¿Cómo prevenir el dolor de espalda?

Es uno de los principales motivos de incapacidad a nivel mundial y de ausentismo laboral

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Mujer con dolor de espalda
Mujer con dolor de espalda (Shutterstock)

El dolor de espalda constituye una causa importante de consulta médica y de ausentismo laboral, puesto que es uno de los principales motivos de incapacidad a nivel mundial. Existen medidas preventivas efectivas para evitar la mayoría de los episodios de dolor de espalda, aunque en ocasiones no es suficiente.

El dolor de espalda muchas veces surge sin una razón específica visible en exámenes médicos o pruebas de imagen. Entre las causas más comunes, la Clínica Mayo incluye las siguientes:

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  • Distensiones musculares o de ligamentos, originadas por el levantamiento repetido de cargas o movimientos bruscos, que pueden ocasionar espasmos en personas que tienen una mala condición física.
  • Hernias o rupturas discales. Los discos actúan como amortiguadores entre los huesos de la columna vertebral. Si el material blanco que los compone se rompe, puede hacer presión sobre un nervio.
  • Artritis, que suele afectar la zona lumbar y derivar en estenosis espinal, que es el estrechamiento del espacio alrededor de la médula.
  • Osteoporosis, con el riesgo de fracturas vertebrales por debilitamiento óseo.
  • Espondilitis anquilosante o espondiloartritis axial, una enfermedad inflamatoria que puede provocar la fusión de huesos de la columna, restringiendo su flexibilidad.
Mujer con dolor de espalda
Mujer con dolor de espalda (Shutterstock)

Para prevenir el dolor de espalda se recomienda:

  • Realizar ejercicios aeróbicos de bajo impacto que no sobrecarguen la espalda, como caminar, andar en bicicleta y nadar.
  • Fortalecer la musculatura abdominal y de la espalda mediante ejercicios específicos que ayuden a fortalecer el tronco para sostener bien la espalda.
  • Mantener un peso saludable para minimizar la presión sobre los músculos dorsales.
  • Evitar el tabaquismo, que está vinculado al aumento del riesgo de dolor lumbar.
  • Prevenir lesiones adoptando técnicas correctas al levantar peso, como usar la fuerza de las piernas manteniendo la espalda recta y el objeto cerca del cuerpo.

Para el uso apropiado del cuerpo se aconseja mantener una buena postura de pie evitando inclinarse hacia adelante, alternar la carga en las piernas si se está mucho tiempo de pie y elegir asientos con soporte lumbar. Además, es importante cambiar de posición frecuentemente y practicar técnicas adecuadas al levantar objetos.

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Factores de riesgo del dolor de espalda

El dolor de espalda no discrimina y puede afectar a personas de todas las edades, incluidos niños y adolescentes. Sin embargo, es cierto que hay diversos factores que aumentan el riesgo de sufrir esta afección:

  • Con la edad, el riesgo de experimentar dolor de espalda se incrementa a partir de los 30 o 40 años.
  • La inactividad física puede hacer nuestros músculos más débiles, especialmente en el área de la espalda y el abdomen, lo que puede ser causa de dolor.

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  • Un exceso de peso corporal puede suponer una carga adicional para la estructura de la espalda.
  • Enfermedades específicas, incluidas ciertas formas de artritis y el cáncer, pueden estar relacionadas con el dolor de espalda.
  • Una técnica incorrecta al levantar objetos, utilizando la espalda en vez de las piernas, puede desencadenar dolor en esta área del cuerpo.
  • Los trastornos psicológicos, como la depresión y la ansiedad, están vinculados con una propensión aumentada a padecer dolor de espalda. El estrés, además, puede causar tensión muscular, lo que contribuye al dolor.
  • El hábito de fumar se asocia con una mayor frecuencia de dolor de espalda debido a que puede inducir tos que, a su vez, puede llevar a una hernia discal. Además, el tabaquismo puede disminuir el flujo sanguíneo hacia la columna e incrementar el riesgo de padecer osteoporosis.
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