Las sopas de miel, una receta dulce tradicional de la isla de La Palma para celebrar el carnaval

El Carnaval es la fiesta pagana más celebrada en España, unos días de fiesta y diversión que van obligatoriamente acompañados de la gastronomía. Sin duda es una de las fiestas más esperadas del año y llevan consigo aparejados su propio recetario, una lista de elaboraciones dulces y saladas que son sinónimo de disfrute y tradición.

Si hay en España una región que vive con fervor las fechas carnavalescas es la comunidad Canaria. No podía faltar, por lo tanto, una buena ristra de recetas que acompañaran a estas fiestas. Uno de los platos estrella de estas fechas son las sopas de miel, un postre canario, concretamente de la isla de La Palma, que se prepara en días de Carnaval.

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Aunque se llaman sopas, estas delicias no son líquidas. Su origen se remonta a los antiguos cañaverales de La Palma, establecidos en la isla durante el siglo XVI. Durante los trabajos de elaboración de la miel, surgían sobrantes denominados “espumarajes” que eran aprovechados por los trabajadores empapando en el jarabe trozos de pan duro. Más tarde comenzaron a añadirse a estos dos ingredientes otros como las almendras, anís, limón y canela para aromatizar. Casualmente, el fin de la producción solía suceder en fechas cercanas a carnavales, por lo que poco a poco esta receta se fue asociando a la celebración, convirtiéndose en tradición.

Como ocurre con tantas otras recetas tradicionales, existen variaciones entre la receta de cada familia palmera. Algunas sustituyen el anís por matalahúva, la cáscara de limón por zumo de limón o varían las cantidades de algunos ingredientes. No obstante, por lo general, esta receta se ha transmitido de generación en generación sin grandes cambios, utilizando siempre melaza o miel de caña que aporta un toque tostado y le brinda su color oscuro característico.

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Tiempo de elaboración: 30 minutos

Raciones: 4 personas

Ingredientes:

• 1 barra de pan del día anterior
• 100 g de almendras crudas peladas
• 350 g de miel de caña
• 200 ml de agua
• 1 limón
• 1 cucharada de anís en grano
• 1 bastón de canela
• Canela molida

Elaboración:

1. Comenzamos picando las almendras en una tabla de madera, sin importar que queden unos trozos más grandes que otros.
2. Cortamos el pan en rebanadas y lo reservamos.
3. En un cazo ancho y bajo, ponemos la miel, el agua, el anís, un poco de corteza de limón y la rama de canela y lo llevamos al fuego.
4. Cuando empiece a hervir, añadimos la almendra picada y las rebanadas de pan, dejando que se empapen bien con la mezcla y dándoles la vuelta para que empapen por ambos lados.
5. Pasados unos minutos, pasamos los trozos de pan empapados a una fuente en la que los serviremos. Si sobra líquido de la cazuela, lo volcamos sobre el pan. Podemos decorar con frutas o, si se trata de alguien muy goloso, acompañarlo de una bola de helado, de sabores como el plátano o el de gofio.