Australia fue designada como el país más deseable del mundo en 2024, un título que la nación oceánica obtiene por tercera vez en los últimos cuatro años, según los resultados de los Wanderlust Reader Travel Awards, organizados por la revista británica Wanderlust.
La participación en estos premios es completamente gratuita, lo que permitió a los viajeros de todo el mundo unirse a esta celebración del turismo, emitiendo su voto para elegir a los ganadores de cada categoría. En 2023, la votación contó con la participación de más de 91.000 lectores.
En esta edición, más de 168.000 viajeros de todo el mundo participaron en la votación, que superó los 3 millones de votos distribuidos en 22 categorías. Australia, conocida por sus paisajes naturales y una cultura vibrante, lidera esta clasificación, superando a Canadá y Japón.
Este incremento refleja el creciente interés por los destinos y servicios turísticos que destacan por su popularidad y capacidad para ofrecer experiencias auténticas y únicas. La votación pública sigue siendo el corazón de los premios, permitiendo que los propios viajeros decidan qué lugares y operadores merecen ser reconocidos por su excelencia y atractivo.
El interés por Australia se disparó en los últimos años, no solo por sus famosas playas y sus modernas ciudades como Sídney, también por un renovado enfoque hacia la cultura indígena.
Según los organizadores de los premios, este creciente atractivo podría estar relacionado con el aumento en la disponibilidad de tours culturales gestionados por comunidades aborígenes y de las Islas del Estrecho de Torres.
Estos recorridos ofrecen a los turistas una oportunidad única de explorar el país a través de los ojos de sus habitantes originarios, un viaje desde las raíces profundas de Sídney hasta los desiertos rojos del Territorio del Norte, donde la historia de 65.000 años de cultura indígena se fusiona con los paisajes más impresionantes del mundo.
El ascenso de Australia en la clasificación no es solo una cuestión de tendencias turísticas, además es un reflejo de un mayor reconocimiento global de su diversidad y su riqueza cultural. Los turistas ya no buscan solo la belleza natural, quieren comprender la historia detrás de esos paisajes, algo que, como señalan los expertos, podría ser una de las claves del éxito de los recientes aumentos en las visitas al país.
Un destino lleno de contrastes para los viajeros
Australia se presenta como un destino ideal para quienes desean combinar trabajo y aventura. Entre los destinos más destacados, Sídney, la ciudad más poblada del país, se posiciona como un lugar emblemático que atrae tanto por su dinamismo como por sus icónicos monumentos. La Opera House, el Puente de la Bahía y las mundialmente conocidas playas como Bondi Beach son solo algunos de los puntos que hacen de la ciudad un destino de visita obligatoria, tal como señala el portal YoMeAnimo.
Contrario a la creencia común de que Sídney es la capital, la ciudad destaca por su vida nocturna, la calidad de sus museos y por ser un punto de encuentro para los turistas de todo el mundo. Además, el Tower Eye, uno de los miradores más altos de la ciudad, ofrece vistas panorámicas que permiten admirar la extensión de la ciudad y sus alrededores.
Otro gran atractivo es uno de los refugios naturales más sorprendentes: las Montañas Azules. Este parque nacional es famoso por sus formaciones rocosas, como las Three Sisters, y sus impresionantes cataratas de Wentworth Falls, que ofrecen un espectáculo visual único. La región es también hogar de una rica fauna, incluyendo especies autóctonas como koalas, canguros y dingos, lo que convierte a las Montañas Azules en un lugar perfecto para quienes buscan disfrutar de la naturaleza en su estado más salvaje.
La diversidad de Australia es innegable, y se refleja tanto en su oferta urbana como en la belleza natural que caracteriza a este continente. Desde la modernidad de Sídney hasta los paisajes tranquilos de las Montañas Azules, el país invita a los viajeros a descubrir sus múltiples facetas.
Este ranking de los países más deseables subraya una tendencia interesante: los viajeros no solo buscan destinos populares, sino aquellos que ofrecen una experiencia más profunda, que permita conocer sus culturas, tradiciones y, sobre todo, sus historias. La búsqueda de experiencias auténticas parece ser una prioridad para los viajeros de todo el mundo.