Una situación aparentemente trivial en un restaurante se convirtió en un debate en las redes sociales. Todo se dio por una reseña negativa en Google sobre un bar, que se viralizó en los últimos días.
Un grupo de 10 personas llegó al establecimiento a la 1:00 de la madrugada, a solo 30 minutos del cierre. La camarera a cargo, al ver la magnitud del grupo y el limitado tiempo disponible, les planteó una condición clara: los atendería si realizaban sus pedidos en un lapso de cinco minutos.
“Lamentable el servicio, no puedo decir nada más que cuando fuimos a intentar tomar algo 10 personas un día 2 de agosto a la 1:00 de la noche, nos dijo la camarera tal cual, que si pedíamos en 5 minutos nos atendía, si no, no, y que a la 1:30 cerraban que también tienen vida y cosas que hacer”, decía la reseña.
En el texto, este cliente aseguró: “Vamos, que molestábamos y 10 personas le iban a retrasar en el cierre del local, quedando todavía 30 minutos para el cierre. Me imagino que no es la dueña del local obviamente, la gente suele tener negocios para ganar dinero, y si echas a tus clientes, poco vas a ganar”.
La reseña publicada por el cliente se viralizó tras ser compartida en la cuenta de Soy Camarero en la plataforma X (anteriormente conocida como Twitter). La publicación alcanzó rápidamente más de 2.000 me gusta y generó un aluvión de comentarios. Lo que comenzó como una queja aislada se transformó en una discusión masiva en redes sociales, donde la mayoría de las opiniones se mostraron a favor de la decisión de la camarera.
Entre las respuestas, la mayoría de los usuarios defendieron la postura de la empleada, señalando que quienes critican este tipo de situaciones no estarían dispuestos a extender su propia jornada laboral bajo las mismas condiciones.
“Hace tiempo dije que había que poner reseñas a los clientes y ya se está tardando... Para que cuando venga gente así, que se piensa que la vida es solo para ellos, no se les sirva. Y empiecen a valorar un poquito más a los demás”, escribió uno de los usuarios.
“Ya caí en esa. Después de advertirles del horario, les sirves y después se te apalancan diciendo ‘si ibas a cerrar no tenías que habernos servido’. A partir de esa, nunca más hasta 15 min. antes de cerrar”, relató otra cuenta.