Se trata del mítico restaurante Casa Lac, situado en el corazón del popular ‘Tubo’ zaragozano. Y este lugar no solo es especial por su cocina, sino que su historia lo convierte en un verdadero monumento histórico. Casa Lac abrió sus puertas nada más y nada menos que en 1825, hace 198 años, convirtiéndose así, según la prestigiosa Guía Michelin, en el local con la licencia de restaurante más antigua de España.
La familia Lac fue la encargada de abrir las puertas de este restaurante, una estirpe de cocineros de origen francés que llegaron a Zaragoza ese mismo año. Como tantos cocineros de la nobleza francesa, los Lac tuvieron que salir de Francia tras la Revolución francesa, tras lo que muchos se dedicaron a fundar restaurantes por toda Europa. Ellos fueron los encargados de fundar Casa Lac, un local de dos plantas que triunfó en la ciudad aragonesa desde sus inicios, con una planta baja dedicada a repostería y una parte superior a comidas.
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En 1925, tras cumplir un siglo desde su apertura, Casa Lac restauró su primera planta, dotándola de los detalles decorativos modernistas de moda en la época. A día de hoy, el piso superior de estilo isabelino sigue conservando lámparas de su apertura, mientras que mantiene los detalles de gusto modernista añadidos hace casi un siglo, como la escalera de hierro forjado, el artesonado de madera y el suelo de parqué con maderas guineanas y canadiense.
En sus casi 200 años de historia, Casa Lac ha sido testigo de encuentros y hechos históricos sin igual. En sus mesas se han sentado personalidades tan conocidas como Benito Pérez Galdós, Mariano de Cavia, Lorenzo Pardo, el general Primo de Rivera, Sanjurjo… Incluso, cuentan las historias, cuando el rey Alfonso XII visitó Zaragoza, el Ayuntamiento de la ciudad encargó la comida a este histórico restaurante.
En 2003, Casa Lac cerró sus puertas para llevar a cabo una profunda renovación que acabó en el 2008, de la mano de la familia de restauradores navarros de Ricardo Gil. La familia Gil ha llevado a las cocinas de Lac la esencia de la huerta navarra, de donde ellos son originarios, con las verduras de temporada como producto estrella. Alcachofas, borrajas, cardos, espárragos y otras hortalizas de Tudela se convierten en protagonistas de una carta única, en la que pescados y carnes son meros acompañantes, aunque de excelente calidad.
Valorado con un 4 sobre 5 en la web de restauración TripAdvisor, el precio medio del ticket en Casa Lac ronda los 50 euros por comensal.
Las verduras como protagonistas, con carne y pescado como acompañantes
“Nuestros platos están llenos de tradición, pero con vivaces destellos de innovación”, describe Ricardo Gil en la web de su restaurante, describiendo la carta del mítico Casa Lac. En sus cocinas se trata con absoluto mimo su producto estrella, las verduras de temporada, que son seleccionadas de las huertas que la familia tiene en Navarra. Estas son también las protagonistas de su menú degustación de verduras, el primero de España con estas características. Se trata de un menú especial, formado por seis platos basados todos ellos en las verduras, aunque con acompañamientos como el jamón confitado o velo de papada ibérica.
Además de sus menús, Casa Lac ofrece a sus clientes la posibilidad de elegir los platos que más les gusten de una carta amplia llena de sabor y productos de calidad. El festín comienza con entrantes como la Barqueta de tomate rellena de pimiento de piquillo asado, boquerón marinado con mahonesa de tomate y aceite de pimiento y olivas negras o el Canelón de pasta fresca relleno de longaniza de Graus con salsa de foie y tartufata.
La carta elaborada por Ricardo Gil también incluye un apartado de pescados, con platos como las Kokotxas de merluza al pil-pil o el Tataki de atún yellowfin con mahonesa de mostaza y soja; y de carne, con delicias como las Albóndigas crujientes de venado y cerdo ibérico sobre fondo de parmentier o la Paletilla de cordero lechal asada 12 horas a baja temperatura.
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