El mejor truco para recalentar la pizza en la freidora de aire y que parezca recién hecha

Basta con tener una airfryer y seguir un sencillo consejo para poder combatir el desperdicio de alimentos y disfrutar al día siguiente del que es uno de los platos estrella de la gastronomía italiana

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Recalentar la pizza al día
Recalentar la pizza al día siguiente y que parezca recién hecha es posible con un sencillo truco. (50 top pizza)

Ya sea por falta de tiempo o por gusto, la pizza siempre ha sido en España uno de esos placeres gastronómicos. Aunque es una receta italiana, lo sencillo que resulta su elaboración, su buen sabor y la posibilidad de añadirle los ingredientes que se deseen, hacen que este sea uno de los platos más populares en el país. De ahí que, cuando sobra, sean muchos los que la guardan para comérsela al día siguiente. Y, en contra de lo que algunas personas creen, se puede recalentar en la freidora de aire y parecerá que está recién hecha, siempre y cuando se siga un truco infalible.

Los verdaderos amantes de la pizza visitan con frecuencia los restaurantes italianos para deleitarse con el que es uno de los principales platos de su cultura culinaria. Es difícil encontrar a alguien al que no le guste. Sus ingredientes son básicos: una masa hecha con harina de trigo, levadura, agua y sal, que suele cubrirse de tomate y mozzarella y se hornea a temperatura alta.

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En la mayoría de los casos, es indiferente los ingredientes que se añadan, ya que su sabor sigue siendo espectacular. Es por ello que lo habitual es que los comensales no quieran correr el riesgo de estropearla, para poder disfrutar también al día siguiente de ella. Para que esto no suceda, basta con seguir un consejo y utilizar el electrodoméstico que reina en buena parte de las cocinas españolas: la airfryer.

El consejo para recalentar pizza en la airfryer

Pese a ser una receta
Pese a ser una receta italiana, la pizza es un básico en España. (Pixabay)

La freidora de aire se ha convertido en un imprescindible en los hogares de quienes buscan alternativas saludables y rápidas en la cocina. Tal es así, que existe un método eficaz para recalentar una pizza utilizando este electrodoméstico, garantizando una masa crujiente y un sabor delicioso. El procedimiento consiste en ajustar la temperatura de la freidora de aire entre 120ºC y 175ºC y calentar durante un máximo de cinco minutos. Si se prefiere una textura más crujiente, se recomienda dejarla un minuto adicional y revisar hasta lograr el estado deseado.

La clave para un resultado óptimo, según el experto Cazy Brooks de Circa AirFryer, es precalentar el aparato unos minutos antes de introducir la porción de pizza. Esta simple acción promete conseguir no solo una base más crujiente, sino también una cocción uniforme, para disfrutar de una pizza como si estuviera recién hecha.

La freidora de aire, más allá de su capacidad para freír alimentos de manera saludable, usando poco o ningún aceite, demuestra ser versátil al ofrecer soluciones prácticas para el día a día en la cocina. Recalentar pizza en este dispositivo no solo preserva su calidad, sino que también aporta facilidad y rapidez al proceso, factores cada vez más valorados dado el ritmo de vida actual.

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Cómo recalentar la pizza en la sartén

Quienes no tengan freidora de
Quienes no tengan freidora de aire también pueden recalentar la pizza en una sartén.

La renovación de las técnicas culinarias ha llevado a descubrir métodos alternativos para recalentar alimentos, en este caso, la pizza, sin necesidad de utilizar electrodomésticos modernos como la airfryer. Un método eficaz para disfrutar de este producto con el mismo sabor y textura que si estuviese recién hecha emplea elementos tradicionales que se encuentran en cualquier cocina, como son la vitrocerámica y una sartén. Esto no solo preserva las cualidades del alimento, sino que también promueve un consumo energético más eficiente y se alinea con las preferencias de quienes buscan métodos de cocción convencionales.

El proceso consta de unos pasos sencillos que garantizan que la pizza mantenga su crujiente y sabor. Inicialmente, se coloca la porción en una sartén caliente sobre la vitrocerámica. Seguidamente, se añade un poco de agua al utensilio y se cubre con una tapa para crear un ambiente de vapor que permita que el queso se derrita adecuadamente y la base recupere su textura óptima sin secarse. La evaporación completa del agua es clave en este método, ya que señala el momento justo para retirar la tapa y permitir que los últimos toques de calor perfeccionen el acabado de la pizza.

Esta forma de calentar pizza contrasta con las innovaciones tecnológicas en el ámbito de los electrodomésticos de cocina, como las airfryers, que han ganado popularidad por su capacidad de cocinar y recalentar alimentos gracias a la circulación de aire caliente. Sin embargo, el redescubrimiento y la adaptación de técnicas culinarias tradicionales reflejan una tendencia creciente hacia métodos más sencillos.

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