Las torrijas son el postre por excelencia de la Semana Santa, un dulce a base de pan que triunfa alrededor de todo el país, ya sea en su versión más tradicional o en sus formas más innovadoras. La unión del pan duro, aprovechado de días anteriores, con la leche, los huevos, el azúcar y la canela resulta en un dulce delicioso que nos hace la boca agua también fuera de esta celebración religiosa.
Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, comenzamos a plantearnos cuál es la versión de esta tradicional receta que más nos apetece. Este dulce típico de nuestro país ofrece muchas posibilidades a la hora de prepararlas: con o sin miel, con o sin azúcar, con pan al uso o brioche, elaboradas al horno o con freidora de aire… Las opciones son casi infinitas, igual que nuestras ganas de que llegue el momento de disfrutar de este cremoso y dulce postre español.
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A la hora de elaborar y comer torrijas en casa, uno de los mayores problemas es el momento de la fritura. No solo por lo engorroso que puede llegar a ser, sino también por tratarse de un proceso que suma inevitables calorías a nuestra receta. Como alternativa, una opción es cocinar nuestras torrijas en el horno, una técnica que las hará más ligeras y nos permitirá disfrutarlas en su versión más saludable sin renunciar a su sabor.
Cómo evitar que las torrijas al horno queden secas
Para elaborar torrijas al horno debemos seguir la receta convencional de torrijas hasta el momento en que deberíamos freírlas. Comenzamos infusionando la leche con canela y cáscara de limón para, mientras tanto, ir cortando nuestro pan en rebanadas. Mezclamos la leche aromatizada con una cucharadita de azúcar y con los huevos y vamos mojando las rebanadas de pan en la mezcla, dejándolas unos 10 segundos por cada lado para que se empape la mezcla.
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Para cocinar nuestras torrijas, comenzaremos colocándolas sobre una fuente para horno, la cual colocaremos en la parte más alta del horno, precalentado a 200º en modo grill. Para conseguir que estas torrijas al horno no queden demasiado secas, podemos elaborar un almíbar de azúcar o de miel, mezclada con agua y colocada en un cazo al fuego, dejándola unos minutos para que se haga un almíbar. Una vez se han dorado las torrijas por un lado, les daremos la vuelta para que se doren por el otro, unos diez minutos cada vez vigilando para que no se quemen. Las sacamos del horno, las empapamos con el almíbar caliente y las espolvoreamos con azúcar y canela.
Receta de torrijas al horno
Tiempo de elaboración: 35 minutos
Raciones: 6 personas
Ingredientes:
- 500 ml de leche
- 1 rama de canela
- 1/2 limón
- 100 g de azúcar
- 6 rebanadas gruesas de pan tipo brioche
- 2 huevos
- Canela en polvo
- Miel (opcional)
Elaboración:
- Precalentamos el horno a 200 °C y activamos la función grill.
- En una cacerola, calentamos la leche junto con la rama de canela y la piel del limón para infusionar. Una vez la leche haya tomado el sabor, retiramos la canela y la piel del limón.
- Agregamos la mitad del azúcar a la leche y mezclamos hasta disolver.
- Bañamos las rebanadas de pan en la leche infusionada, asegurándose de que se empapen bien. Dejamos reposar durante 5 minutos para que el pan absorba por completo la leche.
- Batimos los huevos en un recipiente aparte. Pasamos cada rebanada de pan empapada por el huevo batido, cubriéndolas bien por ambos lados.
- Colocamos las rebanadas sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal y cocinamos en el horno, utilizando la función grill, durante 5 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas.
- Mientras las torrijas están en el horno, mezclamos el azúcar restante con canela en polvo.
- Una vez cocidas, retiramos las torrijas del horno. Si han quedado algo secas, podemos bañarlas con un almíbar de miel y agua. Tanto si añadimos el almíbar como si no, rebozamos inmediatamente las torrijas en la mezcla de azúcar y canela.
- Servimos las torrijas calientes, disfrutando de su exterior crujiente y su interior suave y aromático.