Los platos de un restaurante para luchar contra el cambio climático

Green Leka-Can Valldaura ofrece delicias culinarias y también educa sobre la importancia del manejo responsable de los alimentos

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El restaurante Green Leka-Can Valldaura (Página web Green Leka-Can Valldaura)
El restaurante Green Leka-Can Valldaura (Página web Green Leka-Can Valldaura)

En el corazón del parque de Collserola, se erige Green Leka-Can Valldaura, un restaurante que se destaca no solo por su cocina de vanguardia, sino también por su compromiso en la lucha contra el desperdicio alimentario. Este tema, de importancia global, impacta severamente no solo en los aspectos económicos, sino también en la equidad alimentaria y en la sostenibilidad ambiental. La cifra es alarmante: un tercio de la comida que se produce a nivel mundial termina desperdiciada. Ante este panorama, la ONU plantea un desafío mayor, reducir a la mitad dicho desperdicio para 2030, un objetivo ambicioso que requiere de acciones concretas y comprometidas. Y, con más restaurante como Green Leka-Can Valldaura sería posible.

Iván Enríquez, al frente de dicho local, encarna la vanguardia en esta batalla. Su restaurante no solo se compromete a ofrecer delicias culinarias, sino también a educar y concientizar sobre la importancia del manejo responsable de los alimentos. Bajo el concepto de “comida honesta”, Enríquez ha introducido innovaciones como las “bravas de colores”, un plato que invita a la reflexión. Las patatas, zanahorias, calabazas y remolacha se complementan con una salsa pesto elaborada a partir de las hojas de zanahoria y remolacha, partes del vegetal que, habitualmente, serían descartadas.

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Pero la inventiva de Enríquez no se limita a la reutilización de alimentos. Green Leka se erige también como un modelo de sostenibilidad, al emplear restos de alimentos para la limpieza y la decoración del local. Desde la utilización de cajas de naranja para aromatizar aceites hasta la creación de un material similar al cuero a partir de cáscaras de huevo, posos de café y fibras de jengibre, cada elemento del restaurante refleja un compromiso con el medio ambiente. Incluso la decoración sigue esta línea, con lámparas hechas de troncos recogidos en las playas o tambores de lavadoras recicladas, evidenciando la creatividad y la ética ambiental en cada detalle.

El restaurante Green Leka-Can Valldaura no solo cambia la forma en que sus comensales ven y consumen la comida, sino que también sirve de inspiración para otras iniciativas, dentro y fuera de la industria de la restauración, demostrando que es posible unir el arte culinario con la sostenibilidad y la responsabilidad social. Aunque este no ha sido el único proyecto sostenible que ha puesto en marcha Enríquez.

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Otros proyectos de Iván Enríquez

La iniciativa Circular Gos fue uno de sus proyectos más ambiciosos, orientado a la producción de snacks sostenibles para perros a partir de desechos cárnicos. A pesar de haber sido pausado debido a regulaciones europeas, refleja la voluntad de explorar todas las posibilidades para reducir el desperdicio y promover un consumo más responsable.

Ahora, Green Leka está inmerso en un nuevo proyecto, Actuarum 381, que busca fomentar un modelo de producción y consumo más sostenible, justo y equitativo, cerrando brechas sociales y promoviendo el respeto por el planeta. A través de la unión de profesionales de diversos sectores, se pretende poner en práctica ideas innovadoras que permitan una convivencia más armoniosa con nuestro entorno. En un mundo donde el desperdicio alimentario es un problema crónico, iniciativas como la de Enríquez no solo son loables, sino esenciales, proporcionando un faro de esperanza y mostrando un camino a seguir hacia un futuro más sostenible y justo para todos.

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