Los reyes, la princesa Leonor y la infanta Sofía, junto con la reina Sofía, han cenado este domingo en un restaurante de Palma, en su primera aparición juntos desde que comenzaron sus vacaciones de verano en la isla hace una semana. El encuentro ha tenido lugar en el restaurante Mía, en la zona de Portixol, el antiguo barrio de pescadores, donde ya cenaron el pasado año, y donde también han estado acompañados de la hermana de doña Sofía, la princesa Irene, en silla de ruedas, y de su prima, Tatitana Radziwill, acompañada por su marido Jean Henri Fruchaud.
Está siendo un verano atípico para la familia del rey Felipe VI, en unas últimas semanas marcadas por constantes viajes de ida y vuelta a la ciudad de París. De hecho, la cita de la familia real ha tenido lugar en la única jornada en que los reyes y sus hijas han estado juntos en Palma, pues se han sucedido sus visitas a la capital francesa para seguir los Juegos Olímpicos y apoyar a los deportistas españoles.
Como curiosa anécdota de la noche, en una de las mesas al aire libre de ese mismo restaurante se encontraba cenando la actriz estadounidense Teri Hatcher, famosa por protagonizar la serie ‘Mujeres desesperadas’, y su hija.
El restaurante elegido para la velada
Para esta ocasión tan especial, la Familia Real ha optado por volver al restaurante del que es uno de sus chefs favoritos en la isla, Guillermo Cabot. Reconocido por su trabajo en establecimientos de renombre como Caballito de Mar, Es 4 Vents y Chopin, Cabot es ya un amigo de la familia y se caracteriza por su extrema discreción en lo que respecta a su vínculo con Felipe, Letizia y sus hijas.
Esta no es la primera vez que los recibía en uno de sus establecimientos, ya que el año pasado ya habían probado la cocina de Mia y, en ocasiones previas, la de su restaurante Ola de Mar, del cual eran clientes asiduos.
El restaurante Mia, al que han decidido acudir en esta ocasión, está especializado en pescado fresco y ofrece una carta repleta de platos típicos de Mallorca. Entre sus elaboraciones estrella se encuentran la fideuá, la caldereta, el calamar salteado con sobrasada, el bogavante, el ceviche de lubina con fresas o su versión de la ensaladilla rusa con salmonetes en escabeche. Su carta incluye también opciones como frituras, de calamares, pimientos del Padrón, chipirones o bogavantes; paellas y fideuás de varios tipos, carnes y algunos postres, como el buñuelo de ensaïmada con crema quemada o el coulant de chocolate y helado de vainilla
“Nuestro restaurante ofrece una experiencia culinaria excepcional con productos frescos y una extensa carta de vinos, todo ello acompañado de un trato amable y un servicio impecable”, asegura Cabot en la web de su restaurante. En efecto, el producto de calidad es uno de los puntos fuertes del restaurante, ingredientes producidos de forma local que los miembros del equipo de Mia se encargan de seleccionar cuidadosamente cada jornada.