Especialmente para los más golosos, nada como una buena caja de bombones como obsequio este 14 de febrero. En el Día de los Enamorados, estos chocolates se convierten en el regalo por excelencia que hacer a una pareja, amigo o incluso como autorregalo.
Lo cierto es que pocos pueden resistirse a este dulce y ocasional capricho, pero probablemente también sea poco lo que sabemos sobre su composición y su calidad. El elevado procesado de algunas marcas, la alta presencia de grasas y el uso de aditivos como jarabes de glucosa son algunas de las características que destacan en muchos de los bombones de supermercado, algo que podemos saber gracias a un estudio que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha elaborado sobre 11 conocidas cajas de bombones con distintos rellenos y sabores.
Te puede interesar: Las sardinas de chocolate, el dulce tradicional con el que Madrid pone fin al carnaval y que se elabora en plena Puerta del Sol
Lo primero que llama la atención de los técnicos de OCU es la variada mezcla de grasas: 8 de las 11 cajas de bombones seleccionadas sustituyen parte de la manteca de cacao por otras grasas más baratas, como la palma, el palmiste, la shea, el coco, o la grasa láctea. De hecho, alguna caja suma hasta cuatro grasas diferentes en un mismo bombón. También criticable, por tratarse de una medida que reduce la calidad de los bombones con el único propósito de reducir el coste, es sustituir parte del azúcar por jarabes de glucosa. Una circunstancia que se observa en 3 de los 11 productos analizados.
Otro defecto habitual en algunos bombones es el llamado “Fat Bloom”, un fenómeno que ocurre cuando los cristales de la manteca de cacao u otro tipo de grasas suben a la superficie cuando hay una brusca variación de temperatura y se vuelven a cristalizar en la parte superior. Cuando esto pasa en el chocolate se ve fácilmente, ya que adquiere un color blanquecino y pueden llegar a salir burbujas pequeñas. El coste de la caja de bombones es sin duda otro factor a tener en cuenta, pues hay significativas diferencias entre las marcas analizadas: de 17,50 €/kg a 52,38 €/kg.
Te puede interesar: El postre elaborado con legumbres que Chicote ha creado en honor a un producto delicioso, nutritivo y clave para un futuro sostenible
Los mejores bombones del supermercado
De todos los bombones catados y evaluados por este equipo de expertos, hay dos opciones que destacan por encima del resto por su calidad, su precio, su valor nutricional y, especialmente, por su sabor. Frente a valoraciones de cata que apenas superan el aprobado, hay algunas que son buenas o incluso muy buenas, como sucede con los dos productos con mejor calificación global. Estos son los mejores bombones del supermercado:
- Ferrero Rocher. Precio: 5,89 €/200 g (29,45 €/kg). Bombón de agradable presencia. Es una bola de chocolate con leche con trocitos de frutos secos que baña un fino barquillo relleno de praliné de avellana. Se caracteriza por tener un sabor equilibrado y una buena textura.
- Pocket Coffee espreso. Precio: 4,89 €/225 g (21,73 €/kg). Responde al tradicional bombón relleno con una fina capa de chocolate negro, y un interior de cremoso con café azucarado. Se caracteriza por la potencia de sabor y su cuidada capa de chocolate exterior.
A estas dos opciones, las mejores según la organización, le siguen otras como Mon Chéri de Ferrero, Milka Praliné, Lindor o los pralinés de Guylian. Asimismo, entre los que menos calorías aportan destacan Milka Praliné, After Eight y Mon Chéri, que no llegan a las 50 kcal por bombón.
No obstante, al final de este ránking, valorado como el peor de esta clasificación, está la Caja Roja de Nestlé con una puntuación de 41 sobre 100. Su aporte calórico es de 50 kcal por bombón y tienen un precio de 11,99 €/250 g. Se trata de un surtido variado, con combinación de crujiente y cremosidad y de chocolate suave.