Daisuke Hori, un hombre de 40 años y residente en la prefectura de Hyogo, Japón, ha causado furor en redes sociales al revelar su radical rutina de sueño, la cual ha mantenido durante los últimos 12 años. En un mundo donde se promueve la importancia de dormir entre siete y ocho horas diarias, este culturista asegura que con tan solo 30 minutos de sueño al día, ha “duplicado” su vida. Según él, este método le ha permitido estar más alerta, activo y productivo, transformando por completo su día a día.
Hori no es solo un hombre con una extraña rutina nocturna. También es un emprendedor exitoso que ha fundado la Asociación Japonesa de Entrenamiento para Durmientes Cortos, donde enseña a cientos de personas a replicar su estilo de vida basado en el principio de “calidad sobre cantidad”.
Este japonés, que recientemente compitió en el certamen Best Body Japan, ha logrado atraer la atención de medios locales e internacionales por la naturaleza controversial de su estilo de vida. “No necesito más de 30 o 45 minutos de sueño, porque el descanso de alta calidad es lo que realmente importa”, comenta Hori, quien afirma que este método le ha permitido aprovechar al máximo cada segundo de su vida.
Esta revelación, sin embargo, ha desatado tanto elogios como críticas. Mientras algunos lo consideran un “maestro del tiempo”, otros advierten sobre los riesgos para la salud que conlleva reducir drásticamente las horas de sueño. Las advertencias de especialistas sobre enfermedades como la hipertensión, la diabetes o los problemas cardíacos no parecen hacer mella en el japonés, quien sigue manteniendo su rutina y enseñando a otros a hacer lo mismo.
Un método fuera de lo común
Hori comenzó su experimento con el sueño hace más de una década. “Decidí reducir mis horas de sueño para tener más tiempo disponible para mis actividades diarias”, explica. Según él, la clave está en realizar una serie de ajustes en el estilo de vida, como mantenerse físicamente activo y consumir cafeína para contrarrestar la fatiga. “Mientras hagas deporte o tomes café una hora antes de comer, puedes evitar el sueño”, explica, dejando en claro que su vida no es para nada sedentaria.
Este hombre, que comparte su día a día a través de su cuenta de Instagram (@hori.gahaku), pasa la mayor parte de sus 23,5 horas despierto trabajando, entrenando su cuerpo y compartiendo tiempo con su familia. Aunque pueda parecer una rutina extenuante, Hori asegura que el cuerpo y la mente se acostumbran con el tiempo, permitiéndole vivir con una energía constante y sin signos de cansancio.
Su rutina, que incluye entrenamientos intensivos, trabajo como emprendedor y tiempo en familia, fue documentada recientemente en el programa de televisión japonés “Will you go with me?”, donde Hori fue seguido durante tres días. Durante el show, se le vio despertar tras tan solo 26 minutos de sueño, lleno de energía y listo para enfrentar otro día sin descanso. Según Hori, no es necesario dormir largas horas si se logra alcanzar una calidad de sueño reparadora en poco tiempo.
Críticas y defensores de un estilo de vida extremo
El método de Hori ha generado controversia, no solo en Japón, sino en todo el mundo. Su enfoque de “calidad sobre cantidad” en el sueño desafía las recomendaciones médicas tradicionales, que sugieren que un adulto necesita al menos siete horas de descanso diarias. De hecho, la National Institutes of Health advierte que la falta de sueño puede desencadenar serios problemas de salud como la obesidad, la depresión y las enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, para Hori, estos estudios no aplican a quienes entrenan su cuerpo de manera adecuada.
“No es lo mismo dormir mal que dormir poco. Lo importante es la calidad del sueño, no su duración”, defiende Hori, quien ha enseñado su técnica a más de 2.100 personas a través de su asociación. Algunos de sus estudiantes han pasado de dormir ocho horas a apenas 90 minutos, y aseguran sentirse igual de bien, si no mejor, que cuando dormían más tiempo. Una de sus alumnas declaró: “Llevo cuatro años durmiendo poco y mi piel y salud mental están en excelentes condiciones”.
Pero las críticas no han tardado en llegar. Varios internautas han expresado su preocupación por el impacto a largo plazo que este estilo de vida podría tener en la salud de Hori y sus seguidores. “Está sobrecargando su vida de antemano. Incluso si el cerebro aguanta, el corazón no lo soportará”, escribió un usuario en redes sociales. Otros, en cambio, lo ven como un ejemplo a seguir en la gestión del tiempo: “Es un verdadero maestro del manejo del tiempo. Me encantaría aprender a dormir menos y trabajar más eficientemente”, comentó otro seguidor.
Un hombre en guerra con el tiempo
Daisuke Hori no es el único que ha decidido enfrentarse a las limitaciones impuestas por el cuerpo humano. Junto a él, otras figuras como el empresario estadounidense Bryan Johnson, de 47 años, también han desarrollado rutinas extremas para prolongar la juventud y la productividad.
Johnson, quien invierte millones de dólares en un riguroso proceso de biohacking, afirma que ha rejuvenecido su cuerpo a través de un régimen que incluye 111 suplementos diarios, transfusiones de sangre y pruebas constantes de salud.
Para Hori, su batalla no es solo con el tiempo, sino con las convenciones sociales. Mientras continúe desafiando las normas y manteniendo su energía intacta, no parece que el japonés esté dispuesto a volver a una rutina de sueño convencional. Con seguidores que lo ven como un pionero y detractores que temen por su bienestar, su vida se ha convertido en un experimento público sobre los límites del cuerpo humano.