Los polvorones son un ejemplo magnífico de cómo con solo cuatro humildes ingredientes es posible conseguir un producto prácticamente perfecto. Tanto es así, que los consumimos sin apenas variaciones desde hace unos quinientos años. Junto al turrón y el mazapán, son uno de los dulces más emblemáticos de la Navidad en España.
Aunque lo más común es comprar estos dulces navideños en los supermercados, en realidad es posible cocinarlos en casa de forma sencilla y rápida. Esta receta de polvorones caseros es digna de las mejores reposterías. Los ingredientes son fáciles de conseguir y, para un resultado perfecto, no necesitamos contar con herramientas sofisticadas, por lo que este año no hay excusa para no intentar hacer uno de los dulces más típicos de la Navidad en nuestras propias cocinas.
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La historia de unas ‘galletas navideñas’ con cinco siglos de historia
Los polvorones nacieron en Estepa, un pueblo de la provincia de Sevilla que puede presumir de ser la cuna de uno de los dulces más emblemáticos de la Navidad. Estos bocados tienen su origen en el Convento de Santa Clara, donde las monjas clarisas comenzaron su elaboración en el siglo XVI.
El éxito de los polvorones se disparó gracias a la labor de estas religiosas, propiciando que la demanda se extendiese más allá de las fronteras de su localidad natal, alcanzando rincones de toda España, incluyendo ciudades como Madrid y Sevilla. Para satisfacer esta alta demanda, el Convento de Santa Clara llegó incluso a contratar confiteros adicionales. Con el tiempo, se asentó la tradición de consumir polvorones durante el período navideño, incrementando su producción en estas fechas.
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Hoy en día, los polvorones de Estepa son sinónimo de la tradición navideña y el legado repostero del siglo XVI, manteniendo la receta original que empleaban los hogares del pueblo de Estepa y que las monjas clarisas perfeccionaron. Estos dulces tradicionales, hechos a base de manteca de cerdo, harina, almendra y azúcar, gozan actualmente de protección bajo la Indicación Geográfica Protegida para asegurar su autenticidad y calidad.
Receta de polvorones de almendra
Tiempo de elaboración: 1 hora
Raciones: 4 personas
Ingredientes:
- 100 g de almendras crudas peladas
- 400 g de harina de trigo
- 200 g de manteca de cerdo a temperatura ambiente
- 100 g de azúcar glas
- 1 pizca de sal
- 1 cucharilla de canela
- Ralladura de un limón
Elaboración:
- En una sartén a fuego medio, cocinamos la harina durante unos dos minutos, removiendo constantemente, hasta que desaparezca el olor a crudo. Una vez cocinada, la tamizamos y dejamos que se enfríe.
- En esta misma sartén tostamos las almendras crudas y peladas. Una vez consigan un tono dorado, las trituramos y las mezclamos con la harina en un bol. Además, incorporamos 100 gramos de azúcar glas, una cucharilla de canela y la ralladura de un limón. Mezclamos todo.
- Una vez mezclados todos los ingredientes, añadimos al bol los 200 gramos de manteca de cerdo a temperatura ambiente. Mezclamos bien y amasamos hasta que se forme una masa homogénea. Guardamos la masa en la nevera y dejamos que enfríe durante unos 30 minutos.
- Precalentamos el horno a 180 °C con calor arriba y abajo y preparamos una bandeja de horno con papel vegetal. Estiramos la masa entre dos papeles de horno con un grosor de 1,5-2 cm, ayudándonos con un rodillo, vaso o botella si es necesario.
- Cortamos los polvorones con un cortador circular de unos 5 cm o con un vaso y los ponemos en la bandeja de horno un poco separados. Los horneamos durante 12-15 minutos, hasta que los bordes estén ligeramente dorados.
- Los sacamos del horno y dejamos enfriar completamente en la bandeja, ya que en este momento son extremadamente delicados. Una vez se hayan enfriado, los espolvoreamos con azúcar glas.