Ubicado en el acristalado patio interior de un antiguo palacio andaluz, Balausta ofrece un verdadero homenaje al recetario tradicional malagueño, aunque con un aire contemporáneo. Todo ello bajo el sello de calidad del chef José Carlos García, galardonado con dos Soles Repsol y una Estrella Michelin. La fórmula no puede ser más llamativa.
Sus platos, creados con técnicas de vanguardia y productos locales, han hecho que este proyecto consiga entrar en la lista de recomendados que, año tras año, la Guía Michelin elabora con ayuda de sus inspectores. Este sofisticado restaurante está en un antiguo palacio andaluz del siglo XVIII, en pleno centro de Málaga, y es la parte gastronómica del hotel Palacio de Solecio.
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Conocido como Palacio Marqués de la Sonora, el Palacio Solecio es un edificio histórico del siglo XVIII que ha sido reconvertido en hotel y renovado manteniendo el estilo arquitectónico y artístico original. El palacio fue propiedad de Félix Solesio, un genovés que se asentó en Málaga para dirigir la Real Fábrica de Naipes de Macharaviaya, creada en 1776 por expreso deseo de José de Gálvez, Ministro General de Indias de la Corte de Carlos III y Marqués de la Sonora.
El hotel conserva ahora el estilo arquitectónico del siglo XVIII en sus arcos y columnas, así como en su fachada, los balcones de hierro forjado y los frescos barrocos. El resto de su arquitectura fue renovada con la intención de modernizar sus comodidades, pero sin perder su esencia. El salón principal de este reconocido restaurante se encuentra en el patio abovedado del palacio, un espacio de unas características arquitectónicas únicas que nos traslada siglos atrás sin movernos de nuestras sillas.
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Cocina malagueña con José Carlos García como asesor
La cocina de temporada que ha hecho que Balausta triunfe entre los malagueños corre a cargo del chef Sergio Solano, que trabaja junto con el estrellado chef José Carlos García como asesor gastronómico. En su restaurante homónimo, García aporta pequeñas dosis de atrevimiento al recetario tradicional andaluz, partiendo del producto de temporada y siempre con la mirada puesta en el mar que baña las costas malagueñas.
El concepto gastronómico detrás de Balausta también pretende hacer un homenaje a la cultura gastronómica tradicional malagueña, aunque esta vez a través de reinterpretaciones de lo más vanguardistas. Sus propuestas se basan en el producto de temporada y de proximidad, creando platos a partir del jamón ibérico de castañas, de los quesos de cabra con Denominación de Origen Málaga o de la paletilla de chivo lechal.
Destacan elaboraciones como las sardinas soasadas con pipirrana vegetal; las albondiguitas de marisco en salsa de almeja chirla o la paletilla de chivo lechal de raza malagueña pura con salsa pastoril y patatitas rustidas al ajillo. Y, como no podía ser de otra forma, los vinos de la región son los protagonistas de su carta líquida.
Además de las tradicionales recetas malagueñas en carta, Balausta propone una serie de jornadas gastronómicas donde el producto de temporada es el protagonista. Esta experiencia culinaria cambia con el devenir de las estaciones y pone en valor productos como la trufa negra, la joya que protagoniza los platos fuera de carta que Sergio Solano y José Carlos García sirven durante el mes de enero.