Lejos de las grandes multinacionales que trabajan en modo industrial, existen cadenas de restauración que trabajan por defender el delicado arte de la pizza artesanal, elaborada con cariño y con ingredientes de calidad. Lo que puede parecer una paradoja, es una realidad absoluta reforzada por premios como el de 50 Top World Artisan Pizza Chains 2024.
El ranking de las 50 Mejores Cadenas Mundiales de Pizza Artesana está elaborado por 50 Top Pizza, la guía mundial más importante en lo que a esta masa italiana se refiere. Los resultados de este 2024 para las Mejores Cadenas de Pizza Artesana del Mundo se presentaron el pasado miércoles 27, durante la Cumbre Mundial de la Pizza 2024 celebrada dentro del Salón Europeo de la Pizza en Londres.
Es el segundo año consecutivo que Grosso Napoletano consigue posicionarse como la mejor cadena de pizzerías artesanales de todo el mundo. En esta ocasión, el segundo puesto fue para Da Michele, que lleva 150 años funcionando en el corazón de Forcella, en Nápoles, y hoy cuenta con más de 60 locales repartidos por varios continentes.
En tercera posición se encuentra el Grupo Big Mamma, una organización nacida del amor por Italia de dos empresarios franceses, Victor Lugger y Tigrane Seydoux que hoy cuenta con numerosos locales en Francia, Inglaterra y Alemania. También en España, donde se encuentran al frente de restaurantes italianos de moda como son Bel Mondo, Villa Capri y Circolo Popolare Madrid.
La mejor cadena de pizzas artesanas del mundo
Fundada en 2017 por dos madrileños, Jorge de Blas y Hugo Rodríguez de Prada, Grosso Napoletano tiene como objetivo traer el estilo de pizza napolitano a España, primero a Madrid y luego a Barcelona, Sevilla, Zaragoza y en otros centros repartidos por toda la Península Ibérica. En los últimos años, han abierto locales en Valencia, Murcia, Pamplona, San Sebastián, Vitoria, Gijón… Este galardón consolida a la cadena, por segundo año consecutivo, como un referente indiscutible en la excelencia de la pizza artesanal a nivel mundial.
El alma de Grosso Napoletano reside en su fidelidad a la tradición napolitana. Sus pizzas son de masa fina y elástica, con unos bordes gruesos y esponjosos y, por encima, ingredientes 100% de origen italiano. Su masa se elabora con harina de fuerza italiana y reposa durante 48 horas para conseguir la doble fermentación que caracteriza a la clásica pizza italiana. Sus pizzas al estilo napolitano se hornean entre 60 y 90 segundos a unos 500 grados centígrados, en un horno de piedra refractaria fabricado a mano en Nápoles por la cuarta generación de una familia de artesanos.
Como ingredientes añadidos, en la cadena utilizan productos de máxima calidad, importados directamente de Italia, como el Tomate Marzano y la Mozzarella Campana DOP. De Italia llegan también sus pizzaioli, concretamente desde Nápoles, trayendo hasta aquí la más auténtica tradición cocinera.
Con estas bases, Grosso Napoletano ha creado una carta que combina las pizzas más clásicas de la tradición napolitana, con recetas como la Diavola o la Margherita, y otras propias de la casa como la Hellboy Di Paulie Gee, uno de sus best sellers: una pizza con base de tomate San Marzano, parmesano, mozzarella fiordilatte, soppressata piccante (salami piccante) y un toque final de hot honey. Asimismo, su carta incluye algunos antipasti clásicos de la cocina italiana como el vitello tonnato o la parmigiana di Melanzane, una lasaña de berenjenas cocinada al horno de leña.
Además, Grosso Napoletano cuenta con una línea de restaurantes paralela, locales que cuentan con una particularidad: todo lo que en ellos se sirve se elabora completamente sin gluten. Bajo el nombre de Grosso Napoletano Senza Glutine, la cadena sirve pizzas con una masa hecha con harina de los mejores cereales sin gluten (arroz, maíz y trigo sarraceno), con un proceso de doble fermentación de 48 horas.