La cocina griega tiene en sí toda la esencia de la dieta mediterránea, aunque con la presencia además de matices y aromas de tipo oriental. La suma de estos elementos da como resultado una gastronomía rica, caracterizada por el uso de ingredientes frescos y de buena calidad, hierbas y especias aromáticas y elaboraciones sencillas que conforman un recetario único en el mundo.
La musaka, la horiatiki salata —conocida en España como ensalada griega—, la spanakopita o el gyros son algunas de las recetas más populares de esta tradición culinaria, elaboraciones complejas a las que se suman otras mucho más simples y fáciles de recrear en casa. Ejemplo de ello es el tzatziki, una salsa fresca y cremosa perfecta para el verano que requiere de solo unos cuantos ingredientes.
El tzatziki es una salsa tradicional griega elaborada a base de yogur, pepino y ajo, aderezada con eneldo y un toque de limón o vinagre. Esta salsa se sirve fría y es una de las más populares en la cocina mediterránea. Es habitual encontrar tzatziki como acompañamiento de platos de carne a la parrilla, como el souvlaki o el gyros, pero también se disfruta como untable con pan pita o verduras crudas.
La clave de un buen tzatziki está en su frescura, por lo que se utiliza yogur de buena calidad, preferiblemente griego, que le aporta una textura cremosa y un sabor suave. Esta base se suma al pepino rallado. El truco está en dejar el pepino rallado en la nevera para que suelte el líquido y luego escurrirlo bien, de forma que nuestra salsa no quede demasiado acuosa. Para ello, lo mejor es utilizar un trapo fino y limpio y prensar bien el pepino, para que así se extraiga toda su agua.
Receta de salsa tzatziki
Tiempo de elaboración: 15 minutos
Raciones: 4 personas
Ingredientes:
- 2 tazas de yogur griego
- 1 pepino grande
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharada de eneldo fresco picado (o 1 cucharadita de eneldo seco)
- 1 cucharada de jugo de limón o vinagre de vino blanco
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- Pimienta negra al gusto (opcional)
Elaboración:
- Pela el pepino y rállalo finamente. Coloca el pepino rallado en un colador y presiona para eliminar el exceso de agua. También puedes usar un paño de cocina limpio para exprimir el agua del pepino.
- En un bol grande, coloca el yogur griego.
- Añade el pepino rallado y escurrido al yogur.
- Pela y pica finamente los dientes de ajo, o usa una prensa ajos para obtener una pasta de ajo. Agrega el ajo al bol.
- Incorpora el eneldo picado, el jugo de limón (o vinagre), y el aceite de oliva.
- Mezcla bien todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea.
- Sazona con sal y, si lo deseas, con un poco de pimienta negra.
- Cubre el bol con plástico film y deja reposar en la nevera al menos 1 hora antes de servir para que los sabores se integren bien.
- Sirve el tzatziki frío, acompañado de pan pita, verduras crudas o como salsa para carnes a la parrilla.