Cómo hacer bonito en escabeche, una receta fácil y deliciosa para preparar en casa este verano

El escabeche es una técnica de conservación que se remonta a la época romana, utilizada entonces para preservar carnes y pescados. Una de las formas más deliciosas de disfrutar de esta elaboración es con el bonito en escabeche, una receta clásica del norte de España, especialmente en el País Vasco y Galicia, donde el pescado fresco se adoba en una mezcla de vinagre, aceite y especias, resultando en un plato delicioso. El escabeche realza el sabor del bonito, haciendo que cada bocado sea una explosión de sabor.

Preparar bonito en escabeche es un proceso sencillo, aunque requiere paciencia para permitir que el pescado absorba todos los sabores del escabeche. Este método de conservación no solo mejora el sabor del bonito, sino que también permite disfrutar de este plato durante varios días, por lo que será perfecto para preparar con tiempo y tener sobras para los días siguientes.

En su origen, el escabeche era uno de los métodos de conservación más antiguos, un adobo con el que se conseguía que los alimentos se conservaran en buen estado durante largos periodos de tiempo. Esta técnica de marinado consiste en precocinar el alimento con un caldo de vinagre, aceite frito, vino, laurel y pimienta en grano. El vinagre de vino es el encargado de esta conservación, pues se trata de un medio ácido cuyo bajo pH permite detener las células responsables de la putrefacción del alimento.

No obstante, los avances en los métodos de conservación han permitido que el escabeche tome otro papel fundamental en la cocina: el de dar sabor y jugosidad a los alimentos con los que se sazona. Este adobo se añade ahora a elaboraciones de todo tipo, hechos a partir de carnes, aves, pescados u hortalizas.

A pesar de que hay versiones del escabeche muy variadas, existe una fórmula básica para calcular las proporciones adecuadas: dos partes de aceite por una de vinagre. Además de estos ingredientes líquidos, normalmente se le añaden otros condimentos y especias para aromatizar, como el laurel, el ajo o la pimienta negra en grano.

Tiempo de elaboración: 1 hora y 45 minutos

Raciones: 4 personas

Ingredientes:

• 1 kg de bonito fresco
• 1 cebolla grande
• 4 dientes de ajo
• 2 zanahorias
• 1 hoja de laurel
• 1 cucharadita de pimentón dulce
• 1/2 taza de vinagre de vino blanco
• 1 taza de aceite de oliva
• 1/2 taza de agua
• Sal al gusto
• Pimienta negra en grano al gusto
• 1 ramita de tomillo (opcional)
• 1 ramita de romero (opcional)

Elaboración:

1. Limpia el bonito, retira la piel y las espinas, y córtalo en trozos medianos.
2. Sazona los trozos de bonito con sal.
3. En una cazuela grande, calienta el aceite de oliva y fríe los trozos de bonito hasta que estén dorados por todos lados. Retíralos y reserva.
4. En el mismo aceite, añade los ajos enteros y la cebolla cortada en juliana. Cocina a fuego medio hasta que la cebolla esté transparente.
5. Agrega las zanahorias cortadas en rodajas finas, la hoja de laurel, el pimentón dulce, la pimienta negra en grano, el tomillo y el romero. Cocina por unos minutos más.
6. Añade el vinagre de vino blanco y el agua. Deja que la mezcla hierva durante unos minutos para que se evapore un poco el vinagre.
7. Vuelve a colocar los trozos de bonito en la cazuela, asegurándote de que queden bien cubiertos por la mezcla de escabeche.
8. Cocina a fuego lento durante 20-25 minutos, permitiendo que los sabores se integren.
9. Deja reposar el bonito en escabeche durante al menos 1 hora antes de servir. Para obtener mejores resultados, refrigéralo y déjalo reposar durante 24 horas.
10. Sirve el bonito en escabeche frío o a temperatura ambiente, acompañado de pan o ensalada.