Isabel del Campo, dermatóloga: “Es falso que las personas de piel morena o negra no necesiten protección solar”

La dermatóloga revela para ‘Infobae España’ cómo podemos disfrutar de la vitamina D del sol protegiendo nuestra piel

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Una mujer se aplica protección
Una mujer se aplica protección solar (Shutterstock)

La vitamina D que recibimos a través del sol es nuestra mejor aliada para absorber el calcio, un mineral vital para mantener los huesos fuertes y prevenir enfermedades como la osteoporosis y el raquitismo. Además, la vitamina D juega un papel fundamental en los nervios que llevan los mensajes entre el cerebro y el cuerpo, los músculos y el sistema inmunitario para combatir virus y bacterias.

Sin embargo, el sol puede convertirse en un factor de riesgo de diferentes cánceres de piel si no llevamos a cabo una serie de precauciones a la hora de exponernos a él. La doctora Isabel del Campo es especialista Dermatología Médico-Quirúrgica del Instituto de Dermatología Integral y miembro actual de la Academia Española de Dermatología. Infobae España habla con ella sobre qué medidas seguir para recibir la cantidad de vitamina D necesaria a la vez que nos protegemos del sol.

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Pregunta: ¿Cómo podemos cuidar nuestra piel del sol y al mismo tiempo recibir la vitamina D que necesitamos?

Respuesta: Proteger la piel del sol es fundamental para mantenerla sana, ya que la radiación solar es la principal causa tanto del cáncer de piel como del envejecimiento prematuro. La mejor forma de cuidarla es protegiéndola del sol. Esto debe hacerse con fotoprotectores solares (factor 50, siempre que realicemos actividades al aire libre en días soleados, así como en primavera y verano, y del 30 el resto del año) y también utilizando prendas que cubran las partes más expuestas, es decir, cara, orejas, cabeza, escote, brazos y manos (gorras, sombreros…) y, por supuesto, no permaneciendo al sol en las horas centrales del día (entre las 11 y las 18 horas) cuando la radiación solar es más intensa.

No hay que olvidar que la vitamina D es necesaria para el correcto metabolismo del calcio; la podemos obtener exponiéndonos al sol 10-15 minutos 3 veces por semana a primera o última hora del día en primavera y verano y a diario si es posible en otoño e invierno.

Archivo: Cremas de protección solar
Archivo: Cremas de protección solar (Josefina Blanco / Europa Press)

P: ¿Qué significa que la piel tiene memoria?

R: Significa que cada sobreexposición o quemadura cuenta, especialmente si se han producido en los primeros años de vida y en la adolescencia, cuando el sistema de protección de la piel no está totalmente desarrollado. Las quemaduras, si son repetidas y en las mismas zonas, en estas etapas de la vida pueden suponer el desarrollo de un cáncer de piel décadas después.

Las quemaduras causan un daño acumulativo en el ADN de las células cutáneas encargadas de protegernos de las agresiones externas como el sol, de forma que llega un momento en el que ese daño es irreversible, lo que incrementa el riesgo de padecer un cáncer de piel en un futuro.

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P: ¿Cuáles son las zonas del cuerpo más vulnerables a las quemaduras del sol?

R: Sin duda son las más expuestas. Estamos hablando de la cara, las orejas, la cabeza (en el caso de las personas con alopecia), el escote y las manos (las grandes olvidadas). Aunque en los meses de más calor habría que añadir los brazos, las piernas, el empeine y la espalda. Cuando hace buen tiempo, muchas veces se sale a dar un breve paseo, nos sentamos en una terraza, salimos a hacer deporte al aire libre e, incluso, a hacer tareas en patios y jardines, y olvidamos la protección solar porque consideramos que en ese breve periodo de tiempo no vamos a quemarnos ya que no estamos en zona de playa y piscina. Tenemos que concienciarnos que debemos utilizar fotoprotector durante todo el año y reaplicarlo cada 2 horas para que sea totalmente eficiente.

P: ¿Qué hay de cierto en que las personas con la piel más morena no necesitan tanta protección solar?

R: Es una falsa creencia que las personas con pieles morenas o negras no necesitan utilizar fotoprotección. Es verdad que no se queman tan rápido como las pieles claras, pero aun así deben utilizar fotoprotector solar durante todo el año y tomar las mismas medidas para evitar tener quemaduras solares.

Lo que ocurre es que a simple vista es más difícil detectar posibles quemaduras, pero se producen igual. De hecho, al ser más difíciles de detectar las manchas o las quemaduras, los cánceres en personas con pieles oscuras se detectan de forma más tardía, lo que incrementa el riesgo de que los cánceres de piel estén en etapas más avanzadas.

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