Desde que la epidemia de coronavirus llegó a México, a finales de febrero, pero incluso semanas antes del primer caso del COVID-19 en el país, una figura comenzó a emerger. Hoy en día se ha convertido no sólo en el principal vocero del gobierno con respecto a la pandemia, sino que su figura se ha convertido en una de las más mediáticas de la política mexicana.
Se trata de Hugo López-Gatell, el subsecretario de Salud y doctor en epidemiología. El funcionario es, desde el comienzo de la crisis sanitaria, el vocero oficial del gobierno con relación al coronavirus, tanto que en el extranjero lo han llamado “El Zar del coronavirus en México”.
Y es que López-Gatell es la voz principal de la administración de Andrés Manuel López Obrador todos los días, cuando las autoridades sanitarias presentan, a diario y sin excepciones, la actualización del número de contagios y de fatalidades por COVID-19 en territorio nacional.
En ese rol, en el que el subsecretario ha llamado la atención de los mexicanos y de las redes sociales, es que López-Gatell reveló nueva información de los esfuerzos mexicanos para aplanar la curva de contagios y evitar una debacle parecida a la de algunos países europeos e incluso algunas partes de Estados Unidos.
La recompra de equipo médico a China
En una entrevista con Richard Ensor, corresponsal para México del diario The Economist publicada en Medium, el funcionario de la Secretaría de Salud (SSa) reveló que México efectivamente tuvo que recomprar mascarillas que le había vendido previamente a China durante el inicio de la pandemia de coronavirus.
“En retrospectiva, quizá no debimos haberlo hecho (venderles las mascarillas”, aseguró López-Gatell. “No lo hicimos. Pero no las recompramos a 30 veces (su precio), fue menos”, añadió, sin dar más detalles sobre el costo que tuvo volver a comprar equipo que México ya había producido.
“No haberlas vendido hubiera involucrado tomar decisiones en febrero que hubieran sido extremadamente disruptivas. Por ejemplo, hubiéramos necesitado que el gobierno declarara el estado de emergencia sanitaria en ese momento, anticipándonos a lo que estaba por venir, afectando completamente la dinámica social, económica y política”, destacó el funcionario.
Además, el epidemiólogo detalló las dificultades que ha tenido que sortear México para la compra de equipo médico necesario en el combate contra el COVID-19. “Hay equipamiento de protección personal que es de baja tecnología y para consumo masivo y otros que son de alta gama, pero no para un uso tan extendido”, dijo.
Hemos sufrido para encontrar el equipamiento, los hemos tenido que conseguir en pequeñas proporciones. Esta compañía tiene 50, esta tiene 120, esta otra 10, una más dos
La mayor cantidad de un sólo proveedor, indicó López-Gatel, fueron 200 unidades. Además, destacó los dos aviones que llegarán este miércoles, con artículos de protección médica, provenientes precisamente de China.
Abastecimiento de ventiladores y comida
El funcionario de la SSa también descartó que las fábricas de automóviles en México vayan a producir primero para otros países las partes de ventiladores necesarios en la lucha contra el coronavirus. “Una vez que lleguemos a la meta propia, no veo el problema, pero obviamente priorizaremos el consumo interno”, expresó.
Todavía no tenemos una respuesta masiva del sector industrial, pero hemos tenido algunas positivas: Volkswagen y Audi han ofrecido su ayuda, también otros a menor escala, como los maquiladores del norte, se han ofrecido
Además, detalló que, con la participación de las Fuerzas Armadas en la lucha contra el COVID-19, a través del Plan DN-III y el Plan Marina, donde se ofrece apoyo civil y no militarizado, el gobierno mexicano está definiendo el acceso a rutas para el abasto de comida esencial.
“Con ello, en cualquier momento dado, si la inmovilización causada por la pandemia o por las restricciones del gobierno resultan en escasez, tenemos mecanismos establecidos. Todavía no están en el campo, porque todavía no se necesitan, pero está planeado tener un suministro básico de granos, leche, entre otros”, destacó.
La información de la pandemia
Cuestionado sobre la supuesta falta de información y por qué el gobierno mexicano no ofrece el total de hospitalizaciones por enfermedades respiratorias agudas, como lo hace Brasil por qué la SSa no publica las bases de datos internas de los certificados médicos más nuevos, el funcionario argumentó que México no tiene la capacidad para hacerlo en tiempo real.
Es una excelente idea, la hemos considerado durante 10 años, estos números son muy útiles, pero el procesamiento de información (en México) es tan primitivo que toma un año, si tenemos suerte, en tener esa información
El funcionario explicó que no es un sistema en tiempo real donde los certificados de defunción se puedan convertir automáticamente en registros digitales. “Desearía que ese fuera el caso. En el tema de las admisiones en hospitales, también hay grandes limitaciones, si me dices que tienes las admisiones que ocurrieron ayer, por favor dámelas”, indicó López-Gatell al entrevistador en tono irónico.
Sin embargo, aseguró que, desde el principio de la pandemia, en enero, las autoridades sanitarias han dado la información disponible con la mayor claridad posible. Destacó, por ejemplo, la reacción de la prensa, que no esperaba este tipo de anuncios hasta que se realizara efectivamente el decreto de una emergencia sanitaria.
“Cuando estaba en la academia, daba un curso de seguridad sanitaria y siempre enfatizaba mucho que era completamente errónea la idea de que la información debe ser ocultada de la población. No sólo en términos éticos, para el individuo y para el gobierno, sino también en términos técnicos”, aseveró el funcionario.
“Hay manuales y libros de texto que podrían resumirse bajo la noción de que, entre más rápido hagas que la población participe en el problema, y los expliques con franqueza, de manera absolutamente transparente, añadiendo que ellos son parte de la solución, y dando las alternativas de lo que pueden hacer, más efectivo será que el gobierno y la sociedad pueden trabajar juntos hacia una solución”, abundó.
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