestión que sí parece estar clara es que, una vez que un alimento se descongela, no se puede volver a congelar. De hecho, lo adecuado es cocinarlo inmediatamente después, para que no se ponga malo. Pero no se deben aplicar métodos que pueden ser perjudiciales, como poner el producto al sol, bajo agua caliente o en el microondas. De ahí que haya quienes se pregunten qué pasa si se cocina un filete de carne directamente en la sartén, tras sacarlo del congelador.
¿Qué pasa si se cocina la carne congelada?
Ángelo Pellegrino, chef ejecutivo de Grand Palladium Hotels & Resorts en Ibiza, ofrece una respuesta tranquilizadora para aquellos que, por falta de tiempo o paciencia, suelen cocinar carne sin descongelarla previamente. Sin embargo, matiza algunos aspectos importantes. “No hay problema en cocinar la carne directamente desde el congelador, siempre que se utilice una sartén con el aceite en frío”, afirma.
El chef advierte sobre los riesgos de poner la carne congelada en aceite caliente, lo que podría generar llamas peligrosas debido al contacto entre el agua del hielo y el aceite. Además de esta advertencia, Pellegrino señala que existe debate entre los expertos sobre si la carne congelada pierde menos humedad durante la cocción, lo que podría hacer que sea un filete más jugoso. No obstante, subraya su preferencia por la carne atemperada, ya que permite un mayor control sobre la temperatura y el punto de cocción.
Por qué es importante cocer los alimentos de manera uniforme
Cocinar carne sin descongelarla previamente en la sartén es una práctica viable, pero conlleva ciertos riesgos y desventajas. “Al no descongelar la carne, es complicado lograr una cocción homogénea. El exterior puede dorarse y parecer cocido, mientras que el interior permanece crudo”, advierten los expertos.
Este método no solo afecta a la textura y el sabor del alimento, sino que también puede tener implicaciones para la salud. “Cocinar carne sin descongelar aumenta el riesgo de que el interior no se cocine correctamente, lo que podría favorecer la presencia de bacterias peligrosas como la salmonela o E. coli”, explican. Además, la carne congelada libera exceso de humedad durante la cocción, lo que impide un buen sellado y provoca que el resultado sea más hervido que asado.
Para garantizar una cocción segura y adecuada, se recomienda descongelar la carne en el frigorífico o, en caso de urgencia, usar el microondas para agilizar el proceso, según sugiere el chef Ferreiras.