Este fin de semana hemos vuelto a ver al rey Felipe VI en Baqueira, donde ha disfrutado de unos días de desconexión en la nieve. Este viaje ya se ha convertido prácticamente en una tradición desde que, el año pasado, hiciera una visita al Valle de Arán (Lleida) para disfrutar de su paisaje, su gastronomía y su deporte estrella, el esquí.
Así, el rey viajó hasta Baqueira Beret, donde pudo practicar el que es uno de sus deportes favoritos, al que es un gran aficionado desde su infancia. Al tratarse de una afición que no comparte con la reina Letizia ni con sus hijas, esta salida de ocio la ha dedicado a disfrutar en compañía de sus amigos.
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Así lo ha desvelado el diario ilerdense Segre, que cuenta en su versión digital que el monarca eligió el mejor fin de semana del año para practicar esta afición, pues la misma noche de su llegada hubo una nevada que dejó de 10 a 20 centímetros en las pistas. Pero antes de ponerse los esquís, el Rey se reunió con varios amigos con los que cenó en un restaurante de la localidad de Vielha.
El restaurante elegido ha sido El Fogón del Valle, un establecimiento muy popular en la zona que especializa su menú en carnes a la brasa. El local, regentado por Tatiana Wandurrada y su marido Marius Costel desde hace cinco años, recibió la reserva sin saber que detrás se encontraban el rey y sus amigos, como han confesado en declaraciones a Segre.
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El grupo estuvo cenando “a la carta y todo para compartir, ensalada de queso de cabra, chuletones, longaniza típica del Valle, morcilla de Burgos, vino tinto, tarta de pistachos, helados…”, contaban desde el establecimiento al la revista ¡HOLA!. Tatiana también cuenta que su local “estaba lleno y nadie se imaginó que íbamos a tener al Rey. Le pedí una foto y accedió sin problema”.
El Fogón del Valle, carne a la brasa y menú del día
El Fogón del Valle, el lugar elegido por el rey para disfrutar de una buena cena en compañía de sus amigos, es un restaurante especializado en carnes a la brasa que se encuentra en la avenida Maladeta, una zona urbana de Vielha con varios negocios cercana a las orillas del Río Garona.
Sus platos, que sus clientes definen como “generosos y con buen sabor” en sus reseñas, proceden de la tradición culinaria de la zona del Valle de Arán, así como de otros lugares del mundo. En este restaurante, por lo tanto, se pueden probar recetas clásicas como olla aranesa, especialidades de otras zonas de España como pulpo a la gallega o incluso platos de cocina internacional como patacones con pollo o arepas.
Su carta es de lo más variada, formada con opciones de carnes, tapas, platos combinados, bocatas, hamburguesas o pescados y mariscos. Por otro lado, también ofrecen la posibilidad de un menú de mediodía que incluye varias opciones de primeros platos, así como de segundos, pan, bebida y postre. Todo ello tiene un precio de 16 euros, lo que sus clientes califican como una buena relación calidad-precio.