Este jueves se celebra el Día de Acción de Gracias, también conocido como Thanksgiving, que es considerada la fiesta más tradicional de los Estados Unidos. Este día, nueve de cada diez ciudadanos de los Estados Unidos se sientan en la mesa del comedor para compartir alimentos con sus familiares y amigos.
Así tengan que viajar varios kilómetros, las familias buscan reunirse para comer juntos pavo horneado, puré de papa, salsa gravy y de arándanos, pan de maíz, entre otros alimentos. A pesar de que esta comida es tradicional en los Estados Unidos, poco se sabe de que el plato principal de este día, el pavo, tuvo su origen el en centro de lo que hoy es México.
El nombre científico de este animal es Meleagris gallopavo mexicana y es la especie de la cual derivó el pavo moderno y se crió desde hace más de 2,000 años en Mesoamérica, la región que abarca desde el centro de México hasta el norte de Costa Rica.
Andrés Medina, etnólogo del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la Universidad Nacional Autónoma de México y coautor de “Huexolotl: presente y pasado”, declaró a la BBC de Londres que “el pavo es de origen mesoamericano, absolutamente”.
Y es que arqueólogos han encontrado evidencia en la región del centro de México, en particular, en la zona de influencia de la cultura teotihuacana, en el periodo clásico del año 300 al 900 d.C., donde el ave estaba más establecida. “Aparece desde la época clásica de Teotihuacán y ahí se difunde a otras partes del centro, y en el área maya (sur de México) muy tardíamente. Fue un regalo del centro hacia las rutas comerciales de Centroamérica”, explicó Medina al medio.
Al animal se le nombró “huexolotl” en la lengua náhuatl, que era hablada por los mexicas, pueblo descendiente de los aztecas. El nombre que se le otorgó al animal, viene de los términos huey, que significa grande o gigante, y Xólotl, que era una deidad de la cultura mexica.
En la cosmología prehispánica, existe La leyenda de los soles, en la que se dice que Xólotl “es un dios que se transformó en guajolote al huir de un sacrificio”, declaró Medina a la BBC. Explicó que era un animal muy importante en los sacrificios que se hacían en los rituales agrícolas, y posteriormente se consumió de muchas maneras.
Actualmente, el pavo o guajolote es un platillo que se acostumbra comer en diversas celebraciones en México, cocinado en las cenas navideñas al horno, principalmente en las ciudades, y en salsa de mole en bodas de pueblos más tradicionales.
A pesar de ser un ave criada durante siglos en el centro de México, y algunas partes de Centroamérica, el pavo o guajolote fue conocido por el resto del mundo a partir de la época colonial en la Nueva España, que comenzó en 1521 con la conquista de los españoles.
Estos últimos, llevaron el animal a Europa, y desde ahí comenzó a extenderse por el resto del continente y más allá, lo que llevó al ave a ser conocida de formas diferentes a la castellanización de “huaxolotl”.
Uno de los datos más curiosos del nombre del animal en otros países, es el nombre que se le dio en Inglaterra, donde comerciantes lo llevaron desde la región turca de lo que hoy es Estambul y por esto fue nombrado turquey coq, o gallina turca.
Posteriormente, los peregrinos que emigraron de Inglaterra al territorio que hoy es EEUU llevaron el pavo de regreso a América en el siglo XVII. La tradición del Día de Acción de Gracias se remonta a 1621, cuando cuando los primeros colonizadores del noreste del país ofrecieron una cena conjunta con los indígenas locales para celebrar su primera cosecha en América. A pesar de ello, no fue sino hasta 1863 cuando fue fiesta nacional.
En el siglo XX comenzaron a añadirse más rituales relacionados a Acción de Gracias. Harry S. Truman, quien fue presidente de Estados Unidos, recibió un ejemplar de Federación Nacional del Pavo de EE.UU. para celebrar Acción de Gracias en 1947, inició la tradición del pavo presidencial que continuaría año tras año.
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