A lo largo y ancho del territorio español podemos encontrar un total de 248 restaurantes galardonados con la distinción más prestigiosa del mundo de la alta cocina, la estrella Michelin. Ya tengan uno, dos o tres de estos astros, estos locales sirven las elaboraciones de algunos de los mejores chefs del país, platos que, en muchas ocasiones, tienen un precio bastante elevado. Pero más allá de los más exclusivos, algunos como DiverXo o el restaurante de Quique Dacosta, España cuenta con todo un universo de menús asequibles que pueden disfrutar casi todos los bolsillos.
Es el caso de este restaurante, una de las opciones de alta cocina más asequibles de todo el norte español. Se trata de El Nuevo Molino, un estrella Michelin ubicado en el bello pueblo cántabro de Puente Arce. El chef Jose Antonio González ha sido el principal causante de este rotundo éxito, que ha llevado al restaurante a conseguir además dos soles en la guía Repsol.
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Lo que en el siglo XVIII fue un molino de agua alimentado por el río Pas, cauce que atraviesa este pequeño pueblo cántabro, en 1970 se convirtió en El Molino, un negocio familiar que durante 30 años se mantuvo entre los restaurantes más prestigiosos de la región. Tras unos años cerrado, en febrero de 2004 fue reabierto bajo una nueva dirección que ahora triunfa con su carta y menús degustación. Este precioso restaurante, a orillas del Pas, destaca por su emplazamiento y también por su jardín, con una antigua capilla desacralizada y un gran hórreo que hoy funciona como bistró en la versión más desenfadada del proyecto.
En los bellos comedores del edificio principal, de ambiente rústico, el chef José Antonio González sirve una cocina cántabra tradicional con guiños contemporáneos y basada en el producto que hace famosa a la comunidad. El pescado que sirve es estrictamente del día y de temporada: el jefe de cocina, José Antonio González, acude a la lonja a diario para seleccionar las mejores capturas. Otras deliciosas materias primas coprotagonizan su carta, como es el caso de la carne de vaca tudanca, una raza autóctona de estas laderas montañosas. Mar y montaña se unen en una carta en la que los ganaderos, queseros, agricultores y pescadores de Cantabria participan como aliados indispensables. Además, el restaurante posee una bodega con más de 300 referencias de 11 países, una cuidada variedad de cafés y una mimada selección de licores.
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Cocina cántabra a la carta y menú degustación por 58 euros
En su carta se encuentran entrantes con el marisco como propuesta principal, con platos como las Vieiras y caldo de cocido Lebaniego (25,00 €) o la Ostra con leche de tigre, y ají amarillo (3,50 €/Und). Además, los comensales pueden dejarse aconsejar por la jefa de sala y probar el pescado del día que el chef haya elegido de la lonja o probar alguna de sus propuestas de carne de buey tudanco, como su entrecot con crema de hierbas y yema curada (30,00 €).
Por otro lado, El Nuevo Molino cuenta con dos menús degustación distintos, con precios variados. El primero es el Menú Largo y Estrecho, una degustación con diez pases que tiene un precio de 98,00 € por persona. El segundo, la opción de menú más económica, es el Tradición, que incluye una ensalada de bacalao, setas, pimientos y pil pil; un plato de pescado según mercado; un plato de ternera en su jugo, zanahoria y cebolleta ecológica y una torrija de pan caramelizada con helado de jengibre. Todo ello se puede probar por 58 euros por comensal.
Le Hórreo, el bistró del chef
El Nuevo Molino cuenta con una especie de subespacio donde se puede disfrutar de la cocina de Jose Antonio González en su formato más desenfadado. Se trata de Le Hórreo, un bistró divertido ubicado en un lugar distinto y singular con capacidad para ofrecer en torno a treinta cubiertos por servicio. Allí, en el jardín del restaurante o en su hórreo, se puede probar una oferta variada de cocina fresca y de producto, que se resume en un menú diario que varía diariamente en función del mercado y la temporada y que permitirá disfrutar del talento del cocinero en su versión más informal.
Este menú diario tipo bistró tiene un precio de 25 euros por persona e incluye un entrante, a elegir entre opciones como el gazpacho con sardinas marinadas, la ensaladilla de atún y las verdinas guisadas con calamar; un principal con el que probar platos como el lomo de bonito con salsa de tomate o el taco de costilla de cerdo ibérico; y postres como una degustación de quesos de Cantabria, una deliciosa tarta de oreo o un cremoso de chocolate.
Puente Arce, un destino cultural, natural y gastronómico
Además de su deliciosa cocina cántabra, el precio de sus opciones y su entorno de ensueño, El Nuevo Molino tiene otras virtudes de las que presumir. Entre ellas, el coqueto pueblo en el que se ubica: Arce, o Puente Arce, una pequeña localidad del municipio de Piélagos. El pueblo debe parte de su nombre a su monumento más conocido, el puente que salva las aguas del río Pas para poder cruzar de Arce a Oruña, construido en el siglo XVIII como parte del Camino Real.
El pueblo se encumbra como un destino de excepcional interés por su cultura y su arquitectura, con monumentos declarados como Bien de Interés Cultural. Pero, además, Arce está enclavado en un entorno con una privilegiada naturaleza. No solo cuenta con el paisaje que le otorga el Pas y su preciosa desembocadura, sino que también se encuentra a poca distancia del Parque Natural de las Dunas de Liencres, de enorme importancia ambiental, y cuenta con playas como la de Valdearenas y Canallave.