El restaurante con estrella Michelin que tiene su propio aeródromo: cocina manchega de autor en un pequeño pueblo de Ciudad Real

En el suroeste de la provincia de Ciudad Real, en el límite oeste del Campo de Montiel, se encuentra Torrenueva, un pequeño pueblo manchego encaramado a una ligera llanura y rodeado de un paisaje de horizontes infinito y tierras de mil colores. Allí, en el corazón de la Mancha, se encuentra Retama, un restaurante que brilla con una estrella Michelin dentro del lujoso hotel de 5 estrellas La Caminera Club de Campo.

Tras las cocinas de este restaurante se encuentra el cocinero Miguel Ángel Expósito. De origen sevillano, pero manchego de adopción, el chef defiende el producto local y el legado culinario de las tierras manchegas a través de un recetario tradicional con toques innovadores que ha conquistado a la Guía Michelin. La propuesta gira en torno a tres menús degustación que, según la guía francesa, “narran la estrecha vinculación del restaurante con el territorio, reinterpretando los platos desde la modernidad con las técnicas más actuales”.

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Miguel Ángel Expósito se formó en las cocinas de Mugaritz, Martín Berasategui y Can Jubany antes de recalar con Javier Aranda en La Cabra, Gaytán y finalmente en La Caminera como jefe de cocina desde 2019. Esta variada y prestigiosa trayectoria le ha llevado hasta Retama, un lugar en el que expresa su personalidad con platos enraizados en la tradición manchega. El nombre del restaurante hace referencia a un arbusto con flores amarillas muy común en la Meseta Central y en el entorno de La Caminera, el exclusivo hotel en el que se inserta.

Rodeado de un paisaje único, este hotel destaca por sus lujosas instalaciones. Además de este restaurante con estrella Michelin, el hotel cuenta con un campo de golf, un gran spa de 800 m², instalaciones deportivas, piscina al aire libre e incluso un aeródromo para jets privados, convirtiéndose en el único 5 estrellas de toda Europa que cuenta con aeropuerto propio. Asimismo, el hotel organiza actividades en su entorno, como avistamiento de águila imperial, paseo en enganche de caballos, rutas guiadas por los olivos de la finca, catas de vino, sesiones de yoga al aire libre...

La cocina de Retama homenajea a la tradición regional y los productos locales, reinterpretándolos en clave de vanguardia. Los platos del chef se reúnen en tres menús degustación diferentes: Tradición, con 10 pases (80 €); Finca La Caminera, con otros 10 (100 €); y, finalmente, La Retama, con 18 pases (120 €).

El comienzo de todas estas degustaciones es ya una declaración de intenciones en sí misma, con snacks como la esferificación de aceituna y berenjena de Almagro, el crujiente de anchoa de Santoña y pepinillo o la magdalena de pisto manchego. Otros platos de clara influencia tradicional se incluyen en el menú: elaboraciones como el atascaburras, la flor manchega con anís y limón o el carpaccio de torreznos, gachas manchegas y trufa.

Su lista de ingredientes y los productos que llegan a la mesa hacen un maravilloso paseo por Castilla-La Mancha, con ejemplos como el pan artesano de Valdepeñas (Ciudad Real), la sal de Saelices (Cuenca) o el aceite de Maar de Cervera (Ciudad Real).