Qué alimentos ayudan a aumentar la masa muscular: del pollo al pescado azul

La masa muscular juega un papel muy importante en el mantenimiento de la salud general, ya que es fundamental para la movilidad, la fuerza y la estabilidad corporal. Por otro lado, la masa muscular, además de facilitar la realización de actividades físicas, también ayuda a regular el metabolismo, contribuyendo al control del peso y a la prevención de enfermedades como la obesidad y la diabetes tipo 2.

Ahora, es importante tener en cuenta que la masa muscular se pierde con la edad de forma natural, según informa el portal web especializado Mayo Clinic. Por tanto, trabajar para su fortalecimiento resulta esencial. Ahora, esto es algo que se hace desde varios puntos.

Para ganar masa muscular, el entrenamiento debe centrarse en ejercicios de resistencia que involucren grandes grupos musculares. Los movimientos compuestos, como sentadillas, peso muerto, press de banca y dominadas, son fundamentales, ya que permiten trabajar varios músculos de manera simultánea, lo que estimula un mayor crecimiento. Del mismo modo, es recomendable entrenar de 3 a 5 veces por semana, asegurando que cada sesión incluya un equilibrio entre los diferentes grupos musculares. Además, la progresión gradual es clave: aumentar el peso o el número de repeticiones con el tiempo ayuda a seguir desafiando a los músculos, lo que es esencial para su crecimiento. Ahora, trabajar por una mayor masa muscular no sólo tienen que ver con el deporte que se haga.

En este sentido, es muy importante combinar el entrenamiento de fuerza con una nutrición adecuada. Consumir suficiente proteína es vital, ya que este nutriente es el principal responsable de la reparación y construcción muscular. Los carbohidratos también juegan un papel importante, proporcionando la energía necesaria para realizar entrenamientos intensos. Igualmente, el descanso es fundamental: los músculos se recuperan y crecen durante los periodos de reposo, por lo que es esencial dormir bien y dar tiempo suficiente para que cada grupo muscular se recupere.

Alimentos como la carne magra, el pescado azul, los huevos, los productos lácteos, las legumbres y los frutos secos son fuentes ricas en proteínas de alta calidad. Además, a la hora de buscar una mayor masa muscular es recomendable consumir una porción de proteínas en cada comida para asegurar un aporte constante que favorezca el crecimiento muscular. Las proteínas en polvo, como el suero de leche, también pueden ser una buena para complementar la ingesta diaria, especialmente para aquellos con altas demandas energéticas.

Junto con las proteínas, los carbohidratos y las grasas saludables son también muy importantes para ganar masa muscular. Los carbohidratos, especialmente los de bajo índice glucémico como los cereales integrales, avena y batatas, proporcionan la energía necesaria para rendir en los entrenamientos intensos y ayudan a reponer las reservas de glucógeno en los músculos. Por su parte, las grasas saludables, presentes en alimentos como el aguacate, los frutos secos y el aceite de oliva, son necesarias para la producción de hormonas esenciales para el crecimiento muscular, como la testosterona.

Con todo ello, si se quiere elaborar un plan alimentario para aumentar la masa muscular, lo más recomendable siempre es acudir a un especialista que adapte la dieta a las necesidades individuales.