La quinceañera que conmueve a México: usó el dinero de su fiesta para regalar comida a afectados por COVID-19

La joven de Mérida usó sus ahorros y brindó alimentos a personas que no podían no dar de comer a sus familias ante la crisis sanitaria y desempleo; se une a la lista de héroes anónimos que han apoyado durante esta crisis

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Jiromy Xool Pech, es una quinceañera que vive en la comisaría de Caucel, Yucatán, gastó sus ahorros para regalar comida a sus vecinos sim empleo Foto: Uno Platinum Facebook
Jiromy Xool Pech, es una quinceañera que vive en la comisaría de Caucel, Yucatán, gastó sus ahorros para regalar comida a sus vecinos sim empleo Foto: Uno Platinum Facebook

En estos cinco meses de pandemia varias jóvenes en México cumplieron 15 años, y esta fecha tradicional en la cual se acostumbra hacer una fiesta grande que simboliza su transición de la infancia a la adultez, les fue negada por la pandemia de coronavirus, y aunque muchas sí lograron hacer celebraciones en sus hogares junto a su familia, otras quisieron compartir acciones colaborativas en esta crisis, como fue el caso Jiromy Xool.

Desde el año pasado ella y su familia lograron juntar dinero para la fiesta al criar pavos en su casa, ubicada en Mérida, Yucatán, sin embargo la adolescente quiso recordar esta fecha con un noble gesto al regalar comida a las personas más necesitadas que han padecido falta de empleo debido a la pandemia mundial.

Jiromy Xool Pech, es una quinceañera que vive en la comisaría de Caucel, le pidió a sus papás usar el dinero que iban a invertir en la cena de sus XV años, para comprar comida y regalarla a los vecinos de su comunidad, donde ella fue testigo de sus penurias al quedarse sin empleo debido a la contingencia sanitaria por el COVID-19.

“En vez de fiesta, prefiero regalar comida a la gente, que se ayuden con eso”, señaló Jiromy, quien cumplió quince años el pasado 3 de agosto.

Con ayuda de sus familiares, preparó y repartió alimentos entre las familias de la comisaría que están pasando por un mal momento económico y que en muchos casos no pueden siquiera alimentar a su hijos.

Regalan comida para desempleados y médicos

Otros nobles gestos se han manifestado en toda la república, varios restaurantes han donado comidas personas afectadas por la crisis que acabó con miles de empleos.

Uno de estos casos fue el de Osiris Jiménez y su familia se organizaron para preparar alimentos nutritivos y regalarlos a las y los vecinos de Juchitán, Oaxaca, pues aseguran, es una forma de aligerar la crisis económica que enfrentan por esta pandemia del coronavirus.

Cuando el nuevo coronavirus comenzó a propagarse en México y las calles quedaron casi desiertas, un grupo de trabajadoras sexuales, en la céntrica ciudad de Toluca, quiso solidarizarse con los más necesitados y montó un comedor para ofrecerles un plato de comida.
Cuando el nuevo coronavirus comenzó a propagarse en México y las calles quedaron casi desiertas, un grupo de trabajadoras sexuales, en la céntrica ciudad de Toluca, quiso solidarizarse con los más necesitados y montó un comedor para ofrecerles un plato de comida.

Caldos, sopas, agua de avena y de pepino, entre otros alimentos, son las comidas que se comparten a las más de 400 familias de Juchitán, inclusive acuden habitantes de la localidad vecina de El Espinal.

La gente que llega recibe una porción considerable que le alcanzará para cuatro integrantes de su familia. La mayoría son mujeres y amas de casa, quienes acuden por los alimentos y los comparten con sus hijos.

Comunidad maker regaló caretas a médicos

Destacan también los esfuerzos de la comunidad maker, quienes juntaron sus ahorros y pusieron manos a la obra para imprimir caretas de protección a personal de salud para su protección ante la falta de insumos.

Pusieron a disposición del sector salud sus impresoras 3D, sus cortadoras láser y otras herramientas, para que los trabajadores de la salud pudieran lograr evitar contagiarse de este virus.

El niño Jorge Martínez usó sus ahorros para regalar caretas a personal de salud en Oaxaca Foto: Facebook
El niño Jorge Martínez usó sus ahorros para regalar caretas a personal de salud en Oaxaca Foto: Facebook

Se organizaron a través de chats de Telegram, Whatsapp y foros web de comunidades makers, incluso en otros países, que se han visto rebasados por el número de contagios que requieren atención médica y en donde tanto el sistema de salud como los voluntarios independientes no dan abasto a la demanda de equipo de protección.

Uno de estos casos precisamente fue el de niño de 12 años originario de Oaxaca, decidió juntar sus ahorros y su impresora 3D para diseñar e imprimir máscaras protectoras y así ayudar a los trabajadores de la salud que combaten el coronavirus. Jorge Martínez Gracida y su hermana Gigi ya han entregado un centenar de estas caretas a los hospitales de la comunidad.

Un enfermero ofreció ayuda a ancianos

Otro caso loable es el de un joven estudiante de medicina que colocó un letrero afuera de su domicilio en el cual ofrece hacer mandados y curaciones a personas de la tercera edad, para que no salgan de sus casas.

Con la simple intención de ayudar a sus vecinos adultos mayores, que por la contingencia sanitaria del Covid-19 no pueden ir de compras o a sus consultas médicas, Maximiliano Rivera Castro, un joven de 21 años que actualmente cursa el octavo semestre de Medicina en UVM Campus Saltillo, decidió ofrecerse como voluntario y marcar la diferencia.

En el exterior de su domicilio, ubicado en el fraccionamiento Portal del Sur, Maximiliano colocó un letrero para informar a sus vecinos sobre su intención de apoyarlos durante la contingencia.

Invitan a ayudar a vecinos económicamente vulnerables

Actores, locutores y ciudadanos grabaron un video con una idea solidaria para hacer más llevadera la cuarentena para personas vulnerables y que no tienen recursos económicos, que son los que más van a padecer esta cuarentena, la idea consiste en llevar despensas y productos de primera necesidad a personas vulnerables a nuestro alrededor para hacer más llevadera la crisis, con lo que esté en nuestras manos, ya sea poco o mucho hará gran diferencia en los hogares que no tienen nada.

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