Qué es el dochi, la imitación del mochi con galleta triturada y sabor a tarta de queso que arrasa en Mercadona

En plena temporada de verano, los helados se convierten en aliados imprescindibles para soportar el calor y disfrutar de sabores dulces y originales. En esta época, las cadenas de supermercados llenan sus congeladores de originales polos, conos y sandwiches que pretenden convertirse en favoritos de aquellos amantes del dulce que busquen refrescarse y saciar el hambre con uno de estos placeres congelados. Mercadona, una de las cadenas con más clientes alrededor de todo España, ha añadido un nuevo producto a su lista de novedades veraniegas, un dulce que, como suele ocurrir con muchos de los artículos de la cadena, se ha convertido en un fenómeno viral casi al momento.

A mediados de julio, Mercadona sorprendía con una novedad en su sección de congelados, un postre que une el sabor de la archiconocida tarta de queso con la forma y la textura de los deliciosos mochis helados que la marca ha popularizado en España. Se trata de unos pequeños bocados muy similares a los clásicos mochis formados por una bola de helado sabor a queso, un relleno de salsa de frambuesa y una cobertura de galleta triturada. Esta nueva creación no tiene la textura gomosa exterior de la harina de arroz que caracteriza al conocido mochi, aunque sí cuenta con una capa de esta textura que le da un contraste de textura con la cobertura de galleta.

El proveedor especialista de Mercadona ha decidido variar la denominación de este producto, y llamar a estos bocados helados Dochis, para así diferenciarlos del resto de mochis disponibles en la cadena de supermercados. El paquete disponible en Mercadona incluye 6 unidades con un peso total de 210 gramos y tiene un precio de 3 euros, unos 0,50 € por cada Dochi.

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Este producto debe conservarse a temperaturas inferiores a -18 °C y, para apreciar su textura por completo, se debe sacar del congelador unos 2 o 3 minutos antes de su consumo, pero siempre controlando que no lleguen a descongelarse por completo. Entre sus principales ingredientes se encuentran leche desnatada reconstituida, azúcar, harina de trigo, queso blanco pasteurizado, queso azul fundido, puré de frambuesa y canela.

Desde el día de su lanzamiento, este nuevo producto ha llamado la atención de aquellos amantes del dulce que suelen hacer su compra en Mercadona. La respuesta del público ha sido abrumadora, catapultando este postre a la categoría de “top ventas” en la cadena valenciana. Además, como suele suceder con novedades de la marca Hacendado, las redes se han llenado rápidamente de vídeos-reseña que comentan el sabor y la textura de este postre, comentando cuestiones como su precio o su sorprendente cobertura de galleta.

Esta novedad no es la única opción de este dulce japonés que se puede comprar en Mercadona. La cadena de supermercados valenciana ya comenzó a comercializar sus mochis helados hace unos dos años, un producto que se convirtió rápidamente en un auténtico éxito entre los amantes de estos dulces congelados. Actualmente, están disponibles en los sabores de coco y mango, pues el de pistacho se ha dejado de comercializar tras su lanzamiento en 2021, una decisión que causó verdadero revuelo entre los compradores.

Helados Estiu es la empresa encargada de elaborar estos productos, así como el resto de helados que se pueden encontrar en los congeladores de Mercadona. Es una de las pocas compañías que fabrica mochis de forma industrializada y, además de proveer a la cadena de supermercados, también cuenta con una marca internacional propia, Wao Mochi, que se comercializa en una veintena países. En este caso, los exportan desde su fábrica de Ribarroja de Túria con sabores como el chocolate, la vainilla o el té matcha. También tienen sabores como tropical, caramelo o cheesecake.

Los mochis son un dulce típico japonés elaborado con una masa blanda de arroz, conocido como arroz glutinoso o mochigome. Para elaborarlos con la receta tradicional, este arroz glutinoso se pone a remojar durante la noche y se cocina, para luego machacase con mazos de madera en un mortero tradicional. Para este proceso se necesitan dos personas, que se alternarán el trabajo: mientras uno lo golpea, el otro gira y moja el mochi. El resultado es una masa pegajosa, que puede ser formada en varias formas (por lo general una esfera o un cubo). Esta pasta blanda y gomosa se rellena de diferentes sabores. Aunque el relleno más tradicional es el de anko, una pasta dulce de judías rojas de la variedad azuki, muy popular en Japón, existen infinidad de rellenos como chocolate, té verde, fruta...

Este dulce pegajoso se come durante todo el año, pero, en realidad, el mochi es un alimento tradicional del año nuevo en Japón y se consume más comúnmente durante esa temporada. Desde Japón, este postre ha viajado a todo el mundo, convirtiéndose en una verdadera revolución dulce en países como España.

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