La hora de comer (Shutterstock) En los años 60 del siglo pasado, el ministerio de Información y Turismo trató de atraer el turismo europeo a las playas españolas bajo el eslogan ‘Spain is different’. Ni mejor, ni peor; España era simplemente diferente. Y a pesar de que la sociedad española haya cambiado mucho desde entonces, lo cierto es que hay detalles en los que aún la sociedad española va a contracorriente del resto del mundo.
Un ejemplo muy claro de ello se encuentra en los horarios de comidas. En España se desayuna temprano, a la misma hora que en otros países, pero, para desesperación de los hambrientos turistas e inmigrantes de otras partes del globo, el almuerzo no se hace hasta las 14:30 y la cena siempre tiene lugar después de las 21:00.
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Esta realidad, que se explica a través de factores muy diversos como los antiguos horarios laborales o los cambios horarios que el país sufrió durante la dictadura franquista, es muy comentada por aquellos extranjeros que visitan o vienen a vivir a España. Para ellos, es uno de los choques culturales más significativos, un tema sobre el que ha querido dar su opinión una tiktoker estadounidense. A través de un breve vídeo, que ha suscitado el debate en su sección de comentarios, Danielle Grobman compartía con sus compatriotas lo que para ella es un gran choque, el de no poder negociar a qué hora se come con sus amistades en España.
A diferencia de otros países, en los que la primera comida contundente del día se hace sobre el mediodía y la cena se celebra durante la tarde, en España estos horarios se atrasan significativamente. La tiktoker comenta que esta es una información que ya conocía de sobra. Sin embargo, la sorpresa se ha relacionado más con otros aspectos, también referentes a los horarios de nuestras comidas.
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Grobman ha destacado que, a diferencia de lo que ocurre en Estados Unidos, en España parece no ser posible ajustar la hora de encuentro para las comidas con amigos, aspecto que considera profundamente arraigado en la cultura española. “Comer tarde no es negociable”, lamenta la norteamericana, que explica que al intentar buscar un horario intermedio con sus amistades resulta muy complicado porque para ella, tarde son las 22 horas y “¡aquí temprano son las 22 horas!”.
Según cuenta la estadounidense, en España tiene amigos que le dicen de quedar para cenar por ahí, y ella asiente pensando que quedarán, por ejemplo, a las 18 horas. Sin embargo, cuando hablan de la hora a la que deberían encontrarse, acaban mencionando horas como las 23 de la noche. “Cariño, a esa hora mis dientes están cepillados, mi pijama está puesto, y estoy lista para irme a la cama”, asegura.
Los horarios para las comidas en España, que típicamente incluyen un almuerzo tardío y una cena aún más tardía comparados con otros países, son una muestra de la idiosincrasia y tradición de esta cultura, una que la tiktoker asegura respetar sin ninguna duda. Según ella misma añade, no se trata de criticar la cultura de nadie, ni de quejarse sobre las horas a las que acostumbran a quedar, sino de subrayar cómo de “inflexibles” son los españoles en este sentido.
“En Estados Unidos, si quiero comer antes o después, la gente es flexible”, asegura. Sin embargo, si le pides a un español cenar a las 18 horas, directamente “te deportan”, dice la tiktoker en tono de humor. “No entiendo a qué se debe, estoy muy perdida”, agrega finalmente pidiendo consejo a los españoles que la estén escuchando.