La gastronomía gallega está repleta de productos de enorme calidad y platos tradicionales con los que se hace la boca agua. En pueblos como Sanxenxo, referente turístico del norte de España, destaca la cocina que homenajea al marisco y al pescado, cuya calidad y frescura está garantizada, ya que allí se ubican diferentes cetareas de las que proviene la mejor materia prima.
El rey Juan Carlos I, más que frecuente visitante de este pueblo costero gallego, es un amante de la cocina de la zona, lo que demuestra con cada una de sus estancias. Sanxenxo se ha convertido para el Rey emérito en su destino predilecto cuando viene a España, una localidad gallega en la que se encuentran su grupo de amigos, su club de regatas y algunos de sus restaurantes preferidos. Para despedirse de este pueblo, del que ha partido este domingo, nada mejor que una buena cena en el Club Náutico, una última noche que ha estado maridada con un menú lleno de productos que gritan ‘Galicia calidade’.
Te puede interesar: Patrimonio Nacional ha gastado en cuatro años 1,25 millones en arreglar los jardines que rodean la residencia de Felipe VI y Letizia
El restaurante del Club Náutico de Sanxenxo
Desde el día 1 de julio de 2008, el Gran Talaso Hotel Sanxenxo se ha hecho cargo de los servicios de restauración y la organización de eventos del RCN Sanxenxo, por lo que ellos son los encargados de llevar adelante el restaurante del club. Su trayectoria les ha permitido ser miembros de la prestigiosa asociación “Amigos da Cociña Galega” que preside Pepe Solla y también formar parte como establecimiento recomendado de la Guía Michelín para España y Portugal en 2007 y 2008.
Este restaurante cuenta con una carta variada que recoge algunos de los mejores productos del mar y la montaña gallega. Entre su lista de entrantes se pueden encontrar clásicos de la gastronomía gallega como es el pulpo á feira o los huevos rotos con carabinero. Sin embargo, en esta lista destacan también platos originales, con influencias de la cocina internacional, como es el caso del pan bao relleno de pulled pork, kimchi, lechuga en juliana, cebolla crujiente y salsa de yogur.
Te puede interesar: Tres ‘pajes reales’ acuden a la casa de Pedro Campos en Sanxenxo para visitar al rey emérito Juan Carlos I “por si necesita algo”
Por supuesto, los mariscos son parte fundamental de esta carta, con una selección de primera que se basa en los productos de la ría gallega. Almeja babosa, berberecho, navajas, camarón... Todo ello llega al club directamente desde las rías, conformando así una selección que varía dependiendo de la pesca del día. Los arroces, por supuesto, también tienen el mar como protagonista, lo que se puede ver en platos como el arroz con bogavante o el arroz con marisco.
En cuanto al pescado, destacan platos como la Merluza Galicia Calidade, una merluza del pincho Puerto de Celeiro cocinada a baja temperatura con cremoso de patata y ajada tradicional y texturizada. A esta selección le sigue una lista de carnes que representan lo mejor de los campos gallegos: los comensales pueden pedir chuleta o entrecot de ternera Rubia Gallega, así como croca de vaca, un corte muy popular en Galicia que se extrae de la cadera del animal.
En lo que a los postres se refiere, no podía faltar la clasiquísima Tarta de Santiago, aunque tampoco otros dulces menos locales como el coulant de chocolate belga. Otros platos, también de la carta de postres, vuelven a dar importancia al producto gallego, algo que ocurre, por ejemplo, con la tarta cremosa de quesos gallegos cocinada al horno.
El menú del rey Juan Carlos I, por 35 euros
Durante su última estancia en Sanxenxo, don Juan Carlos salió a cenar en el comedor del Club Náutico, disfrutando allí de una cena por 35 euros que compartió con todos los socios que acudieron a la velada gastronómica, en la que también participó la infanta Elena.
El menú, según informa Vanitatis, consistió en unos entrantes, un plato principal, postre y bebidas incluidas, excepto el vino. El emérito pudo disfrutar de entrantes como la tabla de jamón ibérico, mariñeiras con sardina ahumada, cremoso de espirulina, mejillones con marinera de bogavante y jalapeño fresco y almeja babosa a la sartén con aceite de ajo y perejil fresco a base de arbequina. Como plato principal, el rey degustó la merluza del pincho puerto de Cedeira a baja temperatura con cremoso de patata y ajada texturizadas. Como postre final, tarta de quesos gallegos y helado de crema de orujo.