Una tranquila noche de trabajo en una pastelería del sur de Monterrey, México, se convirtió en una experiencia inolvidable para Sebastián de León, un joven empleado que, al finalizar su turno, tuvo un encuentro inesperado. Mientras sacaba la basura del local, se topó con un enorme oso negro en el estacionamiento.
La escena, capturada en video por el propio trabajador, refleja la sorpresa y el asombro que le produjo este encuentro tan cercano con la fauna silvestre, un fenómeno cada vez más común en esa zona de la ciudad.
El avistamiento ocurrió en la colonia Satélite Acueducto, donde Sebastián, después de sacar las bolsas de basura, se dispuso a cerrar la pastelería. Fue entonces cuando notó la presencia del oso buscando comida en el cesto de basura del establecimiento.
El joven, visiblemente impactado, registró la situación en su celular, comentando con nerviosismo su experiencia. “Cerré la puerta, subí para cerrar la pastelería, bajo y vean el susto que me voy llevando”, relató en el video, donde también mencionó el tamaño del animal con una mezcla de miedo y admiración.
Monterrey es una ciudad donde los encuentros con osos negros no son inusuales, especialmente en las zonas cercanas a las montañas. El establecimiento en el que se registró el incidente está ubicado en el número 6770 de la calle Paseo del Acueducto, en una área donde estos animales suelen ser vistos en busca de alimento, particularmente durante ciertos periodos del año.
Recomendaciones de seguridad al encontrarse con un oso
La primera regla es mantener la calma y la distancia. Nunca hay que acercarse, incluso si parece tranquilo. Los osos son animales impredecibles, y cualquier movimiento repentino puede desencadenar una reacción peligrosa. Además, correr no es una opción segura, ya que los osos son rápidos y esto podría provocar que el animal reaccione instintivamente con una respuesta de persecución.
Otra recomendación es hacerse notar sin parecer una amenaza. Hablar en un tono suave y tranquilo ayuda a que el oso sepa de tu presencia sin sentirse intimidado. A la vez, es importante retroceder lentamente, sin darle la espalda y manteniendo al oso siempre a la vista.
Si el oso se aproxima, es recomendable hacerse más grande y visible. Levantar los brazos, o extender una chaqueta o mochila puede hacer que el animal te perciba como una amenaza mayor y se aleje. En ningún caso se debe provocar al oso, ni intentar alimentarlo o fotografiarlo a corta distancia, ya que esto puede resultar en una confrontación peligrosa.
Para aquellos que frecuentan zonas con osos, como las áreas cercanas a las montañas en Monterrey, contar con un spray para osos puede ser una medida preventiva eficaz.
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