Bica de Trives, el delicioso bizcocho que representa a uno de los pueblos más bonitos de Galicia

La gastronomía gallega está repleta de exquisiteces dulces, con recetas tan emblemáticas como la Torta de Santiago, la larpeira, las melindres o la rosca de Pascua, referentes en las pastelerías de la región durante todo el año. A todas ellas se le suman postres tradicionales de pueblos más pequeños que, aunque puedan pasar desapercibidos, son igualmente deliciosos y llamativos.

En la localidad gallega de A Pobra de Trives (Ourense), se elabora durante la época de carnaval un delicioso bizcocho mantecado que se ha convertido en uno de sus atractivos más valiosos. Se trata de la Bica de Trives, una especie de bizcocho con una miga consistente pero jugosa, lleno de sabor y con una deliciosa corteza superior tostada. Su receta, con la manteca de vaca y la masa de pan como ingredientes principales, ha pasado de generación en generación, convirtiéndose así en uno de los postres más populares de la zona.

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La producción se produce mayoritariamente en la zona de Trives, aunque también hay venta en otros lugares de Galicia como Ourense o A Coruña. Aunque su origen es incierto, se tiene constancia de la existencia de este dulce ya en el siglo XIX, elaborándose en las casas para su consumo en festividades. La Bica originaria de la comarca de Terra de Trives es dulce, de textura abizcochada, y con una corteza superior tostada, una mezcla de sabores y texturas que ha traspasado las fronteras de este pueblo orensano.

Puebla de Trives, situado en la parte más nororiental de Ourense, es uno de los pueblos con más encanto de la zona. No obstante, sus encantos turísticos, cultuales e históricos son aún un secreto bien guardado. Trives puede presumir de tener uno de los cascos antiguos mejor conservados de Galicia, salpicado de casonas señoriales, de antiguos pazos, de miliarios y otros edificios que rezuman historia, además de toda suerte de huellas romanas aún conservadas en nuestros días.

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Por supuesto, también en su casco histórico, se puede encontrar un importante número de tabernas y bares donde saborear su gastronomía. La Bica es uno de sus platos más característicos, pero también se le suman otras delicias de enorme calidad como aquellos derivados de la matanza del cerdo (chorizos, jamones, androllas...), así como vinos y licores y productos como la castaña o el cabrito asado.

Trives es un tesoro oculto situado en pleno medio del Macizo Central ourensano, en las estribaciones occidentales de la Sierra de Queixa, que superan los 1.500 metros. Además, Trives es todo un referente para el turismo de esquí gallego, dado que en su término municipal se localiza la estación invernal Cabeza de Manzaneda, la única en toda Galicia en la que se pueden practicar los deportes de nieve.

Cada último domingo de julio, desde 1972, los triveses se reúnen para celebrar esta delicia repostera, en una deliciosa celebración que lleva su nombre. La Festa da Bica se celebra en una enorme carpa en pleno pueblo de Trivas en la que, con las charangas de fondo, cientos de vecinos y turistas se reúnen para disfrutar de esta jornada gastronómica. Allí, los triveses pueden disfrutan de un menú compuesto por los platos más deliciosos y característicos de la cocina orensana, como el pulpo, el bacalao, la empanada o los pimientos, todo ello culminado con una degustación de bica y licor de café.

Miles de personas acuden a esta fiesta cada año, agotando cada vez las existencias de bica en este pequeño pueblo. Los visitantes y turistas no solo la pueden disfrutar durante ese día, sino que también la suelen comprar y llevar a casa como regalo, sin duda el mejor souvenir que se pueden llevar de esta tierra.

Para hacer en casa esta receta de Bica de Tirves hay dos dificultades que tener en cuenta. Por un lado, la de conseguir manteca cocida de vaca, un producto más común en tierras gallegas y sin el que conseguir la textura y el sabor de la clásica bica es muy complicado. Si no conseguimos hacernos con esta grasa, se pueden utilizar otras en sustitución como la mantequilla, aunque lo cierto es que el resultado no será completamente fiel al de la bica tradicional de Trives.

El otro hándicap a la hora de cocinar nuestra propia bica es la masa de pan que se emplea en su receta. Para lograrla, es necesario hacer un prefermento, un proceso más sencillo de lo que pudiera parecer. Para preparar este prefermento solo tendremos que mezclar harina con agua y levadura y dejar que ocurra la magia. Eso sí, la harina ha de ser de fuerza (también conocida como harina panificable) y el agua deber estar templada, para que las levaduras reaccionen y no se mueran con demasiado calor, ni dejen de activarse por encontrarse en un medio demasiado frío.

Una vez hayamos juntado estos elementos, los tendremos que dejar reposar como mínimo una o dos horas, aunque lo ideal sería dejarlo durante toda la noche en la nevera, en un bol tapado con film. Todo depende del tiempo y paciencia de la que dispongamos a la hora de hacer nuestra Bica de Trives.

Superadas estas dos dificultades, ya solo tendremos que ponernos manos a la obra y mezclar todos los elementos de este bizcocho gallego. La manteca cocida de vaca, el azúcar, la masa de pan, los huevos y la harina de trigo darán como resultado un bizcocho dulce, esponjoso y lleno de sabor.

Tiempo de elaboración: 2 horas y 50 minutos

Raciones: 6 personas

Ingredientes:

• 200 g manteca de vaca (o mantequilla en su lugar)
• 300 g de azúcar
• 5 huevos
• 200 g de harina panificable
• Medio limón
• Canela molida, media cucharadita.
• 200 g de harina de fuerza
• 8 g de levadura fresca de panadería
• 135 ml de agua templada

Elaboración:

1. Calentamos el agua hasta que esté templada. Mezclamos los ingredientes del prefermento en un bol y dejamos fermentar cubierto de un paño o film transparente durante 1 o 2 horas. Será preferible dejarlo reposar en la nevera durante una noche entera.
2. Cuando vayamos a cocinar nuestra Bica, precalentamos el horno a 180º con calor arriba y abajo.
3. Forramos un molde con papel vegetal, ponemos un poco de mantequilla y reservamos.
4. A continuación, haremos la masa final mezclando todos los ingredientes. Podemos utilizar un robot de cocina o hacerlo a mano con unas varillas.
5. Derretimos la manteca de vaca (o la mantequilla en su caso), ya sea calentándolo a golpes suaves en el microondas, removiendo hasta que esté casi líquida o poniéndola a baño María a fuego suave. Dejamos enfriar.
6. Ponemos en un bol la manteca derretida y el azúcar y mezclamos durante unos minutos hasta obtener una mezcla blanquecina.
7. Incorporamos los huevos uno a uno, mezclando por completo con cada uno que añadamos.
8. Añadimos la ralladura de medio limón.
9. Agregamos el prefermento en trozos y continuamos batiendo hasta que se haya integrado totalmente en la mezcla, hasta que la masa quede lisa y sin grumos.
10. Incorporamos la harina tamizada con una pizca de sal y la canela, integrándola poco a poco.
11. Volcamos la mezcla en el molde y creamos una capa de azúcar por encima, añadiendo también una pizca de canela.
12. Horneamos unos 45-50 minutos o hasta que pinchando salga limpio y seco.
13. Finalizada la cocción, retiramos del horno, esperamos 10 minutos a que se temple un poco y desmoldamos sobre una rejilla. Dejamos enfriar y servir.