El callejón de Madrid que te teletransporta a Japón: sushi, ramen, sake y té matcha en una ‘izakaya’ contemporánea

Caminando por el centro de Madrid, en la concurrida calle Preciados, llama la atención la entrada a un pequeño callejón que desentona entre el resto. En el número 34 de esta calle madrileña se encuentra la entrada a Konnichiwa, un restaurante japonés estilo izakaya que ya se ha convertido en todo un éxito entre los amantes de la cocina nipona y que, además, desprende la esencia del Japón más cosmopolita. Se trata del segundo local que abre este restaurante en Madrid, después de su éxito en su callejón en Fuencarral.

Una izakaya es un típico bar o taberna japonesa, un local informal común en las ciudades más cosmopolitas del país nipón en el que tomar algo de beber y de comer, especialmente por las noches. En una izakaya se sirven tanto comidas como bebidas; en la mayoría de ellas hay disponibles mesas y sillas al estilo occidental, y también zonas y habitaciones privadas con suelo de tatami al estilo japonés tradicional. Son lugares ideales para ir a tomar algo al salir de la oficina, con los compañeros de trabajo o para quedar con amigos, un ambiente que también se puede experimentar en pleno centro de Madrid.

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Entrar en Konnichiwa es como teletransportarse a Japón. Su decoración, cuidada al detalle con banderas, carteles y neones, imitan a la perfección la idealizada imagen de las calles del país asiático. El local parece pequeño desde fuera, con una barra y unas mesas en la entrada, más atrás se encuentra la cocina al fondo, otro salón y todo otro piso si bajas sus escaleras.

El viaje que comienza con la decoración de este callejón continúa con los sabores de la cocina japonesa que se pueden probar en sus mesas. La carta de Konnichiwa es bastante amplia y permite probar múltiples recetas de la gastronomía japonesa más tradicional, así como deliciosos platos de cocina callejera que bien podrían haber llegado desde un pequeño puesto de las calles de Tokio.

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Con algunos de ellos seguramente ya estarán familiarizados los amantes de la cocina nipona. Cuentan con diversos entrantes y piezas de sushi variado; sí como gyozas, que se pueden pedir con relleno de carne, gambas o vegetales, y ramen, del que se ofrecen diferentes versiones (con salsa de soja, miso, vegetariano o picante). Pero también hay otros platos sorprendentes como el Kushiyaki, una brocheta o pincho con carne de buey como ingrediente principal, o los takoyaki, bolas de harina con pulpo y jengibre encurtido.

El Okonomiyaki es una de sus especialidades, un plato de lo más popular en las tabernas de todo Japón. Se trata de una tortilla de huevo y harina con un sinfín de variaciones, que siempre suele tener algo de proteína, verduras y se remata con alguna salsa. En Konnichiwa se pueden probar varias versiones, como la Okonomiyaki Osaka Style, una tortilla salada elaborada a base de harina, agua, cebolla, repollo, bacon, huevo y gambas. Todo ello cocinado a la plancha.

En los postres predominan las propuestas más emblemáticas y populares de la cocina nipona: dorayakis, mochis rellenos de helado y los típicos peces de pasta dulce rellenos de judía roja (daiyakis). Pero, además, todo un repertorio de postres con el té más famoso de la gastronomía japonesa, el matcha, como sabor principal. Para acabar el festín puedes probar su helado de matcha, su tiramisú artesanal de matcha con base de oreo, o su roll cake de matcha, un bizcocho artesano con nata, queso philadelphia y azuki.

Como en todo buen izakaya, en Konnichiwa la bebida tiene un papel fundamental, ya sea como protagonista o como acompañante. Su oferta líquida comienza, como no podía ser de otra forma, con el té, concretamente con cinco opciones diferentes de té verde. Continúa con refrescos comunes y también el clásico ramune, una gaseosa muy suave de varios sabores que es muy popular en Japón. Además, cuentan con una selección de tres cervezas japonesas (Asahi, Sapporo y Kirin) y, por supuesto, varias opciones diferentes de sake, una bebida fermentada a base de arroz, que posee un grado de alcohol promedio del 15 por ciento, y que se toma tanto frío como caliente.