¿Cuáles son los síntomas de estrés?

El estrés y la ansiedad surgen como una respuesta del cuerpo de lucha o huida ante una amenaza. Conoce sus signos, síntomas, tipos y aprende a diferenciarlos.

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Síntomas del estrés.
Foto: BBVA
Síntomas del estrés. Foto: BBVA

Palabras como “estrés” o “ansiedad” son cada vez más comunes, a veces confundidas y muchas veces pasada por alto, pues no siempre se le da la importancia debida a nuestra salud mental. Por este motivo, indentificaremos sus signos, síntomas, causas y efectos.

Por su lado, el estrés es la respuesta de nuestro organismo ante la percepción de una amenaza o peligro. Puede afectar la salud física y mental de quienes lo padecen, por ello presenta síntomas y signos en las emociones, conducta y cuerpo.

El estrés en las emociones

- Irritabilidad.

- Enojo.

- Impaciencia.

- Sentirse abrumado o agobiado.

- No sentirse capaz de disfrutar.

- Preocupación.

- Aparente pérdida del sentido del humor.

- Mareos o náuseas.

- Nerviosismo.

- Desinterés por vivir.

- Si ha tenido problemas de salud mental, estos empeoran.

El estrés en el comportamiento

- Desinterés por el sexo.

- Dificultad para tomar decisiones.

- Problemas de memoria.

- Dificultad para concentrarse.

- Apretar la mandíbula.

- Comer mucho o muy poco.

- Comprar de más.

- Consumir alcohol, cigarrillos o drogas en exceso.

La irritabilidad es uno de
La irritabilidad es uno de los síntomas del estrés. Foto: Depositphotos

¿Qué parte del cuerpo afecta el estrés?

- Dolor muscular.

- Fatiga.

- Problemas para respirar.

- Presión arterial alta.

- Dolor de cabeza.

- Visión borrosa.

- Problemas para dormir.

- Acidez estomacal o indigestión.

- Estreñimiento o diarrea.

- Sensación de mareo o desmayo.

- Cambios en el ciclo mentrual.

- Aparición de erupciones o picazón en la piel.

¿Cómo saber si una persona sufre de estrés?

Para saber si una persona sufre de estrés, los compañeros de trabajo, amigos familia y pareja puede identificar los cambios de conducta del presunto estresado:

- Se muestra irritable, enojado, preocupado o tenso.

- Se aleja de quienes lo rodean.

- Se muerden las uñas.

- Conducta agresiva.

- Dificultad de recordar.

- Come mucho o muy poco.

- Se muestra inquieto.

- Rechina los dientes o aprieta la mandíbula.

- Dificultad para concentrarse.

- Llora más de lo normal.

- Presenta problemas o desinterés en el sexo.

- Fuma, bebe alcochol o consume drogas recreativas más de lo normal.

- Gasta o compra más de lo común.

- Hace mucho ejercicio o deja de hacerlo.

Los síntomas físicos y emocionales pueden ser identificados si esta persona logra abrirse o busca ayuda. Si han recurrido a ti, recuerda escuchar sin jusgar y guardar discreción. Si no sabes manejar la situación y solo empeora, aconséjalo empáticamente a tomar una terapia psicológica.

Morderse las uñas es una
Morderse las uñas es una de las conductas que podría delatar estrés en una persona. Foto: Mejor con salud

¿Qué puede causar el estrés?

Como lo vimos anteriormetne, el estrés puede causar problemas en la mente, conducta y cuerpo de quien lo padece, como fatiga, dolores de cabeza, iritabilidad, enojo o preocupación y mucho más.

Pero además, si el estrés no logra controlarse y permanece por mucho tiempo puede debilitar el sistema inmunológico y cuando esto ocurre la persona se vuelve vulnerable a ciertas enfermedades como:

- Resfriados.

- Verrugas recurrentes.

- Herpes simples o herpes Zoster.

- Candidiasis por hongos en la boca o esófago.

Causas del estrés

Sin embargo, si hablamos de aquello que puede causar estrés, suelen ser factores como:

- Problemas laborales como excesiva presión, mal ambiente laboral, muchas tareas, desempeñar un trabajo peligroso, el desempleo, etc.

- Dificultades económicas como deudas.

- Padecer una enfermedad crónica.

- Problemas familiares o de parejas como cuidar de un enfermo o ancianos, duelos, divorcios o separaciones, problemas de custodia de los hijos, etc.

- Eventos traumáticos como ser víctima de robos, secuestros o accidentes.

¿Cuáles son los tipos de estrés?

Los tres tipos de estrés más conocidos son:

Estrés agudo

El estrés agudo es el más común y corto. Se trata de la reacción inmediata del cuerpo antes una situación desafiante y nueva como por ejemplo cuando casi te choca un bus o casi caes por las escaleras, cuando ves una película de terror o cuando subes a una montaña rusa.

No es realmente malo pues cuando pasa su efecto el cuerpo vuelve a la normalidad. Incluso puede puede ayudarte a desarrolar una mejor respuesta a futuros estresores.

Estrés agudo episódico

Este tipo de estrés se presenta cuando hay frecuentes episodios de estrés agudo. Quienes lo padecen tienen ciertas características:

- Se muestran irritables y tensas.

- Asumen muchas responsabilidades autoimpuestas y no pueden manejarlas.

- Siempre están apuradas, pero llegan tarde.

- Todo les parece peligroso y no gratificante.

- Presentan migrañas, hipertensión y dolores de pecho.

Estrés crónico

Se presenta cuando se tiene altos niveles de estrés en un tiempo prolongado porque la persona siente que no hay salida y deja de buscar soluciones, incluso se acostumbran a él. Obviamente este estrés de largo plazo afecta a la salud:

- Produce aniedad y depresión.

- Enfermedad cardiovascular.

- Presión alta.

- Un débil sistema inmunológico.

- Dolores frecuentes de cabeza y estómago.

- Dificultad para dormir.

¿Qué es lo que piensa una persona con ansiedad?

Los especialistas coinciden en que el estrés es la reacción a una amenaza reconocida y suele ser de corto plazo, mientras que la ansiedad es una reacción que suele permaner más tiempo a una causa no siempre identificada. Sus síntomas son similares debido a que ambos son parte de la misma reacción del cuerpo. Cuando una persona tiene ansiedad experimenta:

- Respiración rápida.

- Ritmo cardiaco acelerado.

- Intranquilidad y temor.

- Tensión.

- Estreñimiento o diarrea.

- Sudoración.

Respecto a los pensamientos ansiosos, es decir, los pensamientos que tiene una persona con ansiedad, suelen exagerar o distorsionar la realidad e imaginar un futuro negativo. Por ejemplo: creer que un simple dolor puede ser un cáncer. Las personas con ansiedad pueden pensar:

- No sirvo para nada.

- Siempre me va mal.

- ¿Y si me equivoco?

- ¿Y si algo sale mal?

- ¿Qué pasaría sí...?

- ¿Estará molesto conmigo?

- ¿Qué estarán pensando de mí?

- ¿Por qué demora en contestar?

- ¿Se estarán burlando de mí?

¿Cómo saber si te va a dar un ataque de ansiedad?

La sensación de ahogo es
La sensación de ahogo es uno de los síntomas más comunes presentes en un ataque de ansiedad.

Un ataque de ansiedad, ataque de pánico o crisis de ansiedad es una reacción excesiva e intensa de ansiedad que puede durar entre 10 y 45 minutos. Puedes identificar esta crisis por algunos de los siguientes síntomas:

- Taquicardia.

- Sensación de ahogo.

- Palpitaciones.

- Sudoración.

- Presión fuerte en el pecho.

- Temblor.

- Aumento de temperatura o escalofríos.

- Dolor de cabeza.

- Sensación de hormigueo o entumecimiento de rostro o manos.

- Mareos, nauseas o sensación de desmayo.

- Creer que lo que está pasando no es real.

- Sensación de verse fuera de sí mismo.

- Temor a volverse “loco”, morir, perder el control o el conocimiento.

Si has notado alguno de estos en algún familiar o amigo, intenta no exagerar sus síntomas, mantener la calma y distraer su atención. Recuerda ser muy prudente y evita prejuicios, pero si estos episodios se repiten continuamente, es mejor consultar con un experto en salud mental para que ayude a manejar estas crisis. Recuerda que eres dueño de tus emociones y no podemos controlar todo lo que nos rodea, así que quiérete mucho y ama la vida.

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