La pandemia de covid-19 y las medidas de confinamiento que se han adoptado, no solo en Colombia, sino en el mundo, han generado estragos en la salud mental de las personas.
Todos estos temas son de cuidado y de atención, pues, por ejemplo, las rutinas, crean una sensación de normalidad y control en nuestras vidas que nos permite gestionar los desafíos que se presentan.
Por otro lado, la manera en la que usted responde ante el estrés durante la pandemia del COVID-19 puede depender de sus antecedentes, el apoyo social de familiares o amigos, su situación financiera, su salud y antecedente emocional, la comunidad en la que vive y muchos otros factores.
Encargarse de los cuidados de familiares y amigos puede ser liberador del estrés, pero hay que mantener un equilibrio y no hay que olvidarse de cuidar de sí mismo. Sin embargo, es importante ayudar a otras personas a sobrellevar el estrés y los estragos de la pandemia.
En tiempos de mayor distanciamiento social, las personas pueden seguir manteniendo contactos sociales y cuidar de su salud mental. Las llamadas telefónicas o las videoconferencias pueden ayudarle a usted y ayudar a sus seres queridos a sentirse socialmente conectados, menos solos o menos aislados.
La salud mental es una parte importante del bienestar y la salud en general. Nos afecta en la manera de pensar, sentir y actuar. También afecta la manera en que manejamos el estrés, nos relacionamos con los demás y tomamos decisiones durante una emergencia.
El exceso de trabajo, las nuevas rutinas en casa y la reducción del apoyo y contacto social, han cambiado la forma en la que vemos el mundo. Por esto, manejar el estrés y la ansiedad es indispensable para tener un mejor bienestar y rendimiento en el trabajo y poder mantener un equilibrio entre la vida cotidiana y la vida laboral. Aquí le damos algunos consejos para lograrlo con los consejos de Jane Morales, life coach y meditation master de Puerto Rico:
Resolver problemas personales: Identifique y describa sus problemas de forma clara, rápida y precisa. Busque diferentes posibles soluciones o respuestas para estos.
Establecer nuevas rutinas: Las rutinas nos dan equilibrio en el día a día. Por eso, levántese temprano, haga ejercicio, medite, escriba un diario, ordene su casa o establezca un horario para cocinar con calma.
No perder contacto con amigos y familiares: El distanciamiento social es esencial para frenar la propagación del virus, pero también es importante contactar a sus familiares y amigos regularmente. Una llamada por teléfono de vez en cuando es importante.
Ayudar a los demás: El mundo no gira alrededor nuestro, al quitar el foco de nosotros mismos, podemos experimentar menos estrés y una mayor sensación de bienestar.
Tiempo para actividades personales: Elija un hábito personal y hágalo a la misma hora todos los días. Ejercicio, meditación, caminar al aire libre, leer, tomar un baño, etc.
No leer noticias todo el tiempo: Establezca límites en el consumo de noticias y medios de comunicación..
Menos redes sociales: El pánico y las emociones negativas abundan en las redes sociales. Intente disminuir su uso.
Meditar: La meditación puede ayudar a restaurar su sentido de control. Al concentrarse en su respiración o en una palabra o mantra, se activa su sistema nervioso parasimpático y es un antídoto contra el miedo, el estrés e, incluso, la depresión.
Apoyar a amigos y familiares: Cuando tenemos miedo, puede ser tentador repetir mensajes negativos, pero animar activamente a familiares y amigos es realmente importante para todos.
Tomar el control de esta realidad: Debemos enfocarnos en lo que podemos controlar y hacer cosas que son buenas para nuestra salud y para los que nos rodean. Los factores externos no están en nuestras manos, y lo mejor que podemos hacer es tener bajo control los aspectos de nuestras vidas que dependen de nosotros.